Autobiografía lectora David Fernando Pico Villalba
Enviado por Rebecca • 2 de Enero de 2019 • 2.156 Palabras (9 Páginas) • 387 Visitas
...
Mi travesía en la lectura continuó con obras que mencionaré a continuación. No explicitaré todo lo que leído, ya que no logra cautivarme. ¡Cataplum! Un golpe de ninja casi mortal que hirió gravemente al rubio americano. Pigmeo, un joven africano de corta estatura llega a Estados Unidos a cometer un atentado terrorista. ¡Poom! ¡Cataplam! ¡Poww! Palahniuk, las onomatopeyas, tachones y la realización de una visión por parte de africanos ante los americanos es un reflejo del mundo actual y la confrontación secreta y escurridiza del corrompimiento y recelo de la mente humana ¡Boom! ¡La bomba aturde la cabeza! ¡Paww! ¡Granadas en centros públicos! ¡Catapum! Extinción humana… no obstante, no toda será extinta… ¡Bam! ¡Pobres de porquería, nuestro monopolio nos permite comprar terrenos en la luna y en marte mientras todos arden y sus huesos baratos son polvo! Polvo… me recuerda a Pessoa y sus poemas en verso libre “Ossos em pó, ¿Nós podemos pensar em deus? ¡Boa pergunta! O Buena pregunta. Tornam-nos pequenos porque nos tiram todo o tamahno para podermos olhar, E tornam-nos pobres porque a nossa única riqueza é ver. Pido disculpas si no se entiende esta parte de mi discurso, sólo demuestro mi amor por leer libros en portugués y francés.
De Pessoa y sus atractivos versos en lengua portuguesa llega una brutal transición. Notas musicales graves, Marion Crane entra al baño de su habitación y mientras toma una ducha un misterioso personaje la acecha y la asesina a puñaladas. ¿Conocida? Es una de las escenas más famosas de la historia del cine. Peter Conrad crea un profundo análisis acerca de la ideología de Hitchcock, y lo más inspirador, un acercamiento al pensamiento maníaco de André Bretón. El maestro del suspense y su relación con el surrealismo según Bretón: el acto surrealista, en su más pura manifestación, consiste en tomar un arma, salir a la calle y asesinar a todo el que se encuentre allí. Es bizarro tomar una idea de tal nivel de demencia. Sin embargo, ¿los grupos terroristas como ISIS, o el Ku Klux Klan no están siendo influenciados por esta distorsión surrealista Bretoniana? Hitchcock sostenía una visión menos aturdida y más discreta que la anterior, pero eso no le impedía atacar a rubias impuras como Janet Leigh interpretando a Marion Crane, Jessica Tandy en “Los pájaros” interpretando a Lydia Brenner en una metáfora, que como se dijo anteriormente, es más sobria por ser de Hitchcock, pero que aun así mantiene la demencia de Bretón; Los asesinos que salen a matar a la tranquila ciudad californiana y luego acechan a la rubia no son humanos, son aves. Peter Conrad resultó ser un escritor cautivador en la era contemporánea de mi vida.
El maestro del suspense y el discurso analítico de Conrad me condujeron a un descenso más profundo, las cavernas ardientes del terror en su esencia. La nueva obra de Conrad amplía su visión cinematográfica, que me exhorta a detenerme entre la teoría, el contexto y la escena de cada una de las películas del género ¿Cómo se argumentaría mi posición desde el capítulo de la mujer con patologías psicópatas? El género se llama “Grand Dame Guignol” dedicado a todas aquellas mujeres que rompen el paradigma del asesino masculino. Peter Conrad, el autor de esta epopeya impresa, analiza a Catherine Tramell, la hermosa y seductora escritora de novelas que reflejan crueles asesinatos. Alto. Instinto básico destaca a Sharon Stone y su lado mórbido y extremadamente sensual en su época dorada, los noventa ¿Instinto básico se trata sólo de la pasión excitante y contagiosa de Ms. Stone, su legendario cruce de piernas protagonizando a su vez la escena más pausada de la pantalla grande? Esta fue mi primera lectura de la película. Conrad no lo analiza de manera carnal; se trata de una liberación femenina acompañada de una revolución sexual. Las novelas de Catherine Tramell describen un aturdimiento de sus cortas relaciones que la hacen cobrar venganza y alimentar el instinto siniestro, justo como Glenn Close encarnando a Alex Forrest en Atracción Fatal, Joan Crawford en “El caso de Lucy Harbin” o una simple psicopatía congénita tal como le ocurre a Kathy Bates interpretando a Annie Wilkes en “Misery”.
Luego de Palahniuk y su boom entre comunidades marginadas y países imperialistas, Peter Conrad y su colosal narración analógica destacando meticulosamente a Hitchcock y su estrafalaria manera de representar el séptimo arte, como también su manifestación teórica del género del terror llevado al cine, retomé la medicina. Pum pum, pum pum, pum pum, ahora la bomba humana aterrizó mis conocimientos, yendo por la senda de la cardiología, la conducción sanguínea, las esquinas que dirigen a las patologías congénitas y los defectos del tabique interventricular e interauricular. Una persona que tenga moretones en la piel, los pies y los labios no es por consecuencia de un amor salvaje o vengativo, no, es posible que sufra de cianosis o la mezcla de sangre pura y desoxigenada causada por una enfermedad congénita. Su septo interventricular no se cerró por completo o un ductus arterioso persistente le impide una circulación adecuada. La práctica médica y la apertura a la ciencia de Mcgraw me sugirió la realización de diagnósticos inesperados; posible pericarditis paternal a tres pasos de mi habitación, anginas inestables por tabaquismo y arritmias incongruentes son algunas de las detectadas a mi alrededor hace un mes. En fin, el corazón tiene la posibilidad de sufrir una gran variedad de patologías pediátricas, isquémicas, pericárdicas, endocárdicas, miocárdicas y postoperatorias. Las podría explicar en su totalidad, pero este no es el momento adecuado para hacerlo. Algo sorprendente acerca de la cardiología que descubrí en los fidedignos libros de gran tamaño y repletos de vocabulario médico son los llamados vector de derivaciones electrocardiográficas, interpretación de un electrocardiograma y un fonocardiograma o auscultograma. Cada uno posee elementos y grafías que dependen de los puntos seleccionados del cuerpo en los cuales se pueden registrar la actividad cardiaca. De nuevo, podría explicarlo en su totalidad, pero considero que sería una extensión egoísta, y que mis colegas deben tener un turno respetado para expresar sus experiencias lectoras.
...