A Sócrates, considerado uno de los más grandes filósofos
Enviado por poland6525 • 1 de Febrero de 2018 • 1.485 Palabras (6 Páginas) • 435 Visitas
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Mientras Sócrates se encargaba de ayudar a la gente para que puedan conocerse a ellos mismos y así reconocer sus limitaciones, otros filósofos criticaban los valores tradicionales que él difundía como el bien, la verdad, la justicia o la belleza. Éstos eran los denominados sofistas y aunque Sócrates fue confundido con uno de ellos se opone a éstos al considerar que en sus enseñanzas no se preocupaban por la cuestión de la verdad y el bien, sino sólo por el arte en el manejo de la palabra con el fin de persuadir.
Los procedimientos llevados a cabo por él, fueron los que provocaron que se lo acusara de ser un hombre peligroso para la sociedad por pensar y cuestionarse e inculcarle esto mismo a las demás personas. Esta acusación quedo plasmado en la obra escrita por Platón “Apología de Sócrates” (399 a.C.).Se lo imputó deocuparse de las cosas celestes, de hacer más fuerte el argumento más débil, de no creer en los dioses y de engañar a los jóvenes. En la obra el mismo filósofo comienza refutando las imputaciones que se le atribuían, explicando que solamente se relacionaba con la gente de la sociedad porque lo habían designado como una persona muy “sabia”, aunque era consciente de que en realidad él no sabía nada. En cuanto a corromper a los jóvenes, probó que eso no era así y que si había alguien que lo hacía no era solo él, sino que cualquiera podía hacerlo. Fue acusado también de no creer en los Dioses del Estado y si creer en los demonios. En cuanto a la acusación de no creer en los Dioses y sí en los demonios, se defendió argumentando que sí creía en los Dioses pero en el supuesto caso de que esto no fuera así y creyera en los demonios, estos eran los hijos de los Dioses. Por lo tanto, era lo mismo. Supo desde un principio las razones del odio que se le ejercía e intuía cuál iba a ser el desenlace de ese juicio, por ello luego de terminar el interrogatorio, le dijo a los jueces: “de todas maneras jamás obrare de otro modo por más que tenga que sufrir mil muertes.”Estaba tan convencido de sí mismo y de los principios seguidos que había decidido morir por ellos, de manera digna, sin rogar, implorar, ni envolver a su familia en ello. Afirmó no temer a la muerte, por lo que confiará plenamente en su sólida argumentación. El jurado, sin embargo, lo encuentra culpable. Una vez más explícito que la muerte no era un mal, sino un bien ya que no se le podía temer a algo que se desconocía. Así concluye la apología, donde todas sus reflexiones y analogías son válidas hoy como en su tiempo, aunque en aquel entonces, sus palabras no llegaron a convencer a los jueces de lo que él estaba convencido: estaba siendo culpado injustamente sólo por ser filósofo. [pic 2]
Sócrates fue un filósofo interesado en entender la vida misma, en perseguir hasta encontrar la sabiduría y justamente pensaba por eso que la sociedad necesitaba de él. La sociedad necesitó de Sócrates para comenzar a cuestionarse, él le otorgó las herramientas de la filosofía para que se las implementara en todo ámbito posible y logró que se comenzara a pensar para llegar a los conocimientos a partir de cada uno y no a través de teorías pre conceptualizadas. Aquí se encontraba la virtud, en el conocimiento. En la capacidad de poder reflexionar, preguntarse y crear conceptos propios.
Su inconformidad fue la ignorancia popular, que lo impulsó a oponerse al escaso conocimiento de la sociedad y a los que creían saber más de lo que realmente sabían, a los que se consideraban sabios. Lo que buscó fue hacer pensar para llegar a conocer cuáles eran los verdaderos saberes y de dónde se los había tomado. Buscaba que las propias personas se den cuenta de que en realidad eran virtuosas, solo que lo tenían que descubrir. Por esto no reconoció su culpa y se sacrificó por la sociedad, estaba seguro de que lo que ofrecía era un bien y que matando gente para que no censure la vida y el pensamiento establecido, sólo se lograba alejar la virtud. [pic 3]
"Es hora de irse, yo para morir, y vosotros para vivir. Quién de nosotros va a una mejor suerte, nadie lo sabe, solo los dioses lo saben". Así fue luego como Sócrates dio por terminado el juicio al que se lo había imputado y decidió morir.[pic 4]
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