Agua oxigenada, química.

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- Metodología

- Materiales

- Agua oxigenada

- Sangre

- Jeringas

- Vaso pequeño de vidrio

- Fosforo

5.2 PROCEDIMIENTO

- Primero hay que extraer la sangre de la persona a través de una jeringa, porque para realizar este experimento se necesita sangre fresca sin coagular.

- Seguidamente colocar en el vaso de vidrio unos 3cm aproximadamente de agua oxigenada o peróxido de hidrogeno.

- Ahora hay que verter la sangre obtenida en el vaso, observaremos como comienza a producirse una densa espuma.

- Por ultimo acercaremos un fosforo hacia la espuma con mucho cuidado, se lo debe hacer lentamente porque si se hace lo contario podría ocurrir una pequeña explosión.

¿CÓMO FUNCIONA?

Sabemos que el agua oxigenada se utiliza como antiséptico en heridas. Resulta que muchas bacterias son anaerobias, es decir mueren en presencia de Oxigeno, y como el contacto de la sangre con el agua oxigenada libera este gas, las termina matando.

Esta sustancia en cuestión (agua oxigenada) se descompone en agua y oxígeno, es posible realizar la descomposición mediante rayos ultravioletas.

La sangre contiene una enzima, llamada catalasa que actúa como un catalizador del peróxido de hidrogeno.

La reacción química que ocurre en este experimento es:

H4O4 H4 + O2[pic 1]

En dicha fórmula no aparece la enzima catalasa. Esta es una virtud de los catalizadores, intervienen en la reacción, pero cuando esta finaliza no se encuentran entre los productos finales. Es decir, son solo un intermediario que acelera la reacción. Al colocar la sangre dentro del vaso con agua oxigenada, la catalasa acelera la descomposición del peróxido de hidrogeno y se libera oxígeno en forma gaseosa, el cual produce la espuma blanca que vemos en el experimento.

Cuando se acerca la llama a la espuma y reventamos las capsulas de las mismas, el oxígeno alcanza la combustión y la “aviva” porque esta sustancia es oxidante.

- Conclusiones

- Se logró observar que se produce una reacción química cuando se vierte la sangre en el agua oxigenada (peróxido de hidrogeno) produciendo un gas que rápidamente se eleva por el recipiente en forma de espuma.

- Nos pudimos dar cuenta que la sangre tiene una enzima que actúa como catalizador siendo esta un intermediario que acelera la reacción o descomposición del agua oxigenada (peróxido de hidrogeno).

- Logramos experimentar que cuando se acerca un cerillo encendido a la espuma, y se revienta las cápsulas de las mismas, el oxígeno alcanza la combustión y “aviva” la llama ya que, como sabemos, esta sustancia es oxidante.

- Recomendaciones

- Realizar este experimento con mucho cuidado para evitar que los líquidos se derramen en el lugar de trabajo

- Colocar los elementos de manera correcta y en orden para que el experimento funcione.

- Poner la dosificación adecuada de sangre y de agua oxigenada

- Manipular con cuidado los cerillos encendidos para evitar quemaduras debido a que se producen destellos de luz (mini-explosiones).

- Bibliografía

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Pinto G., Castro Acuña C. M., Martínez Urreaga J. (2006) Química al alcance de todos. Madrid. Pearson Educación. pp. 142-143.

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- Anexos

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