Convergencia digital vista desde los jóvenes consumidores de información en plataformas tecnológicas

...

Los profesionales encuestados, en mayor cantidad laborando, se caracterizaron por leer despacio las preguntas, al parecer con el objetivo de discernirlas muy bien para elegir la opción adecuada en contraste con los jóvenes que respondían por salir del paso. Ante ese evento es posible percatarse de que con la misma velocidad con la que respondían los jóvenes aspiran a que la información llegue a sus manos. La lectura previa a responder en ese caso fue nula. Los mayores reflejaron más empatía al recibir una encuesta impresa para llenar con bolígrafo que los jóvenes. Al solicitarle a algunos que contestaran se dio una contraindicación de su parte en la que afirmaban que con mucho gusto lo harían pero que si era posible enviarles un link a su correo. De ser así, quién necesita la información a investigar debe sujetarse a que el público responda en el tiempo en que sea posible según su horario o disponibilidad y como ventaja se tendría que al ser digitalizada la información desde un principio, sería más fácil cuantificarla después y hacer el registro estadístico correspondiente.

Otro rasgo notorio fue que las personas que respondieron el sondeo se sintieron a gusto con el número de preguntas y las opciones disponibles. En ningún momento se solicitó marcar por una respuesta que no estuviese dentro de las opciones, gracias a que el tema que se está tratando es conciso con la brevedad y claridad de métodos de estudio.

Resultados

La encuesta contabilizaba diez preguntas, de las cuales cuatro eran principales y las demás consecuentes a esas cuatro. En el orden de realización se visualiza de la forma anexada más adelante. (Ver anexo 1)

Las cuatro cuestiones principales fueron:

- Medio preferido para informarse

- Radio/TV

- Medio digitales (.com)

- Prensa

- No se informa

- Visualización de la hora

- Reloj

- Celular

- Tableta

- Pregunta en público

- Medios de lectura

- Elementos impresos (Libros, revistas y demás)

- Elementos digitales (Computador, tableta y demás)

- Búsqueda de información

- Libros impresos/enciclopedias

- Buscadores en línea

- Bases de datos digitales

De la primera pregunta, el resultado fue que en un porcentaje mayor lo jóvenes se informan en medios digitales y toma el segundo lugar la radio y/o televisión. Se encontró que la preferencia surge en el momento en que los medios productores de noticias (en el territorio colombiano Semana, El Tiempo y El Espectador, por ejemplo) anexan el link de cada noticia que se registra en su sitio web a redes sociales y a través de la red son compartidos los diferentes acontecimientos que reproducen los medios.

Usualmente, los jóvenes no visitan repetidamente las páginas en línea de los medios, razón por la cual las redes sociales que sí son frecuentadas en reiteradas ocasiones se clasifican como otra forma de reproducir mayor contenido. Si una noticia gusta es compartida en el muro de la persona en una red social como Facebook, hecho que difunde mucho más la publicación. Así como también mencionar a otra persona en un comentario o etiquetarla en las fotos, y yendo más lejos, enviarle la dirección en un mensaje privado. (Ver anexo 2)

La segunda pregunta tiene como objetivo analizar si la población de esta generación de sociedad en red ha dejado de usar los implementos que cumplen funciones individuales para adquirir dispositivos que suplan más necesidades. En épocas anteriores del Siglo pasado, la visualización de la hora se realizaba a través del reloj como medio principal y casi único si no se tienen en cuenta formas un poco rudimentarias. Lo que se encontró fue que el reloj continúa satisfaciendo esa necesidad y aparentemente es una necesidad básica, es decir, el control del tiempo es una necesidad básica. Sin embargo, la competencia del reloj es el teléfono móvil. Así como muchos se valen del reloj, otros se percatan del tiempo en su dispositivo e incluso desconocen como leer relojes análogos, prefiriendo la hora en formato digital, tal y como es configurada en los ‘smartphones’ que poseen la mayoría. (Ver anexo 3)

La tercera pregunta es hecha con el fin de conocer si se realiza una lectura eficaz en los aparatos que hoy cuentan con la posibilidad de reproducir texto. Fue sorpresivo como en un grado mayor los jóvenes se sostienen principalmente en leer mediante libros impresos, literatura en general. El argumento dado por ellos afirmaba que para efectuar una buena lectura en la que se entendiera la tesis o idea principal y los postulados necesitaban resaltar manualmente el texto, escribir al lado de cada párrafo lo indagado y desglosar la información con el material físico. Por otro lado, quienes escogieron los elementos digitales para leer postularon que hacerlo en los dispositivos no les generaba un costo mayor, tal como lo genera la compra de un libro o la impresión de las páginas de un artículo. Además de que el contenido que lean se encuentra siempre disponible para ser reenviado casi que inmediatamente (con sólo las opciones de cortar y pegar) a cualquier persona con la que se desee compartir. (Ver anexo 4)

La cuarta pregunta supone descubrir el proceso que los jóvenes llevan a cabo para investigar. La búsqueda de la información desde tiempos atrás ha sufrido diferentes tipos de transformaciones. En un recorrido de tiempo se dice la información llegaba a través de la oralidad, mucho después la imprenta revoluciona el modelo y posteriormente los medios digitales devoraron a los otros dos. Hace algunos años, si se requería información el proceso a seguir era dirigirse a una biblioteca, los libros eran la salvación de cualquier duda. Hoy en día, con sólo digitar una palabra la red expulsa miles de páginas que contienen la información solicitada. Si se quisiera criticar la forma actual, se diría que es un proceso facilista que fomenta la mediocridad intelectual desde que se entrega información sin que sea necesario abordar en la lectura un contexto especifico. (Ver anexo 5).

Discusión

Consecutivo