Cultivo. Requerimientos Temperatura: la temperatura ideal para el crecimiento y desarrollo del cultivo

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Las necesidades de Nitrógeno y Fósforo son crecientes al final del ahijamiento. Finaliza el ahijamiento con la diferenciación de las glumas.

Los objetivos durante esta fase son obtener un buen número de macollos que produzcan espigas, y obtener un buen número de hojas por planta y macollo.

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Encañazón

La duración de esta fase es muy constante y es de alrededor de 30 días. Tiene lugar una vez que comienzan a elevarse las temperaturas, los nudos pierden la facultad de emitir hijos y comienzan a alargarse los entrenudos del tallo. La encañazón consiste, por tanto, en el crecimiento del tallo por alargamiento de los entrenudos.

La caña sigue alargándose durante el espigado y hasta el final de la madurez, alcanzando longitudes diferentes según las variedades. La altura del tallo no tiene relación con la producción de grano, pero sí con la de paja, que es mayor en variedades más altas.

La caña no queda al descubierto todavía en esta fase, pues no sale de entre las hojas hasta el espigado. En esta fase queda rodeada por la vaina. El grosor de la caña varía según las variedades, siendo frecuente que las cañas gruesas se den en variedades de poco macollaje o ahijamiento.

Durante la fase de encañado la planta sufre una gran actividad fisiológica que no finaliza hasta la madurez. La extracción de elementos nutritivos del suelo es muy elevada, sobre todo en nitrógeno. La extracción de agua del suelo empieza también a ser muy considerable. Cuando la espiga empieza a apuntar entre las hojas comienza la fase de "espigado". En este momento comienzan a ser peligrosas las heladas tardías de primavera.

Los estambres se secan, se caen y el ovario fecundado va creciendo, convirtiéndose en un grano de trigo verde, hinchado y lleno de un líquido lechoso, a partir de este momento comienza la madurez del trigo.

El objetivo durante esta etapa es obtener un elevado número de espigas y flores.

Espigazón o Floración

El período de espigazón o floración es el de máxima actividad fisiológica, con una transpiración y una extracción de humedad y alimentos del suelo que llegan al máximo, cuya duración es aproximadamente de 30 días. En esta fase emergen y florecen las espigas, y se produce la autofecundación de las flores. No todas las flores producen granos.

Los azúcares de las hojas inferiores van emigrando a los granos de trigo que se forman mientras las hojas se van secando y se forman las cubiertas del grano, influidas por el peso de los ovarios. La cantidad de agua necesaria para transportar a los granos de trigo las sustancias de reserva, hace que las raíces desequen la tierra con facilidad, por ello el nivel de agua en el suelo en esta fase resulta muy importante.

El objetivo durante este período es obtener un buen número de granos por espiga.

Maduración / Llenado de Grano

El período de maduración comienza en la "madurez lechosa", cuando las hojas inferiores ya están secas, pero las tres superiores y el resto de la planta está verde. Este período tiene una duración aproximada de 15 días y una vez que se entra en madurez lechosa la planta detiene su crecimiento.

Seguidamente tiene lugar la "maduración pastosa", cuya duración suele ser de 20 días, en la que sólo se mantienen verdes los nudos y el resto de la planta toma su color típico de trigo seco, tomando el grano su color definitivo. El grano va adquiriendo consistencia y enriqueciéndose en glúcidos y proteínas mientras permanece constante el peso de la planta. Durante esta fase puede haber incidencias graves de enfermedades.

A los tres o cuatro días del estado pastoso llega el cereal a su "madurez completa" y por último se llega a la desecación de la planta, en el que toda la paja queda dura y quebradiza.

Los objetivos durante esta última fase son obtener el mayor peso posible en los granos, lograr calidad en los granos y evitar posibles pérdidas.

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Fuentes