Desarrollo local y global.

...

La exposición de las distintos marcos teóricos se interpretan bajo la misión de resolver los fenómenos como la macrocefalia impulsada por las actividades económicas que vive una ciudad o la diversificación de producto y la riqueza que presentan las aglomeraciones, estas dudas como la argumentación inicial que las resuelve recaen en la dimensión espacial, por el contrario la globalización interpretada pretendía afirmar la muerte de las distancia como algo irrelevante, si se acepta esta afirmación las variables espaciales con injerencia en la localización de la producción, los flujos de comercio y los aspectos socio-políticos serian indiferentes.

Como propósito de la investigación se encuentra en la examinación de la teoría económica en función a la inquietud de los factores que determinan el desarrollo regional, pregunta central y repetitiva en aplicación para las distintas corrientes y escuelas de la economía.

Inicia la exposición de los aportes con el fundador de la teoría económica de la localización Von Thunen (1826) que presenta un modelo aún vigente pero no llega a explicar el surgimiento de las aglomeraciones urbanas, como el forman parte de la escuela alemana Weber (1929), Christaller (1933) y Losh (1939) que sustentan sus modelos con las matemáticas y la geometría.

El apoyo de recursos para elabora los modelos es diverso, la física fue el sustento de Zipf (1941) para establecer su ley, poniendo presente a la escuela estadunidense y alargando la lista con exponentes como Nort (1955) y Friedman (1966) presentes con la teoría del multiplicador de base-exportación, sumados al aporte de Harris (1954).

Con mayor fuerza se presenta Walter Isard (1956) estimulando una ruptura con la economía neoclásica, creando la Ciencia Regional. Los aportes de ambas escuelas no resolvía las preguntas sobre la aglomeración ni la jerarquía urbana, más bien indicaban una tautología que no da razón satisfactoria, estas teorías entiende la existencia de un mercado central urbano como prioridad.

Existe una controversia sobre la relación entre la geografía económica y el pensamiento económico que se considera autónomo generando modelos ideales que no toman el aporte de la geografía.

En los modelos ideales la externalidad no se presenta como un dominio explicativo, pero se sentían sus efectos en la jerarquía espacial por la vida económica o cultural de los agentes, las diferentes explicaciones de la desigualdad de las ciudades rebasa a las teorías espaciales llegando citarse las teorías del crecimiento y el desarrollo económico, claras aportaciones por las teoría de centro-periferia y de la dependencia, que postulan un orden mundial histórico del capitalismo internacional.

La dominación es aceptada dentro de la explicación del desarrollo, cristalizándose en un colonialismo que pasa de tener un corte histórico a ser un concepto replicable hasta entre los territorios de una misma nación.