EL MUNICIPIO: DE LA DESCENTRALIZACIÓN A SUS ORIGENES CONSTITUCIONALES.

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Como resulta evidente a través de su revisión histórica, el artículo 115 constitucional ha pasado por múltiples reconfiguraciones, aunque no de forma total, da cuenta de la constante actualización de las metas políticas, en respuesta también de las necesidades de las comunidades, es por ello que las modificaciones realizadas en las décadas de 1980 y 1990 han sido esa misma continuación, pues como lo ha reflexionado Gutiérrez Salazar (1984: 4-5) es parte de una actitud practica del gobierno, “pues nunca se consiguió ni la autonomía hacendaria ni la autonomía política del municipio, concebida en los términos de la Constitución de 1917 y que aun sin lograr esta meta, estamos entrando a otras mucho más ambiciosas que las que el constituyente estableció en 1917”.

Como bien lo ha documentado Gustavo Martínez Cabañas (cit. por, Gutiérrez Salazar, 1984: 5), durante el gobierno de Miguel de la Madrid existieron más de 600 solicitudes a nivel nacional que buscaban consagrar la autonomía municipal “como una forma de fortaleza política” incidiendo en la descentralización de la vida nacional. Estas demandas tenían la intensión ante todo de mejorar el sistema democrático, donde se integraran de mejor manera la vida comunal de los municipios a la gestión pública nacional, como ya había sido sugerido en 1958[6].

Eran ya obvias las ineficacias y turbulencias políticas, ya que se perdían de vista muchas dinámicas, además documentadas, por ejemplo los casos de abuso de poder por parte de gobernadores quienes de forma no clara revocaban ayuntamientos y presidentes municipales[7]. Es por estos motivos que “se procura dar una mayor certeza jurídica a la elección de los ayuntamientos en el país y una mayor seguridad del el voto popular expresado en las elecciones municipales será respetado” (Gutiérrez Salazar, 1984: 7), así como también “obligar a la autoridad, obligar al funcionario a que "funcione' en el sentido de proporcionar a sus habitantes los más elementales servicios públicos” (Gutiérrez Salazar 5).

Es por ello que en 1983 es reconfigurado el artículo 115 de la constitución, donde se establecen los siguientes aspectos:

a) Facultad a los congresos de los estados para resolver sobre la desaparición de los ayuntamientos o de algunos de sus miembros, previa garantía de audiencia; b) Existencia de regidores de representación proporcional; c) Entrega de participación sin condiciones por los gobiernos de los estados; d) Cobro del impuesto predial por los ayuntamientos; e) Facultades a los ayuntamientos para zonificación y determinación de reservas ecológicas; f) Se ampliaron las facultades reglamentarias a los ayuntamientos; g) Normar la relación entre los ayuntamientos y Sus empleados; h) Elaboración de presupuesto de egresos para los ayuntamientos; i) Determinación de los servicios públicos. (García Morales, 2007: 233)

A partir de la creación del Centro Nacional de Estudios Municipales del mismo año, se transformó en el Centro Nacional de Desarrollo Municipal en 1989, con el objetivo de apoyar las tareas de administración pública y la gestión de servicios, en soporte del mismo artículo. “En 1999 de igual forma se otorgarían mayores prerrogativas y facultades al Municipio, sobre todo en materia de desarrollo urbano, planificación territorial y ecología, sin embargo no se ha logrado completamente esa independencia económica…” (García Morales, 2007: 233).

Al respecto Gutiérrez Salazar (1984: 5) reflexiona lo siguiente en relación a las constantes modificaciones al artículo: “…la reforma al artículo 115 es, una vez más, el contenido de lo que el país quisiera ser, pero no es, ni con mucho, la definición exacta de lo que debe ser cada estado en sus ámbitos locales propios para vigorizar la vida municipal”.

El análisis de Gutiérrez Salazar es pertinente debido a que el proceso de descentralización que se inició en los años ochenta generó algunas transformaciones estructurales con repercusiones sociales, sin embargo, también hubo múltiples imposibilidades en la práctica como los cotos de poder regionales, en tanto, que en el ámbito legal estuvieron los candados que se dejaron en la Constitución y en algunos reglamentos estatales para que no se llegara a los planteamientos de cogestión Estado y Sociedad que en los discursos políticos se señalaban.

Los avances que trajo consigo la descentralización fueron que se propició una desconcentración del Estado, tanto institucional como política, que hizo posible la presencia de la sociedad en asuntos que antes estaban reservados solo a los ámbitos gubernamentales, sin embargo, también se empezó a enunciar la presencia del capital privado, incluyendo el transnacional en diversas políticas públicas, circunstancias que en este siglo se hizo cada vez más evidente.

- Las circunstancias actuales del municipio

El municipio igual que otras entidades políticas guarda interdependencia con el Neoliberalismo -presencia de un capital que traspasa las fronteras locales y que tiende a manejar la economía mundial-, y la globalización –las repercusiones de éste en la cultura y la sociedad-; además de la presencia muy fuerte de la delincuencia organizada, es decir, el proceso de descentralización que se inició en los años ochenta se encuentra en un momento en el cual cierra un ciclo y genera nuevas transformaciones las cuales son impulsadas en el país con las reformas estructurales.

El conjunto de reformas consumadas en el mes de octubre del 2014 son la laboral, la hacendaria, la financiara, la educativa, la político-electoral, la de telecomunicaciones, la energética, la de transparencia, un nuevo código nacional de procedimientos penales, la de competencia económica y la Ley de Amparo[8], estas transformación están tratando de establecer una reactivación económica y una mayor profesionalización en los distintos espacios, sin embargo, lejos de propiciar un desarrollo sustantivo se está propiciando un escenario lleno de conflictos y una mayor desigualdad social porque está propiciando la participación del capital transnacional, sin que el gobierno tenga el control sobre éste[9] y frente al cual el capital nacional no puede competir.

- Comentarios finales

La situación actual de los municipios es compleja porque a pesar de los cambios del 115 constitucional, en la práctica la mayoría de ellos siguen estando supeditados a la federación y a los estados, su plan de arbitrios[10] generalmente es sumamente reducido; y gran parte de las partidas federales y estatales generalmente se manejan de manera