El sistema legal evoluciona conforme la realidad evoluciona, eso es una realidad que persiste en el sentido constante de como conforme la moral cambia, el sistema penal cambia.

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2) El delito es atractivo cuando se promete grandes beneficios con poco esfuerzo.

3) El delito puede ser controlado por el miedo al castigo.

4) El castigo que es o se percibe como grave, cierto y rápido impedirán el comportamiento criminal. (Requena, 2002)

En el siglo XIX, una nueva visión del mundo estaba teniendo lugar. Este punto de vista estaba desafiando la validez de la teoría clásica. Esta fue una forma innovadora de mirar la causalidad del crimen. Esta fue la teoría positivista.

Cesare Lombroso se conoce como el padre de la criminología. Se hizo famoso en el siglo XIX debido a que afirmó haber descubierto la causa del crimen. Lombroso escribió El Hombre Delincuente que fue publicado en 1876. En su libro, Lombroso afirmó que los cadáveres de los criminales revelaron que eran físicamente diferentes que las personas normales, que paralelo a ciencias inexactas como la frenología, despersonalizaron la naturaleza del criminal. Afirmó que los criminales tienen dimensiones anormales del cráneo y la mandíbula. Lombroso creía que los delincuentes habían nacido con esos rasgos y no han cometido delitos en el libre albedrío como la escuela clásica de la criminología sugeriría, sino que eran víctimas de su condición.

Bajo el supuesto de la herencia de la criminalidad, Lombroso afirmó que ciertas características físicas podían distinguirse. Estos serían grandes mandíbulas, bajo frente inclinada, pómulos altos, aplanado o nariz respingona, manejar orejas con forma de halcón, la nariz o los labios carnosos, duros ojos huidizos, barba escasa o calvicie, insensibilidad al dolor, y los brazos largos en la relatividad a la miembros inferiores. Después de mucha investigación y análisis sucesivos, Lombroso había modificado sus teorías. Él identificó otros dos tipos de criminales: el criminal demente y el criminaloide. Llegó a la conclusión de que los criminales dementes llevaban algunas de las características, pero no nacieron criminales. Se convirtieron criminales como resultados de una alteración del cerebro que altera su naturaleza moral. Los criminaloides tenían ninguna de las características físicas del delincuente nato, pero se convirtieron en criminales más tarde en la vida. (Ramírez, 2011)

Estos criminaloides también tendían a cometer delitos menos graves. Se clasifican además como delincuentes habituales que se convirtieron así que por el contacto con otros delincuentes, el abuso de alcohol u otras circunstancias dolorosas. Lombroso fue también un defensor de la integridad personal de los criminales. Abogó por la eliminación de los criminales natos de la sociedad para su propio bien y de la sociedad de la protección, para la rehabilitación de los que no nacieron criminales y estaba en contra de la pena capital.

La tercera scuola o escuela ecléctica es una mezcla de las dos anteriores, tal como lo dice, es ecléctica al ser una mezcla de las dos anteriores. Con esto, determina como se gira en la perspectiva moral y el centro, negando la libre determinación de las personas y el delito como unidad individual, es inductivo y científico (aspecto que recupera de los positivistas), hace su clasificación entre lo imputable y lo no imputable, mas no entre los delincuentes como los positivistas. (Sánchez, 2001)

Bibliografía

Ramírez, G. A. (2011). Teoría de la Ley Penal y del Delito. México: Porrúa.

Requena, G. A. (2002). Derecho Penal IV Edición. Ciudad de México: Oxford.

Sánchez, J. S. (2001). Instituciones del Derecho Penal. Ciudad de México: Angel Ediciones.

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