Evaluación de Políticas Públicas.

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Podemos concluir que las evaluaciones de las acciones públicas ayudan en un sistema democrático como el nuestro, porque generan una cultura de autorregulación y mejoramiento continúo en los empleados públicos, involucra a la ciudadanía en el control de los estamentos públicos y de las acciones que estos tomen, y fortalece la democracia, haciéndola más participativa.

La evaluación ayuda a la toma de decisiones, pues, propicia una cultura de responsabilidad y mejora continua, esto quiere decir que el decisor público puede tomar decisiones basado en la evaluación, en ser más eficaz y ayudar a mejorar la forma en que se hace frente a los problemas sociales a los cuales tiene bajo su cargo como parte de las acciones públicas. Basándonos en que las acciones públicas sirven para mejorar el nivel de vida de las personas, y que la evaluación es un método de vigilancia, para que estas acciones cumplan con su objetivo principal, los decisores públicos pueden tomar decisiones que vayan en búsqueda de mejorar el nivel de vida de sus conciudadanos.

Una evaluación fortalecida como método de participación ciudadana, y con veeduría de varios agentes gubernamentales, ayuda a que los decisores públicos tomen decisiones que no vayan en contra de las personas que tienen bajo su responsabilidad, favoreciéndose él, o buscando favorecer intereses de terceros. Una evaluación fortalecida ayuda a que el decisor público piense dos veces antes de tener conductas corruptas, pues, vería que tales conductas tienen castigos severos y el rechazo de la población en general.

La evaluación genera transparencia y responsabilidad en aquellos que son evaluados, mejorando la forma de hacer política, dirigida a quien debería beneficiarse directamente, la ciudadanía. Tomar decisiones basadas en la evaluación genera unas políticas más equitativas, justas y trasparentes, dinamizando el proceso de toma de decisiones.

Como conclusión personal la evaluación de las acciones públicas, ayuda a que vayan destinadas a cumplir su objetivo primario, que es la equidad y el mejoramiento de las problemáticas sociales de la ciudadanía. Que en nuestro país, hay métodos de evaluación designados y explícitos, para que las políticas públicas sean ejecutadas con transparencia, eficacia y eficiencia. A su vez el gran factor para no lograr una dinamización de las políticas es la excesiva burocracia que vemos todos los días, demoras en ejecución de obras y políticas, y desgraciadamente la corrupción que como un cáncer corroe todas las instituciones del estado y que debería ser erradicada de raíz, no llevada a sus justas proporciones, como dijo un expresidente –corrupto-, sino castigada, perseguida y erradicada. Es la corrupción, el mayor de los males para la correcta implementación de las acciones públicas; mientras no haya castigos ejemplares y severos contra aquellos funcionarios públicos que retrasan la implementación de acciones, malgastan los fondos y favorecen a terceros que no cumplen con la normatividad necesaria para desarrollar un buen trabajo, no podremos dejar el atraso, pues denuncias de estas malas prácticas las efectúan la ciudadanía, algunos funcionarios y los medios de comunicación, pero desgraciadamente estamos acostumbrados a que nunca pase nada.

Esto conlleva a que los decisores públicos tomen decisiones en contra del bienestar colectivo y fallen a su objetivo primordial, la equidad entre los ciudadanos. Cuando haya mayores penas contra las personas que atentan contra la transparencia, la eficacia y la eficiencia de las acciones públicas, el decisor público se enfocará en tomar mejores decisiones, en no entorpecer los procesos y en mejorar continuamente.

Bibliografía

▪ Bañón i Martinez, Rafael. (2003). La Evaluación de la Acción y de las Políticas Públicas. Madrid, España: Ediciones Días de Santos S.A. Introducción pág. XV-XXVI.

▪ Fundamentos de Evaluación de Políticas Públicas. 1ª Edición. Madrid: Ministerio de Política Territorial y Administración Pública. Agencia Estatal de Evaluación de las Políticas Públicas y la Calidad de los Servicios. Madrid, 2010. Primera Parte: La evaluación de políticas públicas en el marco de la nueva gobernanza. Págs. 13-29.

▪ Ponencia Evaluación de Políticas Públicas a través del Estado, la Democracia y el Desarrollo. III Congreso Argentino de Administración Pública. Repensando las relaciones entre Estado, Democracia y Desarrollo. (junio de 2005). San Miguel de Tucumán, Argentina.