MOVIMIENTO EVOLUTIVO TEORICO EN EL ESTUDIO E INTERPRETACION DEL FENOMENO EDUCATIVO

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Una situación educativa según el autor puede ser permanente, como lo es en las instituciones escolares, u ocasional, siendo de duración variable. Se puede dar esta situación en diferentes lugares como al aire libre o en el interior de una familia, y debe de presentar como mínimo dos personas. Ejerce su influencia sobre los protagonistas presentes y recibe de ellos el propio educador cierta acción.

Por lo anterior expuesto se llega a decir que el hecho educativo es una acción ejercida sobre un sujeto o un grupo de sujetos a conseguir una modificación profunda, una acción por la que nacen nuevas fuerzas vivas y se convierten en elementos activos de acción coherentes y objetivos.

EL DEBATE TEÓRICO EN TORNO A LA PEDAGOGÍA.

- Estudio Histórico.

El estudio de la educación como conocimiento científico constituye en la actualidad una compleja e incierta tarea que ha pasado en su devenir histórico, por diferentes y contradictorias etapas.

Para todos está claro, la importancia vital de la educación como fenómeno social y que ha estado en la base misma del surgimiento y existencia de todas las sociedades o agrupaciones humanas que se han conocido. No hay dudas que este problema aun no resuelto por y para las ciencias o las ciencias de la educación, tiene consecuencias imprevisibles para ella no solo en el plano teórico, sino también para la práctica educativa.

Hoy en día, el habitual criterio de que la pedagogía es la ciencia de la educación, ha sido criticado fuertemente desde posiciones y razones diferentes. Así vemos que autores parapetados en los criterios positivistas de lo que es la ciencia y desde diversos paradigmas epistemológicos actuales como son el activista (Weiler,1985) o el descubrimiento del valor de lo posible (Tedesco,1985) cuestionan no solo el carácter de ciencia de la pedagogía, sino necesidad real y proponen otras alternativas criticas de enfoques totalizadores, holísticos, integradores, dinamizadores, entre otros., que conducen a nuevas denominaciones que representan un nuevo momento evolutivo teórico en el estudio e interpretación científica de la educación.

La comprensión de este estado de cosas, requiere un breve recuento histórico y algunas precisiones teóricas y semánticas.

Como primer elemento, se le denomino por pedagogía a la disciplina que pretendió científicamente o no, ordenar sus paradigmas o corrientes, ideas o teorías, conceptualizaciones o determinaciones de sus prácticas escolares (formales) y no escolares (no formales).

La razón, nos la aporta la historia de la educación desde la Grecia clásica en que etimológicamente pedagogía significa en griego Paidós: niño y agogía: conducción. Termino que fue introducido y aceptado por los romanos y mantenido más ateneamente durante la Edad Media y el Renacimiento en que se tomó el término pedagogo fundamentalmente como preceptor o maestro (J. Manjòn, 1993).

Así vemos que el debate científico en educación se da en torno a la pedagogía que es su ciencia. Sin embargo, desde sus orígenes mismos, fue un debate enconado por estar matizado por las múltiples interpretaciones que podían hacerse de un objeto de estudio complejo como es la educación.

En la actualidad existe la consideración bastante extendida que el análisis más profundo de las ciencias de la educación se encuentra en la obra de G. Mialaret, especialmente en su Nueva pedagogía científica (1996), en que ofrece una visión dialéctica del tránsito de la pedagogía hacia las ciencias de la educación resaltando el lugar de la pedagogía científica en el contexto de la ciencia de la educación. Establece tres planes y deja con bastante claridad el relativismo existente en referencia a la educación como su objeto de estudio, cuando dice:

Si la educación y la pedagogía representan respectivamente, el aspecto práctico y teórico de un mismo proceso dinámico humano, han de ser, por lo mismo inseparable. Según el caso, según las necesidades y circunstancias, tendrá más fuerza un aspecto que otro. Ante un grupo de alumnos, la educación tiene más importancia. En el laboratorio predominara la pedagogía. Pero insistimos en el hecho de que una de las fases no puede existir con ausencia total de la otra.

La plurisdisciplinariedad de la investigación de la educación y la necesaria construcción de las ciencias de la educación como su derivación lógica la deja planteada en la siguiente cita:

La educación, como proceso humano, no se presenta bajo un solo ángulo de estudio, si no que posee un componente físico, un componente biológico, un componente social, un componente psicológico y un componente pedagógico. Negar la aportación de las otras disciplinas seria imitar a un físico que rehusara utilizar las matemáticas a la química con el pretexto de que tales ciencias no eran realmente físicas...

CONCLUSIÓN.

Podemos concluir que la educación posee muchas dimensiones y extensiones y su formación debe venir principalmente desde la edad temprana, hoy ya nadie se escandaliza cuando se afirma que la educación viene desde el nacimiento, no podemos negar el estímulo social, los juegos, las condiciones alimenticias, las condiciones de vida desde su nacimiento hasta los tres años de vida que son los principales aprendizajes donde imparten sus primeros conocimientos de vida.

De igual forma no debemos dejar atrás la educación impartida en la escuela, porque es la que les da estructura, práctica y formación. No es, pues exagerado decir que la educación va dirigida a todas las edades del hombre desde su nacimiento hasta la muerte. Los aprendizajes son basados principalmente por todo el ambiente que los rodea, siendo esta una educación biopsicosocial.

La historia de ideales y desencantos estimula a lanzar una nueva mirada sobre la educación y sobre su papel en la producción, la educación enfrenta varios tipos de retos. Primero, los que se ubicaban en el filo entre la permanencia y el cambio: tensiones entre la tradición y la modernidad, consideraciones largo y corto plazo, y entre competición y equidad. Asimismo, las tensiones entre lo global y lo local, entre lo universal y lo individual. Igualmente, las tensiones crecientes entre la expansión del conocimiento y la capacidad de los seres humanos de asimilarlo y aprovecharlo a la luz de las prioridades del desarrollo humano. Finalmente, la eterna tensión entre lo espiritual y lo material.

Las ciencias de la pedagogía constituyen un subconjunto de las ciencias de la educación y