ORIGEN Y FORMACIÓN DE LOS SUELOS.

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5.3.1. Desarrollo del pH del suelo 25

5.4. Tipos de suelos según los valores de pH obtenidos 26

CAPÍTULO VI: CONCLUSIONES 27

CAPÍTULO VII: BIBLIOGRAFÍA 28

CAPÍTULO VIII: ANEXOS 30

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- ORIGEN Y FORMACIÓN DE LOS SUELOS

Los suelos tienen su origen en los macizos rocosos preexistentes que constituyen la roca madre, sometida a la acción ambiental disgregada de la erosión en sus tres factores.

- Física: Debida a cambios térmicos y a la acción del agua, estas acciones físicas tienden a romper la roca inicial y dividirla en fragmentos más pequeños, es decir, tienden a crear las partículas que van a formar el suelo.

- Química: Originada por los fenómenos de hidratación, disolución, oxidación y cimentación, es decir, puede ayudar a la acción física, posteriormente contribuye más a destruir y transformar que unir.

- Biológica: Producida por actividad bacteriana induciendo putrefacciones de materiales orgánicos y mezclando el producto con otras partículas físico-químico, actuando de elemento catalizador.

Cuando el suelo permanece in situ, sin ser transportado, se le conoce como suelo residual y cuando ha sufrido transporte se le conoce como o se le denomina suelo transportado.

- Los suelos están formados por partículas pequeñas e individualizadas que, a efectos prácticos pueden considerarse indeformables.

- Entre sus partículas no cimentadas quedan huecos con un volumen total del orden de magnitud del volumen ocupado por ellas.

- Un suelo es un sistema multifase (bifase o trifase).

- Los huecos, poros o intersticios pueden estar llenos de agua, (suelos saturados), o con aire y agua (suelos semisaturados), lo que condiciona la respuesta de conjunto del material.

Todo ello hace que en los suelos haya que analizar:

- Los problemas de deformabilidad que introducen las cargas y las acciones exteriores, las cuales se traducen en tensiones normales o tangenciales, sobre los contactos entre las partículas. Esta deformabilidad puede llegar a una situación extrema “de rotura”, quedando la resistencia definida por una gran deformabilidad y no por roturas de partículas.

- Los problemas de flujo del agua en el interior del suelo, que condiciona su respuesta ya que las deformaciones inducidas por las cargas necesitan un tiempo para producirse, este proceso se le denomina consolidación.

Entonces el suelo en ingeniería se podría definir como un agregado de minerales unidos por fuerzas débiles de contactos, separables por medios mecánicos o por agitación del agua.

- Descripción y clasificación de suelos

Los suelos se clasifican en cuatro grandes grupos en función de su granulometría:

- Gravas, con tamaño de grano, se caracterizan porque los granos son observables directamente. No retienen el agua y existen grandes huecos existentes entre partículas.

- Arenas, se pueden ver a simple vista, cuando se mezcla con el agua se separan con facilidad.

- Limos, retienen el agua mejor que los tamaños superiores y causa que el agua exude con facilidad.

- Arcilla, están formadas, principalmente, por minerales silicatados, constituido por cadenas de elementos tetraédricos y octaédricos.

Para Atterbert definió tres límites: el de retracción o consistencia que separa el estado de sólido seco y el semisólido.

- Límite plástico, se determina amasando bien el suelo con poca agua y formando elipsoides, arrollándolos con la palma de la mano sobre una superficie lisa, hasta llegar a un diámetro de unos tres mm y una longitud de veinticinco o treinta mm.

- Límite líquido, se determina amasando bien el suelo seco con bastante agua y extendiendo la masa sobre un molde denominado cuchara de Casa Grande.

- Estados de los suelos

La metodología para el análisis del comportamiento de un suelo frente a las acciones exteriores son las siguientes:

- Identificación del tipo de suelo, determinando su granulometría y plasticidad, a lo que añade dióxido de carbono y trióxido de sulfato y materia orgánica, esto se experimenta en un pequeño laboratorio.

- Determinación de su estado real, esto es, de las proporciones relativas de sólidos, agua entre otras.

Para definir el estado inicial de un suelo, se intenta determinar en primer lugar la concentración relativa de sólidos, volumen relativo de huecos y contenido relativo de agua en un volumen elemental representativo de un punto o zona del suelo.

- Suelos agresivos y salinos

Muchos de estos suelos salinos son agresivos al hormigón de las cimentaciones, sobre todo si hay agua de circulación en el subsuelo al cimiento y permite que éste siga progresando.

Suelos depresivos.

Son aquellos cuya constitución mineralógica, es tal que las fuerzas repulsivas entre las partículas finas (arcilla) excedan a las fuerzas de atracción de esas partículas.

- Suelos colapsables

Se han caracterizado por tener una estructura muy abierta y flujo, mantienen su estabilidad por el estado de sequedad de la atmósfera.

- Suelos licuefactables

Son aquellos suelos que con un contenido predominante areno-limoso, en estado saturado, al experimentar esfuerzo cortantes anómalos y rápidos, permiten un aumento de las presiones intersticiales (por falta de drenaje), hasta valores del orden de la presión total existente.

- CLASIFICACIÓN DE LOS SUELOS

- Generalidades

Dado la gran variedad de los suelos que se presentan en la naturaleza, la Mecánica de Suelos ha desarrollado algunos métodos