RE: Foro de la semana N°2
Enviado por Leovits Ibet Lachira Alarcon • 18 de Septiembre de 2018 • Resumen • 410 Palabras (2 Páginas) • 516 Visitas
¿Dónde no se puede aplicar montacargas eléctricos y dónde no se pueden aplicar montacargas a combustión? Sustente su respuesta
Los montacargas eléctricos no se pueden aplicar en:
Almacenes ubicados en proyectos a campo abierto, no se utilizan en zonas accidentadas, puede ser una zona con barro, por las lluvias o rocosa, donde estos juegan un papel en contra de los componentes electrónicos de un motor eléctrico.
Se debe tener cuidado si se quiere aplicar en almacenes donde se realicen dos turnos porque necesitará dos baterías para que funcione correctamente.
No se puede utilizar una zona de carga con mala ventilación.
Los montacargas a combustión no se pueden aplicar en:
Ambientes cerrados (como depósitos o fábricas) no resulta práctico ni saludable usar montacargas de combustión interna, pues sus niveles de contaminación y emisión de ruido son muy altos. Por eso es común encontrar en la industria de alimentos montacargas eléctricos: no contaminan ni hacen ruido, ya que por ser de combustión generan gases tóxicos.
No se aplica cuando se requiere alta adaptabilidad (tiene menos adaptabilidad): la operación, inclinación, aceleración y velocidades diversas.
Para ambos casos, el ancho de los pasillos no debe ser inferior al ancho del montacarga o a la carga incrementada en 1 metro.
¿Por qué sería importante colocar puertas rápidas en los almacenes?
Son importantes porque facilitan el trabajo en las zonas de paso y de carga y descarga de muchas instalaciones, permiten delimitar y aislar zonas con un mayor control climático o higiénico. Son muy rápidas. Además, disponen de un mecanismo con mando para poder regular la velocidad de la puerta, tanto de apertura como de cierre. Están preparadas contra fallos eléctricos, pueden funcionar en el caso de que se produzca un fallo o corte eléctrico, gracias a su apertura de emergencia, utilizando una manivela, o unos contrapesos.
Si los almacenes trabajan a temperaturas de los -30º hasta los + 70º, las puertas rápidas cumplen con esta necesidad y se convierte en un factor imprescindible para garantizar la máxima calidad de la producción, tienen un gran nivel de aislamiento, Además, los niveles de hermeticidad están asegurados y son muy resistentes a las inclemencias meteorológicas como el viento o la lluvia, son muy amplias y seguras porque no presentan barras transversales o elementos rígidos, por lo que se garantiza la seguridad de las personas y de las mercancías.
Otro punto importante es que hay diferentes tipos de puertas rápidas para cada tipo de almacén, sin dejar de mantener la calidad.
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