Analisis de la lectura La Paradoja de Abilene
Enviado por lllll • 11 de Marzo de 2023 • Ensayo • 785 Palabras (4 Páginas) • 354 Visitas
KIDS SCHOOL & CAMBRIDGE ACADEMY
PROYECTO FINAL DE ESPAÑOL
ASIGNATURA
ESPAÑOL
TEMA:
ANALISIS DE LA LECTURA
LA PARADOJA DE ABILENE
PROFESORA:
Maylín Ayala
PRESENTADO POR
LUIS ENRIQUE SANCHEZ
9°
FECHA DE ENTREGA
31 DE OCTUBRE 2022
INTRODUCCIÒN
A veces en nuestro diario vivir nos encontramos con algunos momentos en que por la presión de grupo y no quedar mal ante otros hacemos cosa que luego nos hacen arrepentirnos, en este trabajo leeré la lectura asignada para el proyecto final La paradoja de Abilene, paradoja que nos muestra la forma de actuar de las personas cuando se sienten bajo presión.
LECTURA
LA PARODOJA DE ABILENE
Durante una calurosa de verano, en Coleman (Texas), una familia compuesta por un matrimonio y los suegros, están jugando al domino tranquilamente junto al porche. Beben limonada y no hacen mas que dejar pasar el tiempo de forma perezosa.
Su casa se encuentra a unos 53 kilómetros de Abilen. Entonces al suegro se le ocurre algo:
Podríamos hacer algo más interesante. por ejemplo, ir hasta Abilene y comer en la cafetería del pueblo….
Claro, si ¡por qué no?
Entonces su mujer, por no llevar la contraria, añade:
Buena idea cariño… y por supuesto, la madre, al ver que todos querían ir, decide no ser la nota discordante para no romper la armonía del grupo:
¡iremos
Así que toda la familia se sube al coche, que no tiene aire acondicionado, y conduce hasta Abilene a pesar del agobiante calor.
Recorren largo y polvorientos caminos y llegan acalorados al pueblo. Comen un menú mediocre en la cafetería y regresan Coleman por los mismos largos y polvorientos caminos.
Al llegar, todos se retiraron extenuados y acalorados, sin decir nada, pensando en por que habían hecho ese ridículo viaje que no querían hacer.
ANALISIS
La paradoja de Abilene’ explica con un buen ejemplo por qué tantas veces terminamos haciendo cosas que no queremos, simplemente por qué nos dejamos arrastrar por los demás o por miedo a defraudar a otros.
Está claro que ninguno quería hacer ese viaje, pero por la presión de grupo que había entre ellos por no quedar como tontos aceptan en vez de hablar y llegan al punto de no tener comunicación y no querer defraudar al otro.
Cuando formamos parte de un grupo, todos queremos agradar a los demás y evitar enfrentamientos. No queremos salir del grupo y evitamos a toda costa llevar la contraria al resto. Por eso a menudo hacemos cosas con las que no estamos de acuerdo. A veces por no llevar la contraria y otras por el qué dirán si me manifiesto en contra. Unos por otros, al final todos terminamos arrastrándonos y haciendo algo que no queremos hacer. Esto sucede siempre cuando estamos en grupos y no expresamos en el momento lo que de verdad quisiéramos hacer, cuando por las decisiones individuales de sus compañeros, hacen algo que ninguno de ellos desea, pero que todos presumen que el resto sí. A veces basta con que alguien haga una débil propuesta, creyendo que va a ser del agrado del resto, aunque no lo sea de el mismo los demás se muestran a favor por no llevar la contraria, pero por la presión del grupo lo acepta manifestándolo públicamente, cada vez es más difícil llevar la contraria. Se van tomando decisiones no con mucho entusiasmo, pero al final todos adoptan por unanimidad tomar una decisión que ninguno de sus miembros individualmente quería.
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