LOS RIOS PROFUNDOS DE JOSE MARIA ARGUEDAZ

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Arguedas, presenta una visión del universo como un todo interrelacionado y el acercamiento mágico a ese mundo consiste en intentar descubrir los caminos subterráneos que se mueven entre los seres, las cosas y los valores espirituales. Sin embargo esta percepción integradora y panteísta no es compartida por todos los personajes de la novela, tan sólo por el pueblo indígena y por Ernesto.

La magia que era vital para Ernesto se encuentra de igual modo en los ríos, a los que otorga el papel de divinidad purificadora ya que es sangre que desciende de la sierra y trae consigo recuerdos de un pasado feliz.

Es una novela pensada y cantada en quechua. El zumbaylú, representa en la novela la identidad profunda de la memoria, la naturaleza y la música. Para Ernesto es el instrumento ideal en cuanto que es capaz de captar la interrelación existente entre los objetos, a la vez que evoca a la naturaleza es objeto pacificador que purifica.

Los ríos profundos, novela que se sustenta por antítesis que vienen siendo dadas por dos grandes conceptos unidos al hombre desde su existencia: el bien y el mal. Este ha sido el aspecto más estudiado de la obra, puesto que de aquí parten la caracterización y clasificación de los personajes.

Es interesante la clasificación que establece Gladys Marín al respecto.

Dentro de este tema se pueden marcar una serie de direcciones:

- Los personajes que parten del mal para ir al bien.

- Los personajes que parten del bien para llegar al mal.

- Los personajes que permanecen en sus respectivos universos.

- Los personajes que oscilan entre un mundo y el otro sin instalarse.

José María Arguedas, fue un escritor y gran antropólogo con amor por su cultura, la cultura andina, cultura que destacó siempre en sus novelas, describía el entorno de estas culturas, muchas veces él describía su vida mediante sus personajes, dando a notar distintos pasajes de su vida también. Cabe destacar que este gran escritor resaltó en el costumbrismo, que a pesar de haber sido humillado y de haber sufrido bastante aún guardaba aprecio por su cultura.