La Pedagogía de la educacion.

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comprender el mundo para vivir con dignidad, desarrollar capacidades profesionales y comunicarse con los demás; en cuanto al fin, la justificación es el placer de comprender, conocer y descubrir. Es decir, que la educación debe contribuir al desarrollo global de la persona: cuerpo y mente, inteligencia y sensibilidad, sentido estético, responsabilidad individual, espiritualidad.

El incremento del saber permite comprender mejor las múltiples facetas del propio entorno favorece al despertar de la curiosidad intelectual estimula el sentido crítico y permite descifrar la realidad, adquiriendo al mismo tiempo una autonomía de juicio.

Aprender a vivir juntos, aprender a vivir con los demás la idea de enseñar la no violencia en la escuela. Los seres humanos tienden a valorar en excesos sus calidades y las del grupo a la que pertenece y alimentar prejuicios desfavorables hacia los demás. La escuela debe incentivar a establecer relaciones en un contexto de igualdad y formulando objetivos y proyectos comunes, para dar lugar a la cooperación más cercana e incluso a la amistad. Orientando a un descubrimiento del otro, enseñando la diversidad de la especie humana y la interdependencia entre todos los seres humanos.

Ahora bien, esto seria “un ideal de escuela” porque nuestra sociedad esta en un continuo cambio y atravesando por una crisis económica, ética y moral. Para comprender este proceso de cambios, que esta aconteciendo en el ámbito de las instituciones escolares, es necesario concientizarse que la enorme aceleración del cambio social modifica nuestra forma de vida, produciendo colectivamente transformaciones en todo lo que implica el entorno de las instituciones.

Hoy se habla de una “crisis del modelo educativo”, debido a que los avances han planteado nuevos desafíos y problemáticas que nuestro sistema no han sido capaces de asimilar por lo tanto se puede decir que nuestra capacidad de cambio es lenta, para cuando se consigue responder a las demandas que exige esta nueva sociedad, las misma ya han vuelto a cambiar. La crisis esta deteriorando el tejido social, la credibilidad de las instituciones, el ejercicio responde a la ciudadanía, el concepto de autoridad, la responsabilidades de la acciones.

Uno de los efectos de esta situación de crisis se refleja en los alumnos, que vienen sufriendo esta realidad de hace un tiempo, los rodeas un clima familiar de constante preocupación, viven los cambios laborales de sus padres con angustia. Por esta vivencia los alumnos tienden a llamar la atención particularmente en los cambios sustanciales en las relaciones entre ellos, poseen poca tolerancia a la opinión del otro, dificultad para escucharse y falta de disciplina, dificultad para concentrarse en el trabajo. Estos puntos son importantes porque son los derivantes en los altibajos de los aprendizajes de los alumnos. Existe la idea que, el aula es el lugar apropiado para analizar la crisis desde distintas disciplinas, a través de actividades que den oportunidad de hablar de democracia representativa y las obligaciones ciudadanas. Expandir el concepto que es “posible otro país” y así lograr movilizar al alumno de esa idea “que este país no tiene remedio”.

Hoy a las escuelas se les exige mucho mas, se les piden que enseñen de manera interesante y productora cada vez mas contenidos, que contenga y que cuiden, que acompañen a las familias, que organice la comunidad, que haga de centro de distribuidor de alimentos, que cuiden la salud y que haga de asistencia social. No estaría en desacuerdo que la escuela cumpla todo esto, pero siempre y cuando el estado y la sociedad se involucré, que les brinden personal y fondos económicos para desarrollar todos los objetivos. Porque si no considero que la escuelas al querer abarcar todo nunca puede finalizar un solo objetivo bien y siempre quedan inconclusos la mayoría de lo planteado.