Las grandes hazañas del cid campeador

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Se observa que el autor utiliza demasiadas ideas y expresiones para describir un solo hecho, eso hace más difícil su lectura, aunque, como bien se sabe, el Mio Cid fue una obra escrita para ser recitada en público, que además de ser el primer libro escrito en castellano, abrió las puertas a lo que son los cantares de gesta, siendo así de gran importancia para lo que es la literatura española antigua en la educación de hoy en día.

Autor anónimo

Algunos creen que esta obra fue escrita aproximadamente en el año de 1140, posiblemente en el lugar donde vivía el juglar que recitaba este cantar. Se conoce una copia escrita del manuscrito, elaborada por Pedro Abbat (Per Abbat) en el año de 1307; sin embargo no podemos atribuir su autoría porque en la última parte del manuscrito da a entrever que él no es el autor sino más bien lo había copiado. (En primer lugar en la época ese nombre Per Abbat era muy común, en segundo lugar el término escribir era también sinónimo de copiar).

En virtud del análisis de numerosos aspectos del texto conservado, los críticos literarios lo atribuyen a un autor culto, con conocimientos precisos del derecho vigente a finales del siglo XII y principios del XIII, y que podría estar relacionado (por su conocimiento de la microtoponimia) con la zona aledaña a Burgos, Medinaceli (actual Soria), la zona fronteriza de Castilla con Aragón, la Alcarria o el valle del Jiloca. Los filólogos, sin embargo, como Diego Catalán, basado en la interpretación de la estructura social, o Francisco Marcos Marín, a partir de datos lingüísticos que apoyan la existencia de una versión previa, lingüísticamente más arcaica, con vestigios de la -d