Nuestro cambiante clima

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Ambos autores coinciden que un forzante muy importante del cambio climático es de origen natural, Tanto el Doctor Depetris como la doctora Camilloni, mencionan las principales causas y las fuertes consecuencias que hemos tenido sin que haya intervenido algún causante de origen humano.

Por otro lado, la Investigadora del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET), Silvina Solman señala que el clima evoluciona con el tiempo debido a la influencia de factores o forzantes internos y externos. Los primeros comprenden los mecanismos de interacción entre las diferentes componentes del sistema climático, mientras que los factores externos incluyen fenómenos naturales, por ejemplo, erupciones volcánicas, variaciones en la actividad solar y también efectos de la actividad humana o forzantes antropogénicos, modificaciones de la composición de la atmósfera por la emisión de gases por la quema de combustible fósil, o cambios en la cobertura vegetal de suelo por la agricultura o la urbanización. Solman, al igual que Depetris, nombra El Cuarto Informe de Evaluación publicado por el Panel Intergubernamental de Cambio Climático en 2007 donde presentan evidencias convincentes sobre la influencia en el clima global de la mayor concentración en la atmósfera de gases de efecto invernadero emitidos por la actividad humana, pero, contrariamente a la postura anteriormente mencionada del doctor Depetris, la doctora Solman afirma: “La conclusión es que ese calentamiento debe atribuirse en medida dominante a la mayor concentración en la atmósfera de gases de efecto invernadero ocasionada por la actividad humana.” Haciendo mención que ni la actividad solar ni la actividad volcánica son los principales responsables del calentamiento después de 1950; para confirmar Solman pone como ejemplo la concentración media de dióxido de carbono en la atmósfera que antes del siglo XIX alcanzaba valores de alrededor de 275 partes por millón (ppm). En el siglo XX se incrementó rápidamente por encima de ese rango y, en la actualidad, alcanza aproximadamente 379 ppm.

Al igual que Solman, Camilloni nombra varios factores de origen humano que modifican el clima: Cambios en la composición química de la atmósfera, debido a que intensifican el efecto invernadero de origen natural. Gases como el dióxido de carbono (CO2), el metano (CH4) y el óxido nitroso (N2O); si bien los gases se encontraban naturalmente en la atmósfera, actividades humanas como la combustión de hidrocarburos fósiles (carbón, derivados del petróleo y gas natural) contribuyeron a aumentar su concentración en ella. Camilloni indica que Las emisiones de dióxido de carbono a la atmósfera han venido creciendo fuertemente desde el período industrial, a fines del siglo XIX. Por otro lado Indica que las emisiones de CH4 más grandes se producen por la actividad agropecuaria, principalmente por el cultivo de arroz y por la ganadería (en este último caso, por el sistema digestivo de los rumiantes), también agrega que el óxido nitroso se genera por la utilización de fertilizantes nitrogenados en cultivos y, en menor medida, por la combustión de hidrocarburos a altas temperaturas. En las últimas décadas se han agregado gases que no existían en la naturaleza, como los clorofluorcarbonados, freones y halones, que, además de producir otros trastornos como el debilitamiento de la capa de ozono, también coadyuvan al efecto invernadero. Camilloni coincide con Solman una vez más afirmando que se ha alterado la superficie terrestres debido al reemplazo de la cobertura vegetal natural por ciudades, por la aparición de espejos de agua de embalses y en gran manera por la deforestación afectando directamente al clima; por ejemplo, las precipitaciones a partir de las décadas 1960 y 1970 alcanzaron valores aproximadamente de 200 milímetros anuales en el oeste de la provincia de Buenos Aires y entre sus consecuencias hubo varias inundaciones y con bastante frecuencia en los terrenos más bajos. En la cuenca del Río de la Plata, la lluvia anual aumentó entre 10 y 40% en los últimos cuarenta años, con los mayores incrementos en el norte de Corrientes y el sur de Misiones. Asimismo, en el centro y este del país se ha acrecentado la frecuencia de las grandes lluvias. Como consecuencia de la mayor lluvia, los caudales de los ríos de la cuenca del Plata. Pese a que su caudal varía de modo marcado de un año para otro, el Bermejo, el Paraguay, el Iguazú, el Paraná y el Uruguay exhibieron una tendencia a hacerse más caudalosos, especialmente desde 1970.

Si bien la doctora Camilloni coincide con Depetris, advertimos que en gran manera también coincide con la doctora Solman respecto a los notorios cambios en el clima a causa del origen humano.

Conclusión

En el presente trabajo hemos reflexionado acerca de los distintos factores que afectan de manera constante al clima, sus causas y las consecuencias de las mismas, desde la perspectiva de los tres autores que hemos trabajado en clase.

Como pudimos observar en el primer eje, tanto Depetris como Camilloni comparten la idea afirmando que el cambio climático es causado casi plenamente por causas naturales, para entender un caso específico anotamos como ejemplo el caso del volcán Laki.

Con relación al segundo eje que hemos estudiado, Solman y Camilloni coinciden fuertemente en que el principal forzante del cambio climático de estos últimos tiempos son causados por el hombre dando como ejemplo la concentración media de dióxido de carbono en la atmósfera en el siglo XIX y en la actualidad e indicando las causas que provocan dicha inestabilidad causando daños ambientales severos como por ejemplo las inundaciones.

En síntesis, podemos decir que las opiniones de los 3 autores coincidan o no nos hacen conocer un poco más sobre la actualidad de esta problemática que nos compete a todos. Una propuesta interesante sería que haya más difusión, educación y preparación sobre este tema. El cambio climático necesita ser uno de los principales temas de interés de nuestro estado, y porque no también del mundo; así, desde chicos empezamos a cuidar más lo que nos mantiene vivos. Como dice Gabriel García Márquez: “No tenemos otro mundo al cual podernos mudar”.

Referencia Bibliográfica

Camilloni Inés (2008). “Cambio Climático”. Ciencia hoy, vol. 18, n° 103, 39-45

Depetris, Pedro (2010). “Las consecuencias de la tierra y el cambio climático global”. Ciencia hoy, vol. 20, N ° 117. 24-32

Solman, Silvina (2011). “Actividad humana y