Ryszard Kapuscinski: Los cínicos no sirven para este oficio.

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son encarcelados o asesinados por defender la verdad.

Todo periodista es un historiador, en el buen periodismo, además de la descripción de un acontecimiento, se detalla también por qué ha sucedido.

En la segunda parte el tema central es África, un relato acerca de su experiencia como reportero internacional. Las distintas partes de este continente en esta época estaban unidas por la lucha por la independencia. Los caminos hacia esta fueron muy diferentes: una lucha dura en Argelia, acuerdos constitucionales en Nigeria, o la duración prolongada en las colonias portuguesas. A pesar de todos los esfuerzos, la independencia fracasó, los países y los mecanismos económicos no se transformaron, todo siguió igual, la corrupción se extendió y no se pudieron evitar los conflictos. Destacaron, durante los sesenta, los golpes de estado militares a los que en muchos casos los poderes civiles no pudieron hacer frente, sin embargo, no fueron la solución. El final de la Guerra Fría no significó la paz en África, las luchas anteriores han desembocado en nuevas guerras por el poder y la riqueza. Finalmente, el mundo le ha dado la espalda a este continente, nadie tiene interés en África.

Seguido de esto, el periodista pone de manifiesto la dureza que tuvo que pasar, al vivir en los barrios más pobres y alimentándose de lo que podía encontrar, durante su vida en este continente el único medio de comunicación del que dispuso para mandar notas informativas fue el telefax, el cual no encontró en todos los países. Hoy en día el Kapuscinski responde que iría a Argelia y al mismo tiempo considera que el país de Sudáfrica es un milagro, que atravesó un conflicto racial y social muy fuerte.

Finalmente, la tercera parte se da el encuentro con el escritor y crítico inglés John Berger, sin embargo, Maria Nadotti modera de nuevo. En este se abordaron temas acerca de la importancia de la escritura, la investigación y el constante desarrollo de la sociedad en el marco de los medios de comunicación electrónicos. Cada uno de los exponentes da su punto de vista, sus argumentos se relacionan con sus obras, anécdotas vividas en viajes o estancias en algún lugar del mundo y su opinión acerca del mundo actual del siglo XXI: Berger se dedica más al sector rural, es decir, habla especialmente de los campesinos, a diferencia de Kapuscinski, el escritor inglés no estaba en los hechos, no hacía la noticia sino que se servía más de la ficción; así pues, se llega a la conclusión de que una fotografía siempre debe estar unida al relato.

Para terminar, este libro genera información de interés y buen conocimiento, provocando curiosidad por temas de periodismo, por tanto este periodista experimentado, se dirige a los jóvenes, deseando que en un futuro sean buenos profesionales y puedan vivir todo aquello que él vivió.