Antecedentes ¿Porque emprender?
Enviado por Rebecca • 8 de Octubre de 2018 • 1.344 Palabras (6 Páginas) • 385 Visitas
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sistemas de trabajo que funcionen de forma independiente
Como acabamos de ver, los motivos para emprender pueden ser muy diversos, pero si tuviésemos que elaborar un conjunto de posibles VENTAJAS que nos muevan a iniciar un negocio por cuenta propia, podríamos indicar las siguientes:
• Obtener independencia económica
• Controlar el propio destino
Además:
• Lograr beneficios económicos
• Convertirse en el propio jefe
• Fijar objetivos, horarios, metodología de trabajo
• Ganar prestigio y reconocimiento profesional y social
• Desarrollar ideas propias
• Aplicar las aptitudes personales
• Oportunidad de asumir la responsabilidad de una tarea
• Crear puestos de trabajo para otros
No existe ninguna fórmula que garantice el éxito de un emprendedor, se presentan características macro ambientales como crisis económicas, políticas y sociales que han propiciado el desarrollo de emprendedores de muy diversos tipos en donde el éxito consiste en sobrevivir a las crisis buscando su permanencia en los mercados.
El éxito se muestra en sus actitudes y comportamientos ellos trabajan duro y se manejan por un intenso compromiso y perseverancia, buscan la integridad y los motivan un ardiente deseo de competencia, excelencia y logro, buscan oportunidades para mejorar cualquier situación y el fracaso es una herramienta para aprender.
Marco teórico
Existen muchos apoyos, infinidad de maneras e inmensidad de información en la que te dicen como emprender! Desde apoyos económicos, sociales, y teóricos para empezar a emprender, entonces eso no lo podemos catalogar como un problema en sí, en este texto les comentaremos por qué emprender, pues ya todas las bases y procedimientos que debemos tomar para empezar a emprender. ¿Pero cuáles son las cosas por la que debemos emprender?.. Pues existen 5 ventajas que puedes tener al emprender.
Libertad de Tiempos
Estilo Propio
Independencia Económica
Decisiones 100%
Satisfacción Garantizada
Les explicaremos el cada uno de estos puntos
1. Libertad de Tiempos
Disponer de tus propios horarios y planificar tus vacaciones de acuerdo a tus necesidades son algunas de las libertades que el trabajo en relación de dependencia difícilmente pueda ofrecerte.
Trabajando de manera independiente puedes planificar y proyectar tu vida y el tiempo dedicado a tu familia, amigos y actividades recreativas en función de tus propias motivaciones y deseos.
2. Estilo Propio
Imponer el código de vestimenta que desees, fijar formas de trabajo acordes a tus gustos, diseñar el logo, la marca e incluso la decoración de tu oficina, son todas ideas posibles dentro de la empresa propia.
Marcar tu estilo es una de las mayores satisfacciones que puedes tener trabajando, y es una motivación extra que te ayudará a seguir apostando por tu negocio. El desarrollo y crecimiento personal laboral se realizará de acuerdo a tus gustos, tus deseos y tus sueños.
3. Independencia Económica
La independencia económica es un factor que, aunque muchos consideren negativo, tiene una fuerte veta positiva. Si bien trabajando para una empresa dispones de un ingreso “fijo” y un sueldo sin sobresaltos, el salario continúa siendo el mismo cuando a expensas de tu trabajo la empresa genera ganancias mayores a tu retribución mensual (aunque hayas sido el único responsable de ese logro).
Trabajando de manera independiente es la posibilidad de crecer económicamente y disfrutar de todas las ganancias que tu trabajo produzca de manera directa.
4. Decisiones 100%
Todas las decisiones finales sobre la empresa recaerán en tus hombros. Si bien puede sonar pesado tener que decidir absolutamente “todo”, no tendrás que pelear con Jefes o Gerentes que tengan visiones distintas del negocio. Tus decisiones serán la última palabra y todo el equipo de trabajo se alineará a tu forma de trabajo.
5. Satisfacción Garantizada
Muchas veces la mayor satisfacción de un proyecto no son los frutos económicos o tangibles, sino la realización del proyecto en sí mismo. La marca se va volviendo parte de uno, la oficina o la fábrica se convierten en un segundo hogar, los amigos y familiares son convocados como ayudantes y empleados, la propia empresa empieza a formar parte de la vida e “ir a trabajar” adquiere otro significado.
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