BALANCE DEL SECTOR BANCARIO EN 2016 Y PERSPECTIVAS CREDITICIAS PARA 2017

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Lo antedicho, conjugado con el aumento en los índices de desempleo, se traduce en un horizonte negativo a la hora de observar la evolución de los indicadores de pobreza, sus motivos y las posibilidades reales de disminución de la misma. Esto debido a la vinculación estrecha existente entre pobreza y desempleo.

En lo que atañe a las alzas en las tasas de interés y las restricciones políticas no favorecen al crecimiento de la banca, respecto a la cartera crediticia. De continuar esta tendencia, el aumento será igual o muy leve respecto a otros años. ASOBANCARIA utiliza una herramienta para estudiar y generar pronósticos, para especular y blindar el sector. Hablamos del INDICADOR DE ALERTA BANCARIA.

Este indicador analiza todo el contexto y panorama: local, nacional e internacional en distintos escenarios como; políticos, sociales, deuda, exportaciones, importaciones, económicos, etc. Con el podemos vislumbrar una efectiva gestión del riesgo, que posee un enfoque estructurado para manejar la incertidumbre relativa a una amenaza, a través de una secuencia de actividades humanas que incluyen evaluación de riesgo, estrategias de desarrollo para manejarlo y mitigación del riesgo utilizando recursos gerenciales. Las estrategias incluyen transferir el riesgo a otra parte, evadir el riesgo, reducir los efectos negativos del riesgo y aceptar algunas o todas las consecuencias de un riesgo particular.

Ahora bien, por otro lado el aumento del IVA, aumenta el costo de vida, teniendo un alto impacto en los colombianos. Con la reforma tributaria el aumento del IVA es el único cambio significativo para los colombianos, sobre todo a los de menores ingresos, porque desde el punto de vista macroeconómico las personas más pudientes tienen mayor capacidad de compra e incluso pagan más por lo productos que adquieren.

Es así como los más afectados serán los de clase media y baja. Los ciudadanos, deben limitarse o dejar de comprar, porque todo va a ser muy costoso para su bienestar como ser humano. Mientras tanto, la clase alta no solo consume eso, sino muchísimas otras cosas dado su poder de ingreso. Al tener que gastar más la capacidad de ahorro y de pagar las deudas disminuyen significativamente. Debido al encarecimiento de los productos, frenará el consumo de los mismos. El freno de consumo son menores ventas, las menores ventas equivalen a menor actividad económica, menor crecimiento y menor empleo.

Las carencias en la falta de exportación por productividad e ingenio, la incertidumbre en las economías desarrolladas, la recuperación moderada del petróleo y la reducción en la confianza en la banca, afectan de manera proporcional el sector financiero. Además es de recordar la relevancia e impacto que posee la cartera crediticia; sea cartera comercial, cartera de consumo, cartera de microcrédito, cartera de vivienda, frente al producto interno bruto PIB.

Ejemplos como la poca inversión y altas tasas para el apalancamiento en la cartera comercial. El desempleo que conduce a la reducción de la cartera de consumo. Generan reacciones tanto positivas como negativas a corto, mediano y largo plazo. Como podemos observar y entender las variables son determinantes y por ello el sector financiero dirime y examina con minuciosa cualquier eventualidad, que conlleve a la estabilidad del mercado, el estado y su mismo sector.