CLASIFICACIÓN DE LOS TIPOS DE EMPRENDIMIENTO

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La pregunta en el aire es: ¿cómo puede el país influenciar y generar un mayor número de empresas de Alto Impacto? La respuesta es tan amplia pues no hay una receta o una fórmula infalible para ello, el emprendimiento es influenciado por factores internos (propio de las personas) y externos (situaciones propias del país y del entorno o ecosistema emprendedor), muchas de ellas no son controlables, lo que empeora la situación.

- EL PANORAMA NACIONAL.

Cada año, ¿cuántos alumnos egresan a Nivel Superior? Según registros de la SEP, en el 2012 se graduaron 124,000 ingenieros; mientras que en el ciclo 2014-2015 a nivel Universitario se graduaron aproximadamente 435,561 y se espera que la cifra siga en aumento. Ante tales números de profesionales en las áreas tecnológicas, el gobierno debería aumentar el presupuesto para I+D (innovación y desarrollo), y con ello no sólo realizar un aumento del Producto Interno Bruto, sino también emplear a una parte de éstos profesionales en áreas de Investigación y Desarrollo.

Además de ello, otro aspecto importante es el crecimiento de la población económicamente activa, lo que la ONU le llama ventana de oportunidad poblacional, que es el momento en que hay un mayor número de personas activas que inactivas (menores de edad y personas de la tercera edad), México está pasando por ese momento y no está siendo aprovechado, el gobierno de Enrique Peña Nieto no tiene trazado como tal un plan estratégico para la creación de Activos intangibles o capital intelectual, y con ello se están dejando ir oportunidades de empleo para el país, con ello aumentar el crecimiento económico.

- ¿Y LA EDUCACIÓN DEL PAÍS?

Es necesario que, desde los primeros niveles educativos, los niños y jóvenes vean el emprendimiento en las aulas, en los libros, no sólo como un tema más, sino como parte de la cultura; es importante introducir desde edades tempranas los vocablos del emprendimiento o del ecosistema emprendedor, no sólo como un tema más, sino como parte de la cultura. Los libros son la primera ventana al conocimiento de los menores, es de conocimiento de todos, que el contenido de los libros y parte del sistema educativo no contribuyen a una cultura emprendedora, no promueven los términos de: innovación, creación, oportunidades, emprender proyectos; son términos que en nuestro país son utópicos e inalcanzables. Es a nivel medio superior cuando se comienza a hablar de “Proyectos emprendedores”, que son vistos como obligación por recibir notas aprobatorias, pero no se genera un seguimiento, motivación o información sobre las etapas posteriores, por lo que se decide abandonar.

Gracias a la era de la información y a la tendencia del emprendimiento, cada vez se ha estado dando mayor importancia a los perfiles de los Emprendedores de Alto Impacto como Steve Jobs, Bill Gates, Mark Zuckerberg, Richard Branson, siendo considerados como referentes de las próximas generaciones. Sin embargo, es necesario hacer del sistema educativo un programa más flexible y motivante, comenzando por las lecturas de los libros de texto de los menores, en los que debería aumentar los referentes a emprendimiento, así como en Historia hacen hincapié a los héroes nacionales, es preciso impulsar un espíritu emprendedor desde los más jóvenes. Aunado a ello, los términos y conceptos de los libros deben actualizarse y promover el Emprendimiento positivo, en el que las personas se sienten libres de generar ideas (Fuentes, 2013) y con ello tener una mejor perspectiva de la situación del país, sus necesidades y la manera de solucionarlas.

- CONCLUSIONES.

No cabe duda que la educación es la base no sólo de la sociedad, sino de cualquier cambio que se desee hacer en un país; la educación es la piedra angular del desarrollo económico y del ecosistema emprendedor, es necesario educar y motivar a toda la población respecto a los beneficios que trae, que si bien el emprendimiento no es la panacea a la situación en la que se encuentra el país, pero es un medio para mejorar y aumentar el capital intelectual del país y con ello el económico.

Algunas propuestas son:

- Como ya se había mencionado en el apartado anterior, es necesario que en las escuelas se hable sobre perfiles emprendedores de alto impacto como un referente, para que en estudios o niveles superiores, sus modelos de negocios puedan ser abordados o investigados.

- Es importante educar a las personas en materia de salud y libertad financiera, pues es lo que el emprendimiento a largo plazo persigue.

- Educar a manejar el riesgo y no sólo a evitarlo, parte de ello es lo que los inversionistas hacen, lo estudian para tomar las mejores decisiones, en que sí y en que no invertir.

- La escuela califica las aptitudes y conocimientos en una escala del 1 al 10, dotando de adjetivos como: listo, inteligente, exitoso, a aquel que lleva un 10, 9 u 8, y etiquetando como poco competente a los que han alcanzado una menor cifra; y aunque suena trillado, pero es preciso premiar a aquel que aprende de los errores y no sólo al que evita cometerlos. Con ello, se pueden desarrollar personas con menos miedo al fracaso; según el reporte anual del GEM, el 34% de las personas tiene miedo al fracaso; el mayor motivo a que algunos proyectos no despunten en las primeras etapas de desarrollo. (GEM (Global Entrepreneurship Monitor), 2016).

- Enriquecer la oferta académica con talleres o cursos cuya temática es propia del emprendimiento, como: Lean Startup, aceleración de negocios, búsqueda de inversionistas, realización de pitch a clientes potenciales, inversionistas y socios, etc.

- Vincular a los alumnos con mentores, empresarios o personas con experiencia en emprendimiento, para guiar y dar asesoría oportuna y con ello resolver posibles problemas en etapas tempranas del desarrollo de proyectos.

Si bien son variadas las ideas, todas éstas líneas de acción apuntan a la misma arista: la educación y la cultura de la sociedad, ambas representan los mayores retos y los motivos por los que se observa el emprendimiento con escepticismo. Pero pueden trabajarse desde su base, ¿cómo?, pues informando a la población de sus beneficios a nivel personal y social, permitiéndonos alcanzar la tan anhelada libertad financiera y la autorrealización que tanto hincapié hace Maslow en su Pirámide de Necesidades humanas.

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BIBLIOGRAFÍA.

IVAC-INSTITUTO DE CERTIFICACIÓN, S.L. . (Enero de 2010). Obtenido de IVAC: http://www.ivac.es/recursos/descargas/area-tecnica/norma-nt-166100-2010-ebt.pdf

Carrasco,