La influencia de los conceptos de calidad en las empresas

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Otra cosa para llamar la atención del cliente es el precio, el cual deberá ser competitivo porque de nada serviría tener el mejor producto a un precio muy superior al de su competencia, ya que habría muchas empresas que ofrecerían algo similar pero a un menor precio y es ahí donde pueden perder un gran parte del mercado porque la población no tendría la fácil acceso a la compra del producto y optarían por el que ofrezca lo mismo pero a un precio mucho más atractivo.

La calidad de un producto también se verá en su empaque o en su forma de entrega, pues es la primera impresión que tendrá el cliente antes de comprarlo, es tan importante, que puede definir si el cliente comprará o no el producto, por lo que las empresas deben tener siempre muy presente que deben de invertir en detalles con calidad: que proteja el producto, que lo presente llamativo y de buena calidad.

Otra ventaja competitiva en los mercados, es la cualidad de ser originales o diferentes pero con un nivel alto en calidad en los productos o servicios, esto se puede lograr si la calidad no sólo se manifiesta en el resultado si no en los empleados, si las condiciones de trabajo para los empleados son de calidad, entonces estos trabajarán con mayor rendimiento y por lo tanto se llevará a cabo un mejor trabajo en el análisis de calidad de inspección o procesos del producto. Sin embargo, también es importante que el cliente reconozca que existe ésa calidad en el trabajo, lo cual se alcanza con la atención que se tiene hacia el cliente a la hora de entregar el producto, responder dudas o en su debido caso, aceptar productos con errores y entregar aquellos que no los cuenten.

En estos tiempos, el consumidor es difícil, por lo que la calidad es indispensable, en pocas palabras, empresa que no tenga calidad no está dentro del juego laboral.

Conclusión:

A través de estas ideas podemos concluir que la calidad es una motivación en las organizaciones y que no es algo que suceda de manera sencilla, al contrario es un proceso que está en constante evolución según los cambios de su ambiente y en el que todos participan, desde los altos ejecutivos de las empresas, sus empleados, vendedores, hasta el último consumidor, que al aceptar el producto le da la posibilidad a la compañía de seguir creciendo y mejorando. Y que aunque se llega a ella a través de distintos y a veces complicados métodos es necesaria buscarla siempre y hacer lo necesario para obtenerla, ya que la satisfacción al lograrla beneficiará a ambas partes, a las empresas y a los clientes, y un cliente satisfecho es un cliente fiel y por lo tanto contribuye al crecimiento de la organización, completando e iniciando de nuevo el ciclo de la calidad.