Rentabilidad y Estrategia

La estrategia y la rentabilidad.

Estrategia y rentabilidad son dos conceptos que van de la mano en términos empresariales, hay que tomar en cuenta que, si se quiere ser rentable en lo que se hace, se deben tomar las decisiones correctas; tales decisiones deberán estar acompañadas de buenas estrategias.

Es importante mencionar, que es vital la formación de una organización que contribuya a la realización o cumplimiento de los objetivos trazados en la estrategia, es por ello que una organización siempre estará a cargo del personal directivo. Razón por la cual, la alta dirección debe manejar los hilos de la organización, en las actividades operativas, en la delegación de trabajo y todas aquellas actividades que beneficien o perjudiquen el correcto funcionamiento de la organización. Una organización es una actividad y disciplina que recae en los hombros del personal directivo.

La eficiencia y la eficacia de la organización estará vinculado directamente con la adopción de la estrategia.

La eficiencia y eficacia, son términos que suenan iguales; sin embargo, su significado va más allá del sonido que se emite al expresar ambas palabras; y es que la eficiencia esta enfocada al logro de los objetivos y metas utilizando la menor cantidad de recursos disponibles; mientras que la eficacia se traduce en la capacidad de la toma de decisiones en el momento justo y adecuado. Por lo tanto, las organizaciones están en la búsqueda constante de la eficiencia operativa y la eficacia al momento de implementar el plan de acción para el cumplimiento de la estrategia principal; la cual es obtener la máxima utilidad para los accionistas, cabe destacar que para que una organización pueda trabajar adecuadamente, todos sus integrantes deben estar completamente comprometidos con la estrategia. No puede existir una organización en la cual sus integrantes no se pongan de acuerdo, porque definitivamente fracasaran en los primeros intentos por cumplir la estrategia y el plan trazado por el estratega.

Es necesario recalcar, que el estratega y la organización deberán estar a disposición de los accionistas, por que es a ellos quienes se deben; esto debido a que el accionista pone su capital en riesgo, por lo tanto, el siempre estará esperando los rendimientos de su capital. Obviamente, cuando se pone el capital en riesgo lo menos que se puede esperar es la obtención de utilidades, hay casos en los cuales el capital que ha puesto en riesgo el accionista fracasa, se va a la quiebra; sin embargo, en esta ocasión se busca hacer conciencia de la importancia que tiene el cumplimiento a cabalidad de las estrategias corporativas; las cuales necesitan tener el talento humano idóneo para alcanzar los objetivos.

Claramente, si el accionista ve el retorno del capital invertido en el corto o mediano plazo, el accionista estará siempre a la disposición de la organización.

Además, existen ocasiones en las cuales no hay un retorno en efectivo de las utilidades; sino más bien se busca que la rentabilidad sea trasladada a la inversión en propiedad planta y equipo, ampliación de las instalaciones, lanzamiento de nuevos productos entre otros, hay que tomar en cuenta que la inversión anteriormente mencionada debe tener el beneplácito de todos los accionistas; todo ello va encaminado a la creación de valor de la empresa; si bien es cierto no existe una distribución de utilidades, pero se espera que la inversión en el futuro pueda crear mayor utilidad a la obtenida en el presente. Por lo tanto, los accionistas siempre se verán seducidos a medida que se empiece a observar una correcta aplicación de la estrategia porque garantizará los retornos esperados por el accionista.