HACIA LA PAZ PERPETUA. UN ESBOZO FILOSÓFICO
Enviado por Eric • 20 de Marzo de 2018 • 1.895 Palabras (8 Páginas) • 378 Visitas
...
Frente a la denuncia del autor prusiano hacia las primeras, consecuencia en su mayoría del enfrentamiento entre los Estados salvajes en estado de naturaleza sin fuerza legal externa que los coaccione, Kant defendió el carácter social de las segundas como “motor de cambio hacia mejores formas de convivencia social”. Frente a la incoherencia que puede representar este doble posicionamiento frente a los conflictos, Kant defiende que el orden civil del escenario interestatal debe ser consistente para poder garantizar a su vez el establecimiento de una constitución civil en las relaciones entre los individuos de un mismo Estado. Este concepto resulta especialmente trascendental para poder entender el sentido de su obra, y comprender las motivaciones que impulsaron a este filósofo prusiano a formular un proyecto de paz perpetua entre los Estados. Tan sólo un orden internacional estable y en paz permitiría desarrollar un orden social dentro de los propios Estados sobre la base de una constitución republicana, contrato originario que permita al ser humano salir del estado de naturaleza y alcanzar la felicidad.
No siendo un periodo radicalmente diferente a los anteriores en lo que al nivel de beligerancia se refiere, se inició sin embargo durante este siglo, también conocido como el Siglo de las Luces, una corriente de pensamiento denominada la Ilustración, movimiento cultural caracterizado por un intento de anteponer la razón humana a la fe, la superstición y la tiranía. Kant fue uno de los principales representantes de este movimiento que, lejos de justificar el papel de la guerra en las relaciones entre los Estados, trataron de denunciar el carácter irracional de los conflictos y buscaron mecanismos destinados a garantizar una adecuada relación entre los actores de la escena internacional. Al amparo de la lógica de la razón, Kant y sus coetáneos trataron de mostrar la irracionalidad de la guerra, y abordar desde la razón la búsqueda del mecanismo que mejor abordara un proyecto de paz perpetua, poniendo así fin al estado de guerra entre las naciones.
Ya en clave de prospectiva, resulta bastante interesante analizar, aunque no sea de manera pormenorizada, como a lo largo de la historia el incumplimiento de algunos de los postulados establecidos por Kant ha dado lugar a la reanudación de las hostilidades entre uno o varios Estados. Esto no quiere decir que en el hipotético caso de que se llegaran a cumplir todas las condiciones necesarias para alcanzar la paz perpetua, esta llegara a alcanzarse de manera efectiva. Pero lo que sí se podría afirmar categóricamente es que en todos los casos se han dejado de observar alguno o varios preceptos de los establecidos por Kant en su obra “Hacia la paz perpetua”. Así, en varias ocasiones a lo largo de la historia, la reserva secreta de iniciar o reanudar las hostilidades con posterioridad a un tratado de paz han impedido alcanzar un estado de paz, como fue el caso de Tratado de no Agresión entre Alemania y la URSS en 1939, considerado por Hitler como un aplazamiento temporal del proceso expansionista del territorio alemán hacia el oeste.
Por el contrario, la observancia de los principios recogidos en los postulados de su obra, bien mediante la inclusión en pactos universales o bien en los acuerdos alcanzados tras un enfrentamiento entre dos actores, ha permitido contribuir a alcanzar un estado de paz y estabilidad en el ámbito internacional que favorecen en no pequeña medida la consecución de una paz perpetua. Los principios kantianos recogidos en esta obra se corresponden en gran medida con el marco conceptual básico sobre el que se sustenta la Organización de Naciones Unidas, en el cual se delega gran parte de la responsabilidad de mantener un orden internacional estable sobre la capacidad de entendimiento entre Estados. Para poner en práctica los acuerdos alcanzados dependen únicamente de la cooperación voluntaria entre sus miembros, sin la necesidad de tener que acudir a instancias superiores para resolver los conflictos mas allá de la referencia expresa al Consejo de Seguridad de dicho organismo.
A modo de ejemplo, el tratamiento que otorga Kant a los Estados como “sociedades de hombres que no pueden ser adquiridos por otros mediante herencia, permuta, compra o donación” (artículo 2º) coincide con el capítulo XI de la Carta de Naciones Unidas, y la posterior Resolución 1514 de 1960, relativos a los territorios no autónomos. La erradicación del modelo colonial en el mundo ha favoreciendo la evolución de los territorios y su desarrollo progresivo hacia un autogobierno y libre determinación, contribuyendo de manera determinante a reducir los enfrentamientos entre un Estado y los pueblos anexados.
En definitiva, el proyecto de paz perpetua defendida por Kant, obra marcada por el protagonismo de la moral en las relaciones interestatales para alcanzar la paz en la escena internacional, ha tenido una gran repercusión sobre la política internacional de los Estados. La aportación de las ideas kantianas a las relaciones internacionales ha inspirado a numerosos teóricos a lo largo de la historia y ha servido de base en numerosas ocasiones para desarrollar mecanismos que contribuyan a alcanzar la paz perpetua. Se trata por lo tanto de una obra que perdurará a lo largo de la historia por su rechazo al empleo de la fuerza como medio para la resolución de litigios internacionales y por su defensa de la cooperación y el entendimiento entre los Estados.
---------------------------------------------------------------
...