Resumen TEORÍA DEL ESTADO
Enviado por Christopher • 27 de Septiembre de 2018 • 3.060 Palabras (13 Páginas) • 418 Visitas
...
Son las grandes obras las que han dado contenido ideológico a los partidos políticos que luchan por la conquista del poder para realizar su ideal de gobierno. Cuando los medios y los fines no coinciden o los fines son nada más que una pantalla para ocultar los intereses personales de los actores para alcanzar la conquista del poder y gozar de sus prebendas, nos hallamos en el terreno de la “politiquería”.
- El poder
El poder puede afectar el Estado de Derecho. Para Max Weber es la “probabilidad que tiene un hombre o un grupo de hombres de imponer su propia voluntad en una acción comunitaria, inclusive contra la oposición de los demás miembros.”. Algunos autores prefieren el uso de la palabra “autoridad” para restringirlo al concepto de lo político.
El poder sobre los hombres es algo en que éstos tienen que competir; poder, que cuando se logra, tiende a agrandarse a costa de las libertades, es decir a mayor poder, menor libertad.
Los hombres nacen libres e iguales pero una ley natural los obliga a asociarse, siendo necesaria la existencia de un jefe y que unos manden y otros obedezcan.
Los poderes espirituales como la religión, la ciencia o el arte, si bien aparentemente no tienen nada que ver con la política, ejercen influencia sobre ésta y a la vez son influenciados por la misma.
El exceso de poder desborda en tiranías, por lo que es necesario encontrarle al poder su justo limite. Thomas Hobbes en su famosa obra Leviathan expresa “que el hombre es egoísta y malvado y que si sigue únicamente sus impulsos irán en persecución de sus apetitos sin más limitaciones que el miedo. El hombre es el lobo del hombre (homo homini lupus). Para terminar ese estado de cosas, los hombres, mediante un acto voluntario, constituyen el estado para su propia seguridad y “abandonar esa miserable condición de guerra”. El único camino dice es conferir todo su poder a un hombre o a una asamblea mediante un contrato incondicional. Es así como el Estado (el Leviathan el dios mortal al cual debemos nuestra paz y nuestra defensa), adquiere un poder soberano sobre cada uno de sus súbditos. El pacto no obliga al gobernante, sólo compromete al pueblo que debe guardar absoluta sumisión.
Con esta doctrina absolutista que era una exaltación al poder, se produce más tarde la sustentada por John Locke, en su ensayo sobre el gobierno civil, sosteniendo que por la falta de autoridad efectivamente surgen problemas que no pueden ser resueltos, lo que convence a los hombres a construirla, haciéndola a través de un convenio, pero que en este convenio no exista una entrega total de los derechos como pretendía Hobbes. Esta doctrina fue modificada por Juan Jacobo Rousseau en su célebre libro “El contrato Social”, mediante este contrato cada uno pone su poder y su persona bajo la dirección de la voluntad general. La condición es igual para todos, por lo que la voluntad general es la poseedora del poder absoluto que garantiza a cada uno la libertad y la igualdad, derechos que antes eran naturales y ahora son civiles.
Doctrinas que niegan la legitimidad del poder son el anarquismo y el comunismo, uno individualista y otro colectivista.
Existen teorías que consideran que el poder viene de los gobernantes y las que por el contrario, afirman que los gobernados son los verdaderos detentadores, de ahí las dos formas principales del poder: la dictadura y la democracia.
- La Política y la Ética.
Para Platón, la ética y la política eran políticas paralelas y siendo la polis un hombre en grande, estaba encargada de la realización de la justicia, la virtud suprema. Los primeros años del cristianismo se condenaba el ejercicio del poder como nocivo. Fue Maquiavelo el primero que secularizó la política, independizándola de la ética. Preocupado por la falta de unidad italiana, mientras los Estados vecinos como Francia y España se fortalecían y hacían victimas de sus conquistas a los pequeños Estados Italianos, en una época en que la fuerza y la insidia predominaban, sus obras son un reflejo de la necesidad que un príncipe italiano asumiera la labor unificadora. Para ello había que ensalzar el poder y elevarlo a la categoría de bien supremo. El poder se colocaba así por encima de la moral, lo que contaba era el éxito. “El fin justifica los medios, cualesquiera que éstos fueran, pues la política no era más ya el campo de la moral sino el de la técnica.
Legaz y Lacambra indican que si lo político tiene el mismo rango que el valor de la moralidad, eso sería la “santificación” de la política. El gran político debe tener arraigado el espíritu de justicia, sin el cual no hará obra grande.
No puede haber política contraria a la justicia. No puede haber dos morales “la moral de lo político” y la “moral corriente”, pues eso sería maquiavelismo puro. Como encauzar lo político hacia lo moral es un problema difícil de solucionar, especialmente porque lo moral pertenece al fuero interno de las personas. La única forma que se puede limitar las acciones de los hombres es mediante el derecho. Por eso el Estado de Derecho responde a una auténtica política, porque su finalidad es la realización de la justicia. En la política se conoce con el nombre de legitimidad. La legitimidad no es más que la sujeción a la ley. Deutsch encuentra tres clases de legitimidad. Por procedimiento, por representación y por resultados.
- La Política y la Ética.
El valor es el grado de utilidad o aptitud de las cosas, para satisfacer las necesidades o proporcionar bienestar, que, a la vez, colma de firmeza, eficacia y virtud a los actos para producir sus efectos, infundiendo en la persona que lo posee cualidades positivas para desarrollar una determinada actividad.
Los políticos tienen que cumplir con lo que prometen. Si no luchan contra la corrupción serán necios. Porque si hay algo extremadamente importante en un político es la honestidad y la transparencia, que se vuelven fundamentales para alcanzar sus ideales. La política y los valores es la combinación ideal en la cual el arte referente al gobierno de los Estados resulta una actividad con un grado de utilidad o aptitud suficiente de las cosas para satisfacer las necesidades o proporcionar bienestar.
La política es un gran juego de intereses. La política se ocupa de la interacción de intereses, reclamaciones y distribución de las recompensas, es decir de los valores. En esto de las recompensas puede entenderse la política que sólo busca la distribución del poder, la repartición de puestos
...