Resumen republica de platon.

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Platón consideraba la idea de filosofía como la osadía por encontrar un punto de referencia estable y unificador de todo lo que tiene que ver con el campo del conocimiento. El mundo suprasensible y especialmente la Idea del Bien o Idea Suprema del Bien son este punto de referencia; son el centro unificador de todo el campo del conocimiento, desde donde se irradia la luz que nos permite ver la verdadera realidad.

Las ideas representan las "esencias" de los objetos de conocimiento, es decir, aquello que está comprendido en el concepto, pero que no debemos confundir con el concepto en Platón por cuanto para éste las ideas no son contenidos mentales sino objetos que tienen existencia propia e independiente y a los que se refieren los contenidos mentales designados por los conceptos. Estos objetos o "esencias" subsisten independientemente de que sean o no pensados, y como tales poseen las mismas características del ser de Parménides: son únicas, eternas, e inmutables, y lo mismo que el ser parmenídeo, son incognoscibles por los sentidos y solo pueden serlo por medio de la razón.

Para Platón "conocer" es propagar el Bien en nuestra, es siempre una experiencia de la presencia del bien, de la justicia, de la belleza, desarrolla que las ideas o las realidades se dan a través de la dialéctica (conocimiento). Nos habla de cómo la Dialéctica sirve para entender el por qué de las cosas, viendo y enfocándonos desde el ante de las cosas, para saber cómo se dan y porque se plantean, buscando su origen y dándole diferentes tipos de razonamientos teniendo varios puntos de vistas que se derivan la una de la otra, todos apuntando a un origen especifico lo que la hace una idea inteligible como la propia y duradera que no puede ser cambiada o modificada y de la que se apoyan para hacerse apreciaciones similares o parecerse por algún motivo, dándonos ejemplos como: hay una belleza en si por la que son bellos los objetos, dando a entender que para catalogar lo bello algo, debemos tener un conocimiento previo de algo o basarnos de algo que ya está consolidado como real y relacionarlo como algo realmente bello y asociarlo o relacionarlo al objeto o cosa en cuestión.

Son asociaciones, relación o comparaciones que hacemos de una idea con un objeto, es la presencia de la idea en el objeto, de la participación del objeto en la idea, de imitación de la idea por el objeto, es decir lo que encontramos en común para relacionarla con él objeto, como cuando decimos que un televisor es grande, pero porque decimos que el televisor es grande, porque tenemos una idea en nuestro dialecto donde el adjetivo grande que ya tenemos referenciado lo asociamos o encontramos muy parecido a lo que estamos analizando. Se parte de un origen ya establecido en nuestra parte cognitiva que se hace difícil modificar.

A manera de conclusión con respecto a la Teoría de las ideas, Platón concibió las ideas de manera jerárquica, como primero la idea suprema es la de Dios, que es la que ilumina todas las demás ideas. La idea de Dios representa en Platón la explicación. En el fondo, la teoría de las ideas está destinada a explicar el camino por el que uno alcanza el conocimiento y también cómo las cosas han llegado a ser lo que son.

Para Platón, la Idea del Bien es la entidad más importante de todas las entidades que pueblan el Mundo Inteligible.

A nuestro parecer la justicia es para Platón, armonía de los deseos; equilibrio interior de las partes del alma. En términos políticos, Platón define la justicia sirviéndose de la misma idea de armonía entre las clases sociales. Reina la justicia cuando cada cual hace lo suyo, entendiendo por tal lo que es de acuerdo a su ser. Platón Desarrolla su teoría de la justicia, pese a que la relaciona a la forma de organizar el Estado, pero no asume un carácter específicamente jurídico sino moral, pues la concibe como una virtud, pero también hablo En la “República”, Platón parece revelar su creencia en la inmortalidad de los hombres.

Hay pasajes en sus escritos donde Sócrates menciona que esta vida es una preparación para la eternidad; y también observaciones sobre lo que decía Eurípides, que podría tener razón al afirmar que esta vida en el mundo, en realidad, es la muerte; y que la muerte es la verdadera vida.

Lo cierto es que Platón quería transmitir que el alma sigue existiendo después de la muerte del cuerpo y tendría una vida después de la muerte, acorde a como haya sido su conducta en este mundo.

La doctrina de las sucesivas reencarnaciones que Platón propone en los mitos no se sabe hasta qué punto eran tomadas por él en serio, aunque parece ser que el alma podría escapar de ese ciclo y también que podrían ser arrojados para siempre al Tártaro, los pecadores que no se corrijan a tiempo.

Platón sostiene que el Estado es comparable al ser humano: se trata de un hombre en grande, de un organismo en el que la justicia exige que cada estamento haga lo que corresponde, sin entrometerse en las funciones ajenas. Dice Platón que la justicia se lee más claramente en el Estado pues en él aparece escrita con mayúscula y no en minúscula, como ocurre en el hombre.

Ya después en el último dialogo habla sobre la desilusión de platón, Platón afirma que el filósofo ha de sentir una gran repugnancia a gobernar, pero habrá que obligarle a que lo haga cuando le llegue el turno entre los de su clase, bien que dejándole la mayoría del tiempo para la contemplación felicísima del Bien. Y donde expresa en tonos melancólicos sobre la posibilidad del gobierno de los filósofos, que sólo cabe por gracia de un «divino azar». Mientras éste no ocurra, el modelo queda en el cielo y el filósofo debe limitarse a regular por él su propio Estado, es decir, el temple y conducta de su propia persona.

Como conclusión de la Republica, Platón lo que pretendía era demostrar la necesidad de educar a los ciudadanos más ilustres para que obren con justicia dentro de una ciudad (polis) justa. ¿A quién se dará, y cómo, esta educación? A jóvenes escogidos que estén dotados de determinadas cualidades. Consumado el período de su formación, estarán en condiciones de gobernar, pues serán los mejores de los hombres y los más hábiles políticos del mundo.

El filósofo es alguien que ha roto con las visiones engañosas del mundo sensible para vivir entre las ideas.

La afirmación de que no es por la vista, sino por la inteligencia como se puede llegar a la realidad que está en lo alto, pone de manifiesto y nos hace comprender el valor de la filosofía, cuyo origen está en el asombro o en la