El cometido de la historia es descubrir los principios constantes y universales de la naturaleza humana ¿En qué medida cumplen la historia y otra de las áreas de conocimiento este cometido?
Enviado por Jillian • 19 de Julio de 2018 • 1.729 Palabras (7 Páginas) • 577 Visitas
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Desde el inicio de vida en el universo hubo un factor regulador en el desencadenamiento de los cambios que el universo sufrió. Estos hechos parecen ordenados en relación a un factor de equilibrio y en una debida secuencia; es decir, ordenados o desencadenados en aparente coherencia o correspondencia con un principio constante y universal, tentativamente podríamos afirmar que este es el principio de la causalidad, el mismo que postula: todo procede de un punto de origen. Si el hombre es un ser en el universo, es natural que empiece con el cuestionamiento sobre su propio origen. Si es capaz de preguntarse por el origen del universo que lo alberga, es inevitable que también lo haga por el suyo propio. El principio propiamente humano de la causalidad y la generación, es el resultado de aplicar la razón. Pero, ello no basta para explicar el por qué de las interrogantes del hombre, no basta encontrar respuestas sobre nuestro origen biológico, requerimos respuestas emotivas sobre el propósito de nuestra existencia. El motor de la las Ciencias Naturales no es solo racional es también emotivo, lo que impulsa al hombre es la sensación de vacío emocional en relación a su origen y a su propósito en la vida.
Charles Darwin padre de la teoría evolutiva, puede haber respondido a ambas necesidades cuando planteó su teoría. Nuestra razón nos dice que procedemos naturalmente de algún lugar. Para tener más lógica en nuestros razonamientos, pensamos que procedemos de alguna especie, que años de años atrás con el tiempo ha ido evolucionando hasta lo que somos nosotros hoy en día, seres humanos; y es acerca de eso de lo que se trata la teoría darwiniana. Aquella teoría se basa en que el hombre es un animal más, que está hecho de la misma sustancia de los demás seres vivos, y que hemos aparecido tras muchos millones de años de aventura evolutiva en constancias, es decir que descendemos de alguna especie de mono.
Contrariamente, observamos que si bien hay un sustento emocional en el interés darwiniano por responder acerca del origen del hombre, también es cierto que otras personas han recurrido a una emotividad alternativa que también ha recurrido a un modo particular de usar la razón para rechazar la ley de la evolución; introduciendo variables de índole religiosa para sustentar la y no creencia de nuestra descendencia primate. La razón al servicio de esta postura emocional sostiene la existencia de una fuerza más sobrenatural que nos trajo al mundo: la teoría del creacionismo basada en la explicación Bíblica de nuestro origen. Desde este modo particular de razonar se defiende que toda palabra y afirmación escrita en la Biblia es científica e históricamente verdadera, pero aún más el creacionismo nos proporciona algo con qué llenar el vacío de nuestra existencia, es decir, nos brinda un propósito de vida.
Por lo que, el que las Ciencias Naturales tengan como propósito descubrir los principios universales de nuestra naturaleza la coloca en la incómoda disputa con la teoría creacionista. Pese a esto, es innegable que las Ciencias Naturales sí tienen por propósito proporcionarnos explicaciones acerca de nuestro origen, la razón opera de manera muy eficiente a través del método científico para postular teorías y afirmar leyes que logran esclarecer nebulosas creencias o dudas hipotéticas. Pero no tiene el mismo éxito cuando deben llenar el vacío emocional que presupone el no poder responder a ¿Cuál es el propósito de nuestra existencia? Ese vacío es llenado por la religión que recurre a otro de modo de uso para la razón, colocándola por debajo de la emoción.
A modo de conclusión tanto la Historia como las Ciencias Naturales tienen como propósito descubrir principios constantes y universales de nuestra naturaleza. Se vio que como principio constante de la naturaleza humana la historia persigue su descubrimiento, pero de manera implícita, pues es mucho más profunda y exige un mejor estado de la razón en uso. De otro lado, las Ciencias Naturales si tienen explícito el propósito de descubrir tales principios constantes y universales. Pero no son capaces de potenciar o sustentar únicamente en la razón el propósito de nuestra existencia.
Bibliografía
Fuentes primarias
- CRUZ VERGARA, Eliseo. (1997).La concepción del conocimiento histórico en Hegel. Puerto Rico: Universidad de Puerto Rico.
- DARWIN, Charles. (1994). El origen del hombre. Lima: Chirrre
- GARDER, Jostein. (1991). El mundo de Sofía. Madrid: Siruela.
Fuentes secundarias
- FILOSOFIA Y EDUCACIÓN. Lecciones sobre Marx. (en línea) http://www.filosofia.net/materiales/tem/marx.htm> (citado 30 abril 2014)
- COMPARTIENDO FILOSOFÍA. Analiza la crítica al principio de causalidad. (en línea) http://compartiendofilosofia.wordpress.com/2013/01/31/analiza-la-critica-al-principio-de-causalidad-asi-como-las-consecuencias-filosoficas-de-dicha-critica/ > (citado 1 mayo 2014)
- FMM EDUCACIÓN. ¿Felicidad, derecho, sensación o promesa?( en línea) www.fmmeducacion.com.ar/Recursos/Felicidad_bertossi.doc> (citado 8 junio 2014)
- GRADO NOVENO- BIOLOGIA. Teoría del Creacionismo.(en línea) https://sites.google.com/site/gradonovenobiologia/teorias-de-la-evolucion/teoria-del-creacionismo >(citado 1 mayo 2014)
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