La falsa identidad de la didáctica

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Pero, ¿Qué pasa con el contexto del alumno? ¿Qué pasa si tu alumno viene sin desayunar y le pides que haga una lectura extensa? O ¿Qué pasa si tu clase comienza a las siete de la mañana y se hace tres horas de camino a la escuela? ¿A qué hora se tendría que levantar? ¿Qué actitud esperas del alumno agotado?

La didáctica tiene como deber considerar al alumno como sujeto no como objeto, tiene el deber de buscar las posibilidades más efectivas para el proceso de enseñanza-aprendizaje y hacer fructíferos los conocimientos adquiridos.

Porque, ¿Cuántas veces no pasamos por un profesor al que no te entendíamos nada? ¿Cuántas horas en el salón de clases y lo único productivo era la asistencia?; el profesor debió de implementar la didáctica para asegurarse de que aprendieras algo.

Al obtener los conocimientos se pasa por un proceso doloroso por el cual el sujeto destruye, reconstruye y produce sus propios conocimientos. Entonces, un punto clave para la didáctica es que el sujeto no quede igual en cuanto a conocimientos, sino que sea productivo en su formación.

Si el objeto de estudio es el proceso de enseñanza-aprendizaje, podemos puntualizar como a la enseñanza como un acto de proveer herramientas para que el sujeto aprenda; y al aprendizaje como la acción de tomar posesión del conocimiento, por ello siempre es posible que se tenga una enseñanza sin haber obtenido un aprendizaje.

Es importante resaltar que la didáctica no debe dar la espalda al contexto social, cultural y económico del sujeto ya que la intervención podría percibirse como un fenómeno de aprendizaje apartado de la realidad y con ello dar como resultado el desinterés del sujeto; es decir que la enseñanza se adecue a las necesidades del alumno y a la sociedad donde se encuentra.

El objetivo de la didáctica es orientar las actividades de aprendizaje para que tenga como resultado: progreso, continuidad y unidad, es por ello que la didáctica y el acto educativo deben adaptarse al sujeto y no viceversa.

El pedagogo por su parte emplea la didáctica para analizar, planear y diseñar las bases de la teoría pedagógica; así pueden seleccionar los conocimientos adecuados para cada etapa y contexto del alumno.

Hay mucha polémica respecto a la identidad de la didáctica, para algunos se trata de una ciencia o un arte mientras que otros la consideran solo una disciplina, lo cierto es que la didáctica se encuentra presente en todo aquello que tenga que ver con la formación del sujeto.

CONCLUSIÓN

ÚNICA. La didáctica no se puede tratar de forma rígida Como solo un conjunto de normas estandarizadas a seguir pues la didáctica es todo aquello que un alumno requiere para aprender y esto va mas allá de solo libros y materiales, un alumno requiere tener un estado físico y emocional apto para aprender y esto difícilmente será homogéneo ya que cada alumno vive circunstancias difíciles y particulares y por ello al docente no se le puede simplemente otorgar un reglamento universal a seguir, no, al docente se le debe dar un curso de humanización para que entienda a sus alumnos

en lo particular y antes de impartir cualquier curso debe obligarse a conocer a sus alumnos y circunstancias particulares y con base en ello definir la didáctica que debe llevar a cabo. La didáctica es un instrumento que debe ser cambiante y adaptarse a cada curso, es como una pieza de arte que el docente debe forjar para sus alumnos en cada curso y aprovechar lo que tiene a su disposición para cada vez lograr forjar una pieza maestra de la enseñanza. Estos elementos serán los libros, los cuadernos, los lápices y colores, así como también la personalidad, fortalezas, defectos y circunstancias de sus alumnos. Al entender la didáctica como un ente cambiante al fin podremos encontrar su esencia y lograr su utilidad.

Verde- desarrollar mas el texto.

Un buen trabajo