” El desafío educativo y Tecnológico de México y América Latina”
Enviado por tolero • 30 de Mayo de 2018 • 1.165 Palabras (5 Páginas) • 451 Visitas
...
América latina no le apuesta a la educación y se olvida de las verdaderas fuerzas del futuro como es la educación, la ciencia, la tecnología y la cultura. Produce más licenciados enfocados en humanidades o ciencias políticas, que ingenieros; no se producen patentes ni productos de valor agregado; no se facilita la innovación y la invención; y prevalece una cultura de no tolerancia al fracaso. Ante ésta dura y cruel realidad, de la que México no es exento, el autor plantea algunas recomendaciones como son:
- Mirar hacia adelante, pero sin dejar de mirar para atrás.
- Reconocer la mala situación que se vive; tener humildad.
- Formar buenos maestros.
- A través de la presión social, obligar al gobierno a invertir en educación de calidad, tal como lo hizo Brasil, con su movimiento nacional social de presión y que le ha redundado en beneficios positivos, logrando despuntar como una de los mejores modelos de América latina.
Indudablemente la dura crítica que hace Andres Oppenheimer a la educación, golpea directamente en la llaga de quienes estamos insertos en éste ámbito, pues nos hace reflexionar y darnos cuenta de cuan corresponsable somos de la situación que prevalece en nuestro país; cuan pasiva ha sido nuestra participación para mejorar el sistema. Argumentos o justificaciones las hay y muchas, pero lo verdaderamente importante, y como lo plantea el mismo autor, es tener “humildad” y reconocer que en verdad estamos mal y que tenemos mucho que mejorar; debemos como ciudadanos empezar a cambiar nuestras actitudes y nuestra perspectiva al respecto. ¿Quejarnos o criticar? Yo creo que no ésta mal. Lo que en verdad si está mal es no proponer soluciones. Debemos empezar a cambiar nosotros mismos, empezar a ser mejores personas, congruentes e íntegras, y sólo así seremos mejores maestros y mejores profesionales. Dejar de esperar a que los demás cambien, para nosotros poder cambiar; dejar de esperar a que nos resuelvan nuestros problemas. Debemos ser críticos, pero también constructivos.
En mi quehacer docente, la reflexión sobre el contenido me lleva a tomar una decisión: Dejar de esperar a que pasen cosas buenas, sino por el contrario, empezar a trabajar para recibir cosas grandiosas. Y ello implica un compromiso personal conmigo mismo, de ser mejor persona, mejor maestro, y ocuparme en lugar de preocuparme por lo que me corresponde, sabiendo mis alcances y limitaciones, La situación es difícil, pero tengo fé en Dios que la perspectiva para nuestro país cambie, y la esperanza de que mi gente despierte del letargo en el que se encuentre y luchemos por un mejor país. Por lo pronto, tengo mucho trabajo que hacer en mi quehacer docente. Disciplinarme a mi mismo. Ser responsable en todos los aspectos. Motivar a mis alumnos a cambiar sus paradigmas respecto a su aprendizaje y recalcar la importancia de una educación de calidad, pero a la vez motivarlos a que nos exigan a nosotros como maestros a ser mejores y estar preparándonos constantemente para responder a las necesidades del entorno y a sus propias necesidades, lo que de alguna manera podría ser la antesala para que ellos empiecen a exigir no sólo a los docentes, sino también a los demás ciudadanos, a los gobiernos a fin de que sean también partícipes del motor que habrá de generar cambios positivos.
...