El proceso posrevolucionario en México

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Ante la necesidad de buscar el reconocimiento de Washington, conseguir crédito y reanudar los flujos de capital externo, Obregón siguió las políticas de Carranza y busco establecer estrategias de entendimiento con la banca internacional. Había proclamado a la opinión pública la necesidad de fortalecer el crédito exterior e interior del país mediante la modificación de los resultados de la política de incautaciones bancarias de 1914 a 1916, que habían alejado a los sectores empresariales nacionales y foráneos.

La banca estadounidense apoyó la política de resarcir a los europeos por los daños, siempre cuando se hiciera lo mismo con los norteamericanos. La necesidad de obtener el reconocimiento norteamericano conducto a Obregón a pensar que al apoyar dichas políticas se podría conseguir, de nueva cuenta, la credibilidad extranjera, y así obtener recursos económicos para financiar sus proyectos de reconstrucción nacional.

El Producto Interno Bruto PIB, creció a un ritmo casi imperceptible durante el gobierno de Obregón (0.6%) por ciento, pero coincidió con un ligero descenso en el crecimiento de la población, el aumento del PIB per cápita resultó ser de 1.2%.

en 1921 el 70% de la población económicamente activa estaba ocupada en el sector agropecuario. La población urbana, que en 1910 constituía el 11.7% , aumentó a 14.7% en 1921 y a 17.5%por ciento en 1930. El crecimiento de la ciudad fue particularmente notable: su población, que en 1910 representada el 3.1% del total, en 1930 constituya el 6.3%.

Plutarco Elías Calles nació en Guaymas, Sonora, en 1877, y murió en 1945 en la ciudad de México. maestro de primaria, fue comisaria de Agua Prieta. En 1912 combatió a los orosquistas en Nacozari.

En 1913 se levantó contra Victoriano Huerta bajo las órdenes de Obregón. En 1915, Carranza lo designó comandante militar y gobernador.

Plutarco Elías calles, llamado posteriormente “Jefe Máximo De La Revolución” por gobernar el país detrás de la silla presidencial, combatió al villismo, cerró el tribunal superior de justicia integrada por porfiristas, expulsó a los sacerdotes extranjeros, implantó la ley seca, decretó la validez del divorcio, estableció el salario mínimo, eliminó las exenciones de impuestos, abrió bibliotecas, creo una escuela normal y una para huérfanos, y obligó a terratenientes y empresarios a sostener centros de primera enseñanza.

La rebelión escobarista fue la última gran revuelta militar del periodo post revolucionario.

En 1927 reformó la constitución para que Obregón volviera a la presidencia. Con calles se inició la era institucional en la que él sería jefe máximo de la revolución. a esta época, caracterizada por la intervención del ex presidente en la vida institucional del país, se le llama el maximato.

Durante su administración, Calles promovió la construcción de numerosas carreteras, caminos y sistemas de riego, se fundaron el banco Nacional de Crédito Agrícola Y Ejidal, el Banco de México y la dirección General de Pensiones. Reorganizó al ejército, fomentó la enseñanza pública y el sindicalismo obrero. Terminó de construir la carretera México Puebla, México Acapulco, México Pachuca; se terminó el ferrocarril del Sudpacífico, se reorganizó el Servicio Postal; se establece la comunicación telefónica con estados unidos y Gran Bretaña y se promulgaron leyes sobre las comunicaciones.Comenzó el gravamen de los ingresos personales, los giros de Comercio, Industria, Agricultura y finanzas; se creó la Comisión Nacional Bancaria, se expidió la ley General de Instituciones de Crédito y se fundó el Banco de México, única institución autorizada para emitir moneda.

En sus dos últimos años de mandato, su política laicista generó fuertes protestas de los sectores populares. Mandó disminuir las actividades educativas del Iglesia Católica y reducir los aspectos más visibles del culto religioso. En agosto de 1926 estalló el denominado movimiento cristero, que se generalizó a partir de enero del año siguiente.

A llevar a cabo reformas religiosas, Calles provocó una gran oposición. La iglesia se negó a reconocer las condiciones de secularización y las relaciones entre la Iglesia y el Estado hasta que desembocaron en la llamada guerra cristera de 1926 a 1929. Muchos católicos se levantaron en armas con el grito de combate de los alzados que era “Viva Cristo Rey”, el conflicto terminó en junio de 1929, cuando el gobierno y la iglesia llegaron a un entendimiento.