Memoria Colectiva e Historia Nacional

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“Historia en migajas”: de la que hablaba François Dosse se ha apoderado del panorama historiográfico.

[…] La Historia se ha visto fragmentada por una multitud de temas que han requerido de una ampliación de fuentes documentales y de una constante transgresión de disciplinas. El pasado de la Nueva España no ha sido ajeno a estos cambios; muy al contrario, ha sido muy sensible a las novedades, convirtiéndose en campo de ensayo de metodologías venidas de otras ciencias sociales. […] (pp.18)

Historia de la historiografía: Compartida por docenas de historiadores de dentro y fuera de México, que han elaborado y publicado cientos de artículos, ponencias y monografías en varios idiomas y en numerosas editoriales y revistas, algunas de ellas especializadas en la historia [pic 1]mexicana e incluso novohispana […].(pp.19).

Historia política, historia económico social, cuantitivista y estructural:

“la historia ha ambicionado construir una historia global que aportase conocimientos para entender el presente y construir un futuro mejor. Los datos extraídos de los archivos, tratados con métodos de otras ciencias sociales, como los cuantitativos, han proporcionado numerosos conocimientos que han enriquecido de forma considerable nuestro conocimiento de la Nueva España.” (pp.19)

“La historia se ha vuelto vertiginosa, y lo más grave es que ha socavado creencia y modelos sin dar alternativas de interpretaciones globales que arrinconen a las antiguas”. (pp.20)

Los profesionales locales han visto llegar a cientos de historiadores extranjeros, han contribuido decisivamente a repensar el trabajo historiográfico. Otros, se limitan a elaborar sus artículos y libros en España, Francia, los Estados Unidos y otros países, esperando que algún día sus trabajos sean traducidos v leídos en México. Aquí nos topamos con otro problema fundamental de la historia actual: la comunicación de los conocimientos y el divorcio entre docencia e investigación. (pp.23)

Otra complicación que se denota comúnmente es la práctica del “historiador docente”, pues este se encuentra frecuentemente perdido, sin tener que asirse y la mayor parte de las veces se pasa repitiendo la información que se le exige en los programas, resultando un contenido muy largo, con información absoluta, llena de datos y fechas que no tienen significado alguno para los alumnos.

La historia difundida en los medios de comunicación es menos alentadora, Alfonso Mendiola y Guillermo Zermeño dicen que este tema es de gran importancia si se piensa en el porcentaje de lectores que hay en México, puesto que este es mínimo en comparación con los telespectadores. Los historiadores concluyeron que: la historia nacional que se difunde en los medios se hace a partir de "grandes personalidades": Benito Juárez, Porfirio Díaz, Francisco I. Madero, etcétera. Como si el país estuviera hecho por grandes hombres que han sacrificado su destino por él. Estos personajes se presentan como emblemas del destino nacional".(pp.24)

En conclusión se puede decir que las complicaciones que tiene la historia refiriéndose en general, es que tiene varias versiones en cuanto hechos históricos de un mismo lugar, como el que se menciona en la lectura y que hace gran énfasis “la Nueva España”, es una complicación dado que al tener diferentes versiones puede tener confusiones en el saber sobre los acontecimientos; otra que se puede mencionar es la versión de la historia hegemónica, pues esta es la que se da regularmente en las instituciones educativas y sólo es una parte o una versión de las historia, por otra parte se puede encontrar con información que ha sido manipulada y modificada, lo que propicia a tener diferentes ideas, además de solo enfocarse en los personajes que nos mencionan desde pequeños, sólo se conoce a unos cuantos haciéndolos “héroes”, mientras que se desconoce a otros personajes que pudieron haber colaborado en la historia y quienes son olvidados, cayendo en una desigualdad histórica. En el ámbito escolar se puede encontrar con aquellos docentes quienes no conocen bien la historia y solo abarcan ciertos puntos que les pueden incluir los libros de textos o el programa escolar, resultando una educación con conocimientos deficientes o nulos, ya que los alumnos solo memorizan fechas y acontecimientos para aprobar las materias sin conocer, analizar y razonar los hechos históricos de su localidad, estado o país.