Surgimiento de la Democracia.
Enviado por Stella • 20 de Marzo de 2018 • 2.573 Palabras (11 Páginas) • 332 Visitas
...
El pasado siempre es una construcción o una reinterpretación que tiene un futuro que forma parte importante y significativa de la historia, ya que una parte importante de documentos del pasado faltan por descubrir. Le Goff dice que él cree que la historia es la ciencia del pasado, con la condición de saber que este se convierte en objeto de la historia a través de una reconstrucción que se pone en cuestión continuamente. La relación entre pasado y presente en el discurso sobre la historia es en todo caso un aspecto esencial del problema tradicional de la objetividad humana.
Existen por lo menos dos historias; la historia de la memoria colectiva y la de los historiadores, además la historia debe ayudar aclarar la memoria y rectificar sus errores. También se habla de la diferencia en la objetividad e imparcialidad, en donde la imparcialidad es deliberada, en cambio la objetividad inconsciente.
Wolfgang J. Mommesen revelo tres elementos de la presión social que se realiza a las ideas y métodos que usa el historiador; 1) la imagen que de si tiene el grupo social del que el historiador es interprete o al que pertenece o con quien está comprometido. 2) su concepción de las causas del cambio social. 3) las perspectivas de cambio social por venir que el historiador considera probables o posibles y que orientan su interpretación histórica.
La contradicción más evidente de la historia es sin duda el hecho que su objeto es singular. Cada hecho histórico acaece solo una vez, y no volverá a producirse, esta singularidad constituye también para muchos su principal atractivo “amar lo que nunca se verá dos veces”.
La historia debe tratar objetos únicos. Las consecuencias de este conocimiento de la singularidad del hecho histórico pueden reducirse a tres; la primera esta constituida por la prioridad de los acontecimientos, en este se distingue cuatro tipos de inferencia que llevan de los documentos a los hechos, en función de la naturaleza de los documentos, que pueden ser; testimonios individuales, fuentes colectivas, indicadores directos, correlatos. La segunda consecuencia de limitar a la historia a la singularidad reside en privilegiar el rol de los individuos o los grandes hombres. La tercera consecuencia abusiva derivada de la función de lo particular en la historia consistió en reducirla a una narración, a un relato. Un relato ya sea histórico o no proviene de una serie de elecciones no explicitas. Para lograr explicar, los historiadores pueden elegir entre tres tipos de estrategia de explicación mediante argumento formal, donde encontramos el formalismo, el organicismo, el mecanismo y el contextualismo; Por enredo, encontramos la novela, la comedia, la tragedia y la sátira; y por implicación ideología, en donde puede ser el anarquismo, el conservadurismo, el radicalismo y el liberalismo.
El historiador debe crear su propio marco para evaluar los hechos de que se ocupa, debe hacer una reconstrucción imaginaria, por lo que no es real. Debe abstraer el conjunto de actitudes, valores, intenciones y convenciones que forman parte de nuestras acciones para captar su significado. Existe dos tipos de imaginación que puede ostentar el historiador; la que consiste en animar lo que está muerto en los documentos y forma parte del trabajo histórico, dado que muestra y explica las acciones humanas. Los historiadores deben trabajar con documentos con la misma imaginación de los matemáticos usan en sus cálculos o los físicos y químicos en sus experimentos. Huizinga dice que la historia no es solo una rama del saber, sino también “una forma intelectual de comprender el mundo”.
En la evolución historia encontramos dos principios susceptibles; por una parte, la de un sentido de la historia y por otra la de las leyes de la historia. Podemos encontrar aparte de la teoría histórica y de la filosofía de historia, la teología de la historia.
La mentalidad histórica: los hombres y el pasado.
Los historiadores tienen por una parte su bagaje profesional, su biblioteca e obras históricas, y por otra, el público y el auditorio de los historiadores. Algunos todavía confunden pasado e historia en la memoria colectiva. La historia de la historia debería preocuparse no solo de la producción histórica profesional, sino de todo un conjunto de fenómenos que constituyen la cultura o la mentalidad histórica de la cultura de una época. También hay que distinguir que el objeto de la historia de la historia es el sentido difuso del pasado que reconoce en las producciones de lo imaginario una de las principales expresiones de la realidad histórica, y principalmente su modo de reacción frente al pasado. Así como el pasado no es la historia, sino su objeto, la memoria no es la historia, sino al mismo tiempo unos de su objeto y un nivel elemental de elaboración histórica. Actualmente se sabe que el pasado depende parcialmente del presente. La historia es contemporánea solo cuando el pasado sea captado desde el presente y que responda a sus intereses. Así como la historia es duración, el pasado es al mismo tiempo pasado y presente. Los historiadores deben realizar un estudio objeto del pasado en su doble forma.
Existen tres grandes grupos de países que realizan historia de la misma forma; el mundo occidental, el mundo comunista, el Tercer mundo, ellos dependen de su fuerza y estrategias políticas internacionales, pero se desarrollan también en una perspectiva científica común, dialogo entre especialistas, entre hombres de oficio.
La cultura histórica no siempre depende de las relaciones memoria-historia o presente-pasado. La historia es una ciencia del tiempo. Se encuentra relacionada estrechamente con diferentes concepciones del tiempo que existen en una sociedad, y son el elemento esencial del aparato metal de sus historiadores.
La historia puede ser ya sea oral o escrita, el trascurso de lo oral a lo escrito es importante tanto para la memoria como para la historia, pero siempre hay que tomar en cuenta que la oralidad y escritura coexisten en general en la sociedad y que esta coexistencia es bastante importante para la historia, también que la historia, aunque conoció con la escritura una etapa decisiva, no nación con ella, dado que no hay sociedad sin historia. En la “sociedad sin historia” tenemos dos ejemplos por una parte está la sociedad histórica y por otra parte esta las sociedades “prehistóricas” o “primitivas”.
En el campo de la historia está la oposición entre la historia y el mito, al estudiar algunas sociedades históricas en su nacimiento algunos recurren al mito. El problema difícil se trata de los inicios de las sociedades primitivas, la mayoría de estas sociedades
...