Facultad de Psicología y Psicopedagogía Teorías Psicológicas

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sido inculcado en un individuo, tales como: movimientos, acciones, palabras, pensamientos, imágenes, ensueños, etc. Por lo tanto todo producto del acondicionamiento cultural para así poder educar los impulsos o tendencias subyacentes de tipo biológico.

Es importante destacar como la satisfacción y la seguridad aparecen en las relaciones con otro, como la hace también la ansiedad. Esta es la mayor destructora de las relaciones interpersonales.

La primera infancia desempeña un papel muy importante en el desarrollo de un sentimiento personal de seguridad. El niño siente de alguna forma, por empatía (este concepto es definido por el autor como la capacidad del niño de sentir de alguna forma la actitud de las personas hacia él y se vuelve más intenso a los 6 a los 24 meses, además Sullivan la interpreta como una especie de contagio o comunicación emocional, por consiguiente el infante responde a las emociones de sus padres o cualquier otro sustituto paterno, los cuales son adultos significativos en sus vidas. Estos adultos significativos le producen bienestar empalizado si tienen una actitud amistosa y lo aceptan, lo que se traduce que el niño desarrolle sentimientos de bienestar y de felicidad. Si tiene una actitud de rechazo, el niño desarrolla sentimientos de malestar e infelicidad.

Por consiguiente Sullivan casi llega a formular un enfoque dualístico de la psicología. La satisfacción es fundamentalmente somática, se trata de una función de las celular y de los tejidos de los músculos y de los órganos corporales, mientras que la seguridad es un fenómeno cultural.

La orientación de la tendencia hacia la seguridad es totalmente interpersonal y la ansiedad equivale al temor de suscitar desaprobación o mejor dicho es una consecuencia de la expectativa de un juicio desfavorable por parte de otros significativos.

Dicha expectativa puede surgir de experiencias reales, de la fantasía o de tensiones inconscientes que el individuo alberga, y que derivan de las primeras experiencias con otros significativos, principalmente los padres. La persona responde empáticamente al estado de ánimo de otra persona. Si el estado de ánimo es reprobador, lo experimenta como tensión. Procura conquista aprobación adaptándose a otros y reduciendo así la tensión.

Caracteriza la soledad como la más dolorosa de las experiencias humana; según el tenemos la necesidad de tocarnos y sentirnos físicamente en contacto con el prójimo.

El dinamismo del yo o sistema del yo.

El dinamismo del yo es una configuración relativamente duradera de energía que se manifiesta en procesos caracterizadles de las relaciones interpersonales, y corresponde a una combinación de yo y súper yo usando la terminología de Freud. Es principalmente inconsciente, se origina en las experiencias de la persona con la aprobación y la desaprobación de otros y que la inducen a comportarse de un modo que le permita evitar la inseguridad originada en la desaprobación. Por lo tanto, es la forma característica en la cual un individuo alivia sus tensiones internas, ya sea por satisfacer sus necesidades biológicas o las de seguridad.

El sistema del yo es un vasto sistema de procesos, estados de alerta, símbolos y señales de peligro a fin de proteger la sensación de bienestar que sentimos.

Según Sullivan la seguridad es la ausencia de la ansiedad. Es importante observar las relaciones interpersonales del niño en los primeros 18 meses de vida. Desde que nace, el lactante es incapaz de satisfacer sus necesidades. Antes de comprender ya capta por empatía los sentimientos de las personas que lo rodean especialmente los de la madre. El fracaso de ese vínculo genera soledad y aprensión. Así, la ira, la angustia, etc. de los demás son reflejadas por el niño. Más tarde se le enseña lo justo, lo injusto, lo bueno y lo malo. De esta manera las tendencias o impulsos biológicos se van coordinando socialmente. La aprobación por parte de los padres produce en el niño sentimientos de bienestar y seguridad mientras que las reprobaciones aparejan sentimientos opuestos. Cuando el medio cultural interfiere en la búsqueda de satisfacciones exigidas biológica e instintivamente, la persona experimenta la tercera de las sensaciones desagradables. Las dos primeras son el dolor y el temor.

El sistema del self se caracteriza por evitar o atenuar ansiedad. Proviene de experiencias interpersonales en evolución.

Se divide en 3 partes:

El yo bueno:

Es el conjunto de imágenes, experiencias y conductas que acompañan a la respuesta calma, amorosa y de aprobación-aceptación del entorno. Es todo lo que nos gusta sobre nosotros mismos y que los demás aprueban.

El yo malo:

Representa los aspectos de uno mismo que se consideran negativos y por lo tanto se ocultan de los otros e incluso de nosotros mismos. Es la desaprobación de uno mismo, de donde surge la tensión y la angustia.

El no yo:

Es constituido por situaciones que dan origen a una ansiedad tan intensa que se repudian y se desconocen. Con el tiempo el nexo empático pierde relevancia y el sistema self opera en forma autónoma.

Cuadro:

TEORIA

RELACIONES INTERPERSONALES

YO

DINAMISMO DEL PSIQUISMO

MEDIO

MEDIO SOCIAL

MODELO DE HOMBRE

PSICO-SOCIAL*

AUTOR: