Instituto Superior de Formación Docente Nº 45 "Julio Cortázar".

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Adolfo Sanchez Vazquez, la lógica cultural de este capitalismo tardío que niega el proyecto de emancipación de la modernidad, no para transcenderlo, sino para legitimar la realidad existente; el posmodernismo también niega la historia. La conciencia de esta condición posmoderna es necesaria para contribuir a que la “autodestrucción de la humanidad” no se convierta en una realidad. Sanchez afirma que no es posible renunciar a un proyecto de emancipación, más necesario ahora que nunca, y que ese proyecto de emancipación pasa por el socialismo.

Habermas, filosofo alemán, la posmodernidad se parecería demasiado a la premodernidad y seria la expresión del auge neoconservador que siguió a la crisis del estado de bienestar en los años ochenta, y que el concejo al desarrollo de un sistema económico casi autónomo que subordina al conjunto de la sociedad. El proyecto de la modernidad consistió en un esfuerzo por desarrollar una ciencia objetiva, una moralidad y leyes universales y un arte autónomo para el enriquecimiento de la vida social cotidiana. La ciencia y la técnica a la acción normativa de la ética y el derecho, y la acción estética del arte tienen cada una sus propios juegos de leguaje, pero el lenguaje, ordinario es el metalenguaje común a los lenguajes específicos.

6. A) EXPLICAR EL CONTEXTO DEL AUTOR

LYOTARD: “Esquela para un nuevo decorado” 1987 en la posmodernidad. Barcelona, 1987.

El pensamiento y la acción están dominados por la idea de la emancipación de la humanidad. El progreso de las ciencias, de las artes y de las libertades políticas liberara a toda la humanidad de la ignorancia, de la pobreza, de la incultura, del despotismo y no solo producirá hombres felices sino que, en especial gracias a la escuela, genera ciudadanos ilustrados, dueños de su propio destino.

LIPOVETZKY: “La era del vacío” 1986. Anagrama, Barcelona.

La sociedad posmoderna es aquella donde reina la indiferencia, en la que no se discute, donde lo nuevo se acoge como lo antiguo donde se banaliza la innovación, en la que el futuro no se asimila ya a un proceso ineluctable.

FUKUYAMA: ¿El fin de la historia? 1989

El liberalismo contendió primero con los restos del absolutismo, luego con el bolchevique y el fascismo y finalmente con un marxismo renovado que amenazaba con llevar al apocalipsis de la guerra nuclear. La democracia liberal occidental parece estar cerca de cerrar el círculo volviendo al lugar donde comenzó: no a un “fin de la ideología”, sino a una desembozada victoria del liberalismo económico y político.

ALAN FINKIELKRAUL: “La derrota del pensamiento” 1987. Anagrama, Barcelona.

Para el ignorante la libertad es imposible. –no se hacen individuos- En la lógica del consumo, por el contrario, la libertad y la cultura se definen por la satisfacción de las necesidades. La idea de hombre, para ser sujeto por completo, debe romper la inmediatez del instinto y de la tradición.

La escuela es moderna, los alumnos son posmodernos; ella tiene por objeto formar los espíritus, ellos se oponen atención flotante del joven Telespectador.

SANCHEZ VAZQUEZ: “Posmodernidad posmodernismo y socialismo” 1989 en Casa de las Américas, año 30, N° 175. La Habana.

Ya no se trata de la historia sin sujeto, postulada por el estructuralismo francés, sino que se trata pura y sencillamente de que no hay historia, de que si la ha habido ha llegado a su fin o de que estamos en la posthistoria. Se disuelve la historia como un proceso unitario dotado de cierta coherencia y racionalidad.

El pensamiento posmoderno se centra, en el presente, en un presente que se reproduce a sí mismo y en el que lo nuevo es lo mismo.

HABERMAS: “La modernidad, un proyecto incompleto” 1980

El proyecto de modernidad, consistió en sus esfuerzos para desarrollar una ciencia objetiva, una moralidad y leyes universales y un arte autónomo acorde con su lógica interna. Este proyecto pretendía liberar los potenciales cognoscitivos de cada uno de estos dominios de sus formas esotéricas – el proyecto de la modernidad todavía no se ha completado- este proyecto apunta a una nueva vinculación diferenciada de la cultura moderna con una praxis cotidiana que todavía depende de herencias vitales, pero que se empobrecería a través del mero tradicionalismo.

GUARIGLIA: “Teoría crítica y posmodernismo” 1992 La Nación, Bs As.

En este debate trata de la herencia de la iluminación y de su visión del mundo, hoy profundamente sacudida tanto en el campo científico como en el ético o el estético. Para América latina, cuyo proceso de emancipación política de constitución de sus nacionalidades estuvo regido por el proyecto de la ilustración, la quiebra definitiva de éste, si fuera cierta, habría que tener consecuencias decisivas.

B) SEMEJANZAS Y DIFERENCIAS:

Semejanzas:

Según Lipovetzky, la sociedad posmoderna es aquella en la reina la indiferencia de masa, donde predomina el sentimiento de reiteración y estancamiento, donde lo nuevo se acoge como lo antiguo, donde se banaliza la innovación, en la que el futuro no se asimila ya a un progreso ineluctable.

Según Vazquez, el pensamiento posmoderno se centra en el presente, en un presente que se reproduce a sí mismo y en el que lo nuevo es solo lo mismo. La sociedad posmoderna exalta al presente y genera una negación al futuro que, en verdad, es la conciliación con un presente.

Diferencias: