Todos los Miedos infantiles

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exceso; también su rendimiento físico que va disminuyendo por la falta de ganas de cuidar su propio persona; esto claramente va dañando diferentes ámbitos de su vida, generalmente su desarrollo social porque empieza a estar más irritable y más violento con los que lo rodean cuando sienta un mínimo de amenaza o simplemente sean sugestiones del mismo individuo; o también en circunstancias más comunes de su vida íntima podría tener alteraciones, por ejemplo de sueño interrumpido, insomnio, pesadillas, pérdida de apetito o incontinencia urinaria leve.

“Establecer la frontera entre miedo, ansiedad y fobia no siempre será fácil pues dependerá de factores como la edad, naturaleza del objeto o situación temida, frecuencia, intensidad, grado de incapacitación, etc.” (Bastida, s.a., s.p.). Al no poder delimitar la fuerza con que este sentimiento actúa, se tiende a avanzar en la escala de intensidad del miedo llegando a la fobia que tiene cuatro niveles de respuesta que son el cognitivo que es todo lo referido a pensamientos que hagan sentir miedo, el fisiológico que son manifestaciones internas del cuerpo cuando se tiene miedo, el motor que son las posibles cosas que pueda hacer físicamente frente a la misma situación para escapar de ella y el afectivo que son todos los otros sentimientos que abarca el miedo; estas cuatro son respuestas que están relacionadas entre sí y se activan en los momentos de mayor tensión para preparar el cuerpo para un posible enfrentamiento. En cualquier caso lo mejor es no prevenir el miedo, no evitarlo cuando ya está actuando porque puede generar peores problemas en la salud emocional y mental del niño que puede afectarle de forma prolongada en su vida; es diferente cuando se enfrenta la amenaza porque se aprende de esta experiencia.

Otro factor influyente para las reacciones de los niños frente a los miedos es el entorno en el que encuentran, lo que está fuera de su círculo familiar como lo es el poder que pueden tener los amigos por ser cercanos al niño, profesores, personas extrañas, o hasta el internet que es un medio bastante amplio. Muchas veces los niños son muy influenciables por sus amigos para hacer una cosa que les permita caer en gracia a todos y por lo general estas cosas se relacionan con el enfrentar el miedo y no precisamente de una forma adecuada, sino más bien de una forma rápida en la que no hay un método de por medio y que repercute negativamente en el desarrollo del niño; por otro lado está el papel de los adultos, en general, como los profesores, que conviven como sociedad con los infantes lo cual puede ser beneficioso o perjudicial para ellos, esto depende de cómo interactúan unos con otros, del trato que tienen entre sí, si el adulto tiene o no tiene los valores bien formados, de su sentido común frente a los niños, ya que de ahí viene la forma en como el niño acepta o rechaza tener una relación con el adulto según la confianza que éste le entregue en ese momento; puede pasar que hayan personas que atemoricen al niño por las intenciones que el mismo infante puede notar en algunos casos o bien que hayan personas que caigan en gracia y confianza del niño, por esto es importante que los padres sepan cual es el entorno social de sus hijos.

El factor del internet es uno de los más fuertes hoy en día ya que está disponible en todas partes, dentro y fuera de la casa, además es muy fácil de manipular por los pequeños del hogar que nacen viendo este tipo de tecnología, muchas veces sin una supervisión responsable de sus padres; este medio se puede ocupar de distintas formas y para distintos fines es por ello que es tan peligroso como favorable para algunos. En este caso se puede dar más en los niños gracias a su inocencia y la facilidad para engañarlos ya sea en el caso de personas que quieran aprovecharse de ellos como cuando aparecen pedófilos que se tratan de entrar en confianza con los niños sin ocasionar el miedo inminente que tarde o temprano los niños pueden detectar o por otro lado la misma facilidad que los infantes tienen para encontrar cosas en internet que le indiquen su gran curiosidad que muchas veces no son los contenidos más deseables por los padres como lo son las imágenes, juegos, videos o hasta historias que son atemorizantes y de gran índole terrorífica para el niño en las cuales puede aumentar su tensión muscular y el ritmo cardiaco preparándose para poder escabullirse de la situación.

En la vida exterior, en la calle podemos ver muchas veces accidentes automovilísticos en los que se pueden ver heridos, de persecución policiaca donde puede salir lastimada gente que no tiene relación alguna con el lío, cuando hay gente que se quita la vida y deja destrozados a sus familiares o terceros, perros callejeros que muerden a quien sea o que ladrones encapuchados asalten a personas inocentes; estas y muchas más situaciones peligrosas y de un alto grado de agresividad pueden quedar plasmados en las mentes infantiles que están propensas a que el miedo se implante en ellos y no los deje respirar o tengan la reacción inversa que los hace querer correr peligro por la adrenalina que eso les provoca como cuando por ejemplo desarrollan un gusto por ver carreras de autos en donde es muy probable que ocurran accidentes de este tipo. Es por esto que la sociedad en conjunto tiene la responsabilidad de cuidar las acciones que realizan día a día de forma responsable y crítica de que no están solos, que hay niños que los observan que pueden ser influenciados por ellos para bien o para mal, que todos deben ayudarse el uno al otro para ser mejores personas en comunidad con sus pares teniendo en cuenta que los niños son la futura generación.

El miedo le hace bien a todo ser humano pero en su justa dosis para no generar una situación de alto impacto de malestar físico, mental o psicológico; a medida que el infante va adquiriendo una experiencia reiterativa de los diferentes miedos con el apoyo necesario de padres, buenos amigos, su entorno y su comunidad estudiantil responsable que van guiando este proceso de vida hasta que ya tienen una madurez formada y trabajada, tienen un mejor futuro por delante como personas valientes ante los nuevos desafíos, en tanto para ser capaces de enfrentar los problemas que se interpongan en sus caminos como profesionales o padres de familia.

Con valor, ayuda y un buen guía se puede enseñar la alegría de aprender a vivir los miedos sin peros y con amor por una comunidad