¿Cómo hacer la fachada de la facultad de ingeniería civil de la universidad la gran Colombia ambientalmente sostenible?

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Con el fin de mitigar la amenaza que ha venido sufriendo el medio ambiente en los últimos tiempos se han realizado investigaciones las cuales van enfocadas a buscar soluciones y alternativas a los materiales de construcción convencionales y así poder implantar recursos los cuales hagan de nuestras obras proyectos ambientalmente sostenibles.

Rivas Marín concluye dice “Las Universidades deben elaborar un plan para disminuir el impacto generado en el medio ambiente por su creciente población y los procesos que allí se desarrollan.”

Dice Chiara Monterotti en su tesis de Doctorado de la universidad Politécnica de Catalunya bajo el nombre de Análisis y propuesta sobre la contribución de las herramientas de evaluación de la sostenibilidad de los edificios a su eficiencia ambiental “En este panorama, se reconoce que las herramientas para la evaluación de la sostenibilidad ambiental de los edificios pueden y deben tener un rol importante, como apoyo para aumentar la eficiencia del empleo de recursos en la edificación y consecuentemente para fomentar una reducción de sus impactos y dirigir los actores de la construcción hace la aplicación de nuevos modelos técnicos más en armonía con la Biosfera”.[2] La implementación de nuevas técnicas es de vital importancia ya que con esto lograremos contribuir y mejorar el impacto el cual, tiene las edificaciones al medio ambiente, dicho impacto afecta directamente a la calidad de vida de nosotros como habitantes.

En el impacto ambiental se debe analizar el ciclo de vida de una edificación para así, describir el impacto que tiene esta sobre el ecosistema, determinando los materiales y el proceso constructivo Al respecto, se cita la tesis titulada: Análisis de indicadores basados en nuevas estrategias para el desarrollo sostenible:

“Los métodos de evaluación ambiental se estructuran en tres grandes grupos: Aquellos basados en la valoración de actuaciones, establecidas en créditos a los que se asocia un número de puntos en función de la importancia en los impactos asociados al crédito. En este grupo se encuentran los modelos LEED, (USGBC) y BREEAM (BRE-GB)”[3]

Estos métodos de evaluación de diferentes aspectos , tanto en la parte de construcción como en la de sostenibilidad dando diferentes puntuaciones a las edificaciones según el método constructivo y la implementación de medidas para disminuir el impacto ambiental, teniendo en cuenta que la fachada es una parte fundamental de las edificaciones, a través de la cual tienen lugar los intercambios de energía más importantes de un edificio y del que dependen fundamentalmente las condiciones del habitad.

Con el fin de optimizar los sistemas y las dimensiones de las estructuras, la climatización, la iluminación natural y artificial, con las ventajas de ahorro económico, energético y mejora de confort, sin perder el concepto general del edificio.

Los materiales utilizados deben ser de regionales, reciclados, rápidamente renovables y/o certificados con algún sello verde además, debe proporcionar el control de contaminantes al ambiente y correctos niveles de iluminación para los usuarios.

Según Xavier Ferrés Padró en su tesis Fachadas ligeras, el proceso hacia el límite. Del concepto y el detalle técnico hasta la obra construida “Las fachadas de los edificios deben de realizar una gran variedad de funciones, desde caracterizarlo hasta relacionarlo con su entorno y sus usuarios. Tienen que funcionar como una membrana compleja, lo que es clave para la adopción de los sistemas y materiales de construcción ligera.”[4]

El diseño propuesto, si se adopta adecuadamente, puede también implicar nuevos planteamientos a la industria de la fachada, a desarrollar por departamentos de investigación, de manera que los avances fruto de la reflexión que tienen lugar en cada una de las fases, se pueden aplicar individualmente o en su conjunto, para tender hacia propuestas tecnológicamente avanzadas.

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MARCO TEORICO

Los conceptos de construcción sostenible y en particular de vivienda sostenible, desde hace poco tiempo se vienen incorporando a los procesos constructivos en nuestro país, los procesos constructivos se tienen que cambiar en pro del medio ambiente con el propósito de mejorar la calidad de vida de los habitantes y el desarrollo urbanístico.

“El subsistema socioeconómico interactúa con el ecosistema global y desde luego, son muchos los factores sociales, culturales o políticos que influyen en la relación economía-hombre-naturaleza. Hasta ahora, existe una escasa comprensión de la dinámica interactiva entre las principales fuerzas motrices de orden social y el medio ambiente global, tales como la población, tecnología, crecimiento económico, instituciones, valores, pobreza y fenómenos locales que adquieren con rapidez la suficiente “masa crítica” para provocar profundas metamorfosis a escala global.”[5]

Se tienen que evaluar las formas, la eficiencia, el factor económico y la condición social para llevar a cabo un proyecto que tenga relevancia, y que impacte de forma positiva el medio ambiente, siendo así un punto de referencia para Bogotá. Siendo el sector constructivo uno de los factores que son de mayor impacto en su hábitat y en la economía trayendo como consecuencia algunos de los principales problemas del crecimiento urbano son la escasez de espacios verdes y el aumento de la temperatura y, en consecuencia, la reducción de la calidad medioambiental de las ciudades.

“Esta problemática es evidente en los centros urbanos, que alojan al 47% de la población mundial, con un estimativo de crecimiento del 2% anual (periodo 2000-2015)”[6]. Allí se concentran las actividades industriales y comerciales, y reside una población que demanda, de manera acelerada, bienes y servicios para atender sus igualmente crecientes necesidades, lo cual genera a su vez residuos de todo tipo

Ante todo generando el desarrollo urbanístico de la mano del ambiente “el concepto de desarrollo debe incluir todos los aspectos de la vida humana y social, y no estar limitado al crecimiento económico”[7] el desarrollo no debe estar ligado a satisfacer las necesidades básicas sino en hacer una contribución de un mundo mejor, protegiendo y mejorando el medio ambiente haciendo un mejor uso de los recursos que proporciona la tierra.

Los avances tecnológicos y la especialización industrial han acelerado el proceso de construcción, pero ya es posible hacer más eficiente la operación de las edificaciones. La eficiencia tecnológica compromete el bienestar ambiental debido a que los