Monografía sobre Karl Barth

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" 8 Felipe le dijo: Señor, muéstranos el Padre, y nos basta. 9 Jesús le dijo: ¿Tanto tiempo hace que estoy con vosotros, y no me has conocido, Felipe? El que me ha visto a mí, ha visto al Padre; ¿cómo, pues, dices tú: Muéstranos el Padre?" Juan 14:8-9

Cuando leí por primera vez la perspectiva de Juan 14 que se expande, me encontré con una nueva perspectiva de lo que es la revelación, así asegura lo que es la revelación el teólogo suizo Prof. Ricardo Gouveia Pictures, de la siguiente manera:

"Dios que se revela a los hombres, no sólo algo divino, no es algo semejante a Dios, no es algo que viene de Dios, no es algo acerca de Dios, sino Dios mismo es el contenido de la revelación"[5]

Entendí que el cristianismo es superior a cualquier otra forma de creencia, no porque piensen diferente de ella, pero debido a que no tenía instrumentos (además de mi propia fe) para apoyar el por qué del tema. El cristianismo tiene el privilegio de la revelación, más que cualquier otra religión, o intento de encontrar o cómo conocer a Dios por medios naturales. Y sin duda podemos decir que Debido a que en la Biblia y la encarnación de Cristo, Dios se revela a los hombres, su forma (santo, puro, misericordioso, que está lleno de gracia), su carácter, Dios mismo es el que es compasivo y es el principal socio de la alianza con Cristo, el salvador de los hombres es el que nos lleva de la mano, que sabe lo que sentimos, que debido a que él experimentó la humanidad (pero sin pecado, Hebreos 2:17-18; 4:15), y su humanidad, es decir, comprensible con nosotros, no como algo místico e imposible, sino como algo humano, como el pan y el agua de vida, entonces podemos conocerlo. El mediador es Dios.

"La única verdadera deidad nos revela plenamente en Cristo Jesús, así como la verdadera humanidad que también se revela en Cristo Jesús!. Jesús ganó la plenitud de lo que significa: "Dios al mundo, Dios a la humanidad, el cielo a la tierra" [6]

"La revelación es la auto-manifestación de Dios, Él se da a conocerse a sí mismo. Revelación presenta al hombre, como presunto, y se confirmó el hecho de que los intentos humanos de conocer a Dios por sus propios medios son vanos. En la revelación que Dios da al hombre que es Dios y que, como tal, Señor del hombre. Con esta revelación le dice al hombre algo completamente nuevo. Algo que sin la revelación, no puede saber ni decir a los demás nada sobre Él. Que el hombre puede conocer a Dios, sólo se puede decir con la verdad de la revelación ".[7]

Karl Barth fue un defensor de la dogmática, después de haber escrito su obra más voluminosa con este nombre "dogmática eclesiástica", que quedó sin terminar. Dogmática - significa una dedicación al estudio de las doctrinas o dogmas de la iglesia, antes de la construcción de sistemas especulativos o de propiedad. Barth entiende la fe como un salto, una razón superior, que tiene su origen en la revelación, un legado de la influencia de Kierkegaard.

Fe significa a saber, experimentar, ser objeto de la auto-revelación de Dios. La fe es también una decisión.

"Creer significa esto: reconocer el propio pecado, abandonándose a la infinita y benevolente justicia de Dios ejercida sobre el pecado. Concretamente, para creer debemos reconocer que estamos en contra de la gracia que se aferra a ella, que ella se opone a nuestra oposición y a la resistencia al poder infinito. Este reconocimiento de la gracia, reconociendo que justifica al impío, que también es gratis para el enemigo de la gracia, es donde la fe cristiana reconoce la verdad de la religión cristiana".[8]

" Se descubre y se conoce a Dios cuando Él se da a conocer a sí mismo, dentro de toda su libertad" [9]

SÍ y NO - Un pequeño punto de su teología expuesta es el aspecto del Sí y no - yo creo en la necesidad de una gran explicación que este aspecto demanda, pero voy a tratar de resumir.

Para Barth Dios dice sí al hombre, al decidir crear la humanidad, al decidir ser él mismo el objeto, el Hijo, y la garantía de la alianza entre el Espíritu de Dios y el hombre, mientras que al mismo tiempo, rechazó la humanidad caída, y prueba de ello es el sufrimiento y la maldición a la que Cristo se sometió en la redención de la humanidad. (Isaías 53; II Cor 5,19-20; Gal 3:13).

De otro modo, también podemos considerar que Dios dice que sí a todo alianza en la fe, la santidad, el amor, la gracia y la paz, y rechaza todo lo que está fuera de él, todo lo que no está conectado a Cristo, Dios dice no a la incredulidad, el mal, la muerte y el pecado, la justicia propia, la soberbia, la insubordinación, rebelión, dice no al pecador (es decir, a su estado), que necesita para asimilar su rechazo a Dios, reconociendo su condición deplorable, no su poder, su impotencia general y su rebelión y su aceptación no es así, entonces es posible, por la acción de la gracia gratuita de Dios, recibir el sí de Dios.

"No podemos reconocer nuestra elección en Jesucristo sin reconocer, ante todo, nuestro rechazo y esto de nuevo es en Él."[10]

Acerca de lo que es malo, desde la perspectiva de sí y no, "se está cayendo en la nada. ¿Podría ser diferente? Si me acerco a este tema, es sólo para mostrar que esta vasta área que llamamos el mal, la muerte, el pecado, el diablo y el infierno, no es creación de Dios, sino más bien, es lo que se excluye por la creación, es a lo que Dios dice que no".[11]

La elección muestra la libertad de Dios y la gracia de Dios que es gratuita. Elegido de Dios y Señor del hombre. En sus libros podemos encontrar frases que caracterizan este bien, acerca de Dios: "El que ama en libertad", o acerca de la gracia: “Se trata de la libre gracia de Dios escoge”

PALABRA/BIBLIA: Para Barth la palabra Logos tiene un significado real, y se refiere a una de estas tres cosas (dependiendo del contexto) o todos todo al mismo tiempo, es decir, Jesucristo, las Escrituras y la predicación del Evangelio.

"No es correcto el pensamiento humano acerca de Dios que forma a través del contenido de la Biblia, pero si es correcto el pensamiento divino acerca de los hombres. La Biblia no nos dice cómo debemos hablar con Dios, sino lo que nos dice; como encontrar el camino para él; pero a medida que ha visto y encontrado la manera de llegar a nosotros; no la relación correcta en el que debemos situarnos en relación con él, pero el pacto que hizo con todos los que son hijos espirituales de Abraham y sellada una vez por