Persona y trascendencia
Enviado por Kate • 25 de Febrero de 2018 • 1.978 Palabras (8 Páginas) • 441 Visitas
...
C.S Lewis nos dice que: “la moral, pues, parece ocuparse de tres cosas. La primera, de la justicia y la armonía entre los individuos. La segunda, de lo que podríamos llamar ordenar o armonizar lo que acontece en el interior de cada individuo. Y la tercera, del fin general de la vida humana como un todo: aquello para lo que el hombre ha sido creado; el rumbo que debería seguir toda la flota” (Pg.32).
En el libro se mencionan las virtudes cardinales que son: “prudencia, templanza, justicia y fortaleza” (Pg. 34).
EL proceso de convertirnos en una sociedad cristiana que tenga valores morales y los respete, está muy lejos de convertirse en una realidad, ser cristiano desde mi punto de vista va más allá de decirlo e ir a la iglesia y cultos de manera regular, más bien es tener esa comunión con el ser supremo y ayudar al prójimo sin esperar nada a cambio.
A lo largo de este libro, se tocan distintos aspectos del comportamiento cristiano, como son el matrimonio, la moral cristiana, el perdón, etc. A mí me pareció más interesante la parte que habla de la fe, porque lo relaciono con lo que hemos visto en clase, el libro nos habla de que la fe tiene batallas contra la imaginación y las emociones principalmente, una persona elige creer en algo y deposita su fe en ello, pero no por esa razón no va a cambiar de parecer en cuanto su fe sea probada y dude de lo que creía, su mente y su imaginación pueden influir en que cambie sus creencias y deposite su fe en otras cosas. Una definición de fe que me gusta mucho y que me parece bastante acertada respecto a lo que es la fe, es lo que dice el libro de Hebreos capítulo once y versículo 1: “Es, pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve.”
LIBRO IV[pic 13]
MÁS ALLÁ DE LA PERSONALIDAD: O PRIMEROS PASOS EN LA DOCTRINA DE LA TRINIDAD
[pic 14]
Hablar de trinidad suele ser conflictivo en las religiones cristianas, porque hay quienes se dicen cristianos pero no creen en la existencia de la trinidad, es motivo de discusión y discrepancia, yo creo que es real, que hay un Dios padre, un hijo, que es el que vino a vivir la vida terrenal y un espíritu santo, y sobre todo este último que es el que mueve a la realización de buenas acciones en el diario vivir.
Es interesante la analogía de que somos órganos de un mismo cuerpo que es la iglesia, y que como un cuerpo, necesita de sus numerosas partes para poder funcionar, cada ser humano es vital para el buen funcionamiento. Si un cristiano que asiste a una iglesia se enferma espiritualmente, se notará en la iglesia, si por ejemplo esta persona era la encargada de organizar los cumpleaños, se notará su ausencia y la iglesia se enfermará en consecuencia si esto sucede con muchos miembros.
Cuando Dios transforma nuestras vidas, como dice la biblia, nos volvemos en nuevas criaturas, las cosas viejas mueren y todo es hecho nuevo en nosotros, creo que todos tenemos la oportunidad de redimirnos de nuestros pecados, de cambiar, aunque como dice Lewis, el camino cristiano no es nada fácil, Dios exige de nosotros una entrega total y no todos pueden con eso, es por ello que existe mucha deserción por parte de los miembros en las iglesias, al no estar bien cimentada la fe.
No podemos comenzar a ser nuevas personas transformadas si no lo hacemos tomados de la mano de Dios, no nos podremos encontrar a nosotros mismos sino lo encontramos a él primero, me parece que esta es la principal reflexión con la que me quedo, uno necesita de ese ser supremo para ser transformado, ya que como seres finitos, no tenemos oportunidad de cambiar sólo por nuestra voluntad.
[pic 15]
Conclusiones
[pic 16]
Lo que más me gustó del libro es que aborda el cristianismo desde distintas perspectivas, pero sin meter una religión específica para ello. Me gusta que el autor no hable de su propia religión, sino que tome el tema de manera general para ilustrarnos un mero cristianismo sin tapujos y claro.
Creo que una de las cosas más difíciles es tener esa entrega con Dios, llegar al punto de conocerlo y ser consciente de que fue él el que nos dio una conciencia moral desde nuestra misma concepción y eso nos ayuda a distinguir las cosas buenas de las malas. Tener tal encuentro con él, que pueda realmente cambiar nuestras vidas, transformarnos en criaturas nuevas.
Cuando nuestra fe está bien cimentada, puede romper todas las barreras y no importa de qué corrientes religiosas escuchemos hablar, siempre tendremos argumentos para defender nuestra fe, en lo que hemos creído.
Me gusta la metáfora de que la iglesia es un cuerpo y nosotros cada uno de los órganos que la conforman, todos representamos una parte importante de ese cuerpo y sin nosotros no puede funcionar bien, esto me hace pensar en que Dios nos creó con un plan y propósito para la vida.
Nos damos cuenta de que una persona está transformada por Dios cuando sus acciones hablan por ella, y no realiza estas cosas por una convención social, sino porque siente el deseo de ayudar a los demás no buscando los aplausos del mundo, sino agradar a Dios.
El libro en general me ha parecido interesante y lo recomendaría para aquellos que no tienen muy claro el concepto de cristianismo, me ayudó a recordar algunos conceptos que vimos en clase como la fe, la religión y un poco la parte de la ley moral.
Bibliografía:
Staples, L. C. (1952). Mero Cristianismo.
...