Capitulo 1 “El oficio de un abogado litigante.”

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al abogado litigante en su caso. Generalmente el comportamiento, el tono de la voz y, principalmente, el orden de presentación deben tener como objetivo central que los jurados se concentren en lo que el abogado está señalando.

j) Capítulo 10: como llamar a un testigo.

Independientemente de que el interrogatorio de los testigos sea o no escrito según lo disponga la ley, a éstos se les examinar con preguntas que formule quién los presenta y con repreguntas que les hace la otra parte. Es importante señalar que antes de llamar a una persona presentar su testimonio verbal en un juicio, se le tiene que preparar.

Es fundamental que el testigo entienda cuáles serán los puntos que van a litigarse, y cómo se relacionan con el testimonio que estos presentarán ante la autoridad y qué es lo que se espera que este demuestre. Es muy importante que el testigo sepa que durante el testimonio, el abogado litigante no podrá generar ningún tipo de pregunta dirigida, o sea, una que esté formulada de tal manera que sugiera o bien de a entender la respuesta deseada.

k) Capítulo 11: Introducción al interrogatorio.

El interrogatorio es la parte, que si bien es cierto, se entiende como el ataque frontal que asegura (o por lo menos así debería ser) el triunfo de la verdad y de la justicia. Por ello se considera que un buen interrogatorio incluye una lista larga de elementos a perfeccionar con el tiempo. Los principales son los siguientes 4:

-Control

-Un interrogador tiene que controlar a su testigo muy de cerca.

-Velocidad

-Un testigo que diga menos de la verdad absoluta necesita tiempo para meditar sus respuestas y darles forma, un tiempo que no hay que permitirle.

-Memoria

-El interrogador debe tener la cabeza llena de una multitud de datos y de información, obtenidos de cualquier declaración previa que haya hecho el testigo, el testimonio que otros testigos relacionados andado y van a dar, así como todos los documentos relativos y otros tipos de evidencia.

-Sintaxis

- La manera en la cual un interrogador trata a un testigo tiene que ser adecuada las circunstancias.

-Actitud

-Las preguntas que tiene que formularse con rapidez pero con precaución.

-Lógica

-Momento oportuno

-Se necesita saber aprovechar las oportunidades que se presenten durante el interrogatorio.

l) Capitulo 12: El alegante ante el juez o jurado.

Por lo regular el cierre del alegato se reduce a una refutación de argumentos del abogado defensor y, si éste desiste de la acción, no hay existirá absolutamente nada que refutar y el procedimiento se dará por concluido.

Una dosis adecuada de emoción servida bien al alegato.

m) Capítulo 13: Acerca de las apelaciones.

En el supuesto de que alguna de las partes apele el veredicto emitido por un tribunal, esta parte será la encargada de presentar un aviso de apelación en el mismo tribunal que la emitió. Entonces a la parte que apela se le llamará a presentar un informe, describiendo el caso, las cuestiones de ley, los hechos y, los argumentos en apoyo del desagravio (compensación del perjuicio ocasionado a una persona) que se pretende, generalmente, un cambio o anulación de la sentencia o una orden que exija un nuevo juicio. Cuando los litigantes han presentado todos los informes, el tribunal será el encargado de fijar una fecha en la que se realice él alegato oral.

n) Capítulo 14: Estudios en la facultad.

El derecho es un totalmente un lenguaje nuevo y generalmente desconocido. Por ello el abogado litigante, tiene que aprenderlo, pero si desea especializarse en litigios, entonces, no se debe esclavizar por este. Sin duda alguna, el abogado litigante debe aprender y manejar la terminología correcta.

Por ello los abogados litigantes deben ser expertos en las teorías y en la doctrina, una de las habilidades esenciales para un razonamiento jurídico.

ñ) capitulo 15: después de graduarse: los primeros años-

El capitulo 15 concluye en que cuando se busca empleo en el despacho de alguno de los abogados que se especializan en litigios, es un paso importante. Ya que estos litigantes profesionales pueden dividirse en distintos, diversos y varios grupos, según la función que desempeñan los tribunales o la especialidad con la que cuenten.