Dialogo de maria de todos los angeles

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Ariadna: Albertano di algo, diles que tu desde hace días atrás me andabas pretendiendo y hasta me invitaste a pasear a el Lago de Xochimilco

María: No te sientas la muy muy Ariadna porque a mí me invito a una cena romántica aquí a los tacos de la esquina y ahí fue donde me pidió que fuera su novia

Ariadna: Pues a mí no me ha pedido todavía ser su novia pero si ha sido mucho más romántico conmigo que contigo

Doña Lucha: Haber ya déjense de pelear por mi muchacho que ninguna de los dos me gusta para pareja de el

Albertano: Jefa ya te dije que no intervengas en mi relación

Ariadna: Albertano mejor ya déjate de cosas y dinos a cual de nosotras dos es la que en verdad quieres para novia

Albertano: Pues ahora si ya les voy a decir la verdad verdadera y esa verdad es que a la única que quiero es a María

Ariadna: ¿Pero cómo puedes decir eso? Y todo lo que me dijiste? ¿Y todo lo que me prometiste?

Albertano: Ya sé que hice mal pero lo tuyo conmigo fue antes de animarte a decirle a María lo que sentía por ella. Ya sé que la regué, debí decirte de mi relación con María

Ariadna: No te preocupes, yo te entiendo, sé que estas siendo bien sincero con nosotras dos y sé que quieres de verdad a María

Albertano: Gracias por entenderlo… ¿Y tú María? ¿Me perdonas?

María: Pues ya viendo las cosas de esta manera, está bien, si te perdono, solo si te pido que ya no me vuelvas a ocultar nada

Albertano: Te lo prometo María y ahora si… Jefa, María, le presento a mi novia “María”

Doña Lucha: Pues no eres la mujer que yo quisiera para mi hijo

Rosaura: Ni la mujer que yo quisiera para mi hermano

Doña Lucha: Pero si él es feliz contigo pues ya que más le hacemos

(Entra Doña Lucha y Rosa Aurora a la casa, Ariadna se va y María y Albertano se abrazan)