El adulto y su aprendizaje

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Por su parte, Beltran, (1990), al hablarnos del modelo de comparación social, indica que la motivación se desarrolla básicamente a través de los procesos interpersonales dentro de la situación de aprendizaje, la motivación a aprender es esencialmente interpersonal, creada por relaciones internalizadas anteriores y por influencias interpersonales actuales.

Alonso, (1995) nos indica que los alumnos están motivados o no en función del significado que para ellos adquiere el trabajo que van a realizar. Este significado es percibido en un contexto y relacionado con unos objetivos.

En este punto es que se produce la motivación que permite afirmar que el adulto aprende cuando lo desea y siente necesidad de hacerlo. Para conseguir una respuesta positiva, no basta explicar bien la materia y exigirles que aprendan. Es necesario despertar su atención, crear en ellos un genuino interés por el estudio, estimular su deseo de conseguir los resultados previstos y cultivar el gusto por los trabajos.

Indicar que el aumento de satisfacción personal en el aprendizaje incrementa la motivación (Núñez, Solano, González y Rosario, 2006), Según los resultados, se puede concluir que a las personas mayores les satisface aprender, por lo que esta respuesta impulsará el deseo de seguir aprendiendo. Las personas mayores son capaces de adquirir nuevos conocimientos y aprender de todo lo que les rodea. Más allá de los resultados y el rendimiento académico, el aprendizaje en la edad adulta permite que el individuo evolucione y se vayan cumpliendo las tareas exigibles para un completo desarrollo humano. Dedicar esfuerzos para motivar hacia el aprendizaje en esta etapa vital no es inútil y el mero hecho de tratarse de mayores no tiene por qué hacer fracasar cualquier intento educativo de estas personas.

Knoles, 2005); afirmaba que mientras que la corriente científica, busca acumular conocimientos por medio de investigaciones rigurosas y con frecuencia experimentales no se trataba del proceso de aprendizaje adulto, si no la capacidad que este posee para aprender.

Como se mencionó en un primer momento no es sencillo para el facilitador tomar en cuenta todos los factores que influyen en la enseñanza de los adultos, como el temor con el que llegan al proceso, pues están conscientes de sus limitaciones y no quieren fallar, probablemente ya ni recuerdan como estudiar, por lo cual el maestro deberá generar un clima de confianza y optimismo que permita detectar cuáles son los principales temores y atacarlos indirectamente.

En mi criterio el adulto busca aprendizajes intrínsecos útiles, bien sea para el hogar para su empleo, superación personal o proyección de vida, para ellos el tiempo es un factor muy valioso por lo cual los métodos pedagógicos junto a la motivación constante es de influencia importante, los deseos de superación siempre estarán presentes para lograr el avance hacia lo que consideramos principal en nuestras vidas si importar lo complicado que sea de alcanzar siempre se encontrara el método más viable para el camino no importa cuántas veces fracasemos, hay más valor en las veces que se levantan y continúan en la búsqueda de lo que eleva nuestras aspiraciones y conocimientos para aprender cada día mas no es un deber ni una obligación es una necesidad que se siente de alcanzar más de lo que se tiene por eso es que no hay que ver lo difícil de alcanzar la meta, sino los beneficios que nos provea esto implica un constante esfuerzo personal

Lo más importante es que no se pierda la esencia del verdadero sentido del término de la educación que debe caracterizar el proceso integral del crecimiento humano que va enfocado hacia el futuro como una relación compartida de actitudes, responsabilidades y compromisos hacia logros y resultados exitosos.