Actividad integradora (Etapa 1 literatura).

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-Hola Bertha, ¿Cómo estás?

- Elena, Alfredo está muy grave se lo llevaron esta mañana al hospital, quice avisarte para que tus hijos fueran a visitarlos-

- ha, sí, claro Bertha yo los mando

-Excelente pero no hoy, hoy iremos Alberto y yo.

-Ok- Respondí ligeramente- Y es que mi hijo Alejandro no podía ver ni en pintura a Alberto.

Al día siguiente fuimos mis hijos y yo

-doctor, ¿Cómo esta mi papa? –pregunto Amelia

-nada bien, le encontramos un cáncer en la próstata, y el tratamiento es de gastos elevados-dijo el doctor. Mis hijos pusieron caras tristes

-¿podemos pasar a verlo?-dijo Alejandro

-claro adelante

Al entrar, vaya sorpresa la nuestra, Bertha y su hijo Alberto estaban ahí dentro, Alejandro se puso de mil colores.

-¿QUE HACEN AQUÍ? –dijo molesto

-Es mi papa- respondió Alberto

Voltee a mirar a Bertha quien sonreía malvada mente

-me dijiste que viniéramos hoy, ¿fue para esto?- pregunte molesta

-Ayer no pudimos y decidimos venir hoy – respondió

Los gritos se oían por todos lados, y nos sacaron de ahí , al pasar los meses Alfredo trataba de ser fuerte con el tratamiento, pero era inútil era muy fuerte, ya era un viejo de 45 años quien no toleraba tanto el medicamento, canoso, y piel arrugada el cáncer lo hizo envejecer mucho, el decía estar arrepentido, ¿Pero, como creértele? Tantos años pasaron…

Alfredo no podía mas con esta situación y cada vez que lo íbamos a visitar, era comenzar un pleito con Bertha y Alberto, el siempre lloraba diciendo y clamando, que fuéramos sensatos…-me estoy casi muriendo y ustedes solo se pelan- decía Alfredo con voz desgastada. Amelia corrió a sus brazos.

-claro que si papa, no te demores mas, tranquilo. Esa tarde se puso muy mal y nuevamente fue a dar al hospital

Alfredo mando llamarlos pidiendo perdón, que él estaba arrepentido, y que se había perdido los mejores años con nosotros, su primer familia. El ya lucia muy mal muy enfermo.

-Ahora entiendo eso que dicen: Actúa mal y mal terminaras, véanme como estoy acabado casi muriendo por haberlos hecho sufrir antes- Amelia lo abrazo y le dijo

-No papa tú no te preocupes, ya paso.

-Los amo- dijo Alfredo y murió. Entro el doctor diciendo

-salgan salgan de aquí. Alejandro y Amelia, llorando desconsolados.

Cuando Bertha entra con Alberto, culpándonos a nosotros por su muerte, Al final se resigno y se fue.

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