“Arte bello es aquel en el que la mano, la cabeza y el corazón marchan juntos.”

...

La lámpara de la Vida. Una importante consideración se hace en ésta lámpara, ya que expone que sin una no sería la otra, es decir que todo debe fungir como un conjunto, uno mismo. Incluso expone a una arquitectura por así decirlo sana y a una enferma e incluso muerta, y desmenuza los síntomas en los que se encuentran la franqueza y la audacia; y con esto se refiere a que deben de cuidarse los detalles para que no se separen uno del otro, para que el conjunto funcione al unísono. Que tanto la proporción, la ornamentación, las fachadas, la decoración deben de trabajar a la par. Pero sin eliminar, ni dejar de lado la importancia que tiene el hombre como trabajador en la obra, ya que sin duda, el único aspecto realmente vivo que tendrá un edificio al momento de ser construido, serán las manos y corazones de los trabajadores, miembros responsables de la pasión impresa en la edificación.

La arquitectura tiene el poder de transmitir por un lado la cultura de un pueblo, su desarrollo, el ir y venir del tiempo, como por otro revivir momentos de guerra, percibir momentos clave en la supervivencia de ciertos pueblos. Ruskin en su penúltima lámpara titulada de la memoria; revive y muestra la importancia de la arquitectura. Con ésta última lámpara los edificios tienen un nuevo valor, que es la perfección. Y una nueva característica que es la atemporalidad, la bendición de tener una herencia milenaria.

Por último pero no con esto menos importante se tiene a la lámpara de la obediencia. Se sabe que Ruskin fue criado con una educación meramente puritana, por lo tanto ésta última parte trata sobre el respeto a los edificios que ya fueron creados por otros, es decir esa parte ética de no romper con lo que la persona que diseñó en un principio quería decir con su creación. De la misma forma el respeto e integridad del entorno. Ruskin menciona que si se tienen un código de leyes buenas no importando su origen, su antigüedad, ni su clase; éstas deberían respetarse en todos lados. Incluso menciona:

“Si es imposible, el arte inglés también lo es. Renuncie a ello de inmediato. Está usted malgastando tiempo, dinero y energía, y por más que invierta siglos y tesoros, aunque se parta el corazón por ello, jamás logrará levantarlo por encima del más simple diletantismo. No piense en ello. Es una vanidad peligrosa, un abismo insondable que se tragará un genio tras otro sin llegar a colmarse (…) Dicha oportunidad descansa en la posibilidad lisa y llana de obtener la venia de los arquitectos y del público para elegir un estilo y aplicarlo de manera universal.” (Ruskin, 1849, pág. 183)

En el fragmento anterior se puede observar la manera en la que Ruskin arremete contra el hecho de que si no existen ciertas reglas o normativas, simplemente un proyecto no se puede llevar a cabo, o quizás si construirse pero no se obtienen los resultados anhelados. Sin duda la obediencia es para Ruskin elemental en el diseño y construcción.

Como conclusión se tiene que el estudio realizado por Ruskin en los diferentes ámbitos de una construcción es muy específico. El no percibe una construcción en la que el arquitecto no se haya parado a observar el entorno, o planteado el uso de ciertos materiales y cómo afectarán la tipografía de un lugar. De igual manera es muy interesante ver la jerarquización que hace de los edificios y el como un diseño puede afectar la percepción que se tenga de un espacio. Incluso con un solo efecto de luz, se puede llegar a tener cierto sentimiento que no se tenía. Como la forma y la función, los materiales y el entorno van de la mano. La singularidad de mezclar al constructor con la obra y de en un momento dado contemplar mediante un detalle corriente el sentimiento que quedó plasmado en el mismo. Ruskin transforma la idea plana de la arquitectura en algo multidimensional que verdaderamente hace apasionarse por su lectura, va guiando al lector por un valle de segmentos y colores con tanta delicadeza que es difícil dejar de leerle.

Bibliografía

Ruskin, J. (1849). Las Siete Lámparas de la Arquitectura. México, D.F.: Ediciones Coyoacán, S.A.

de C.V.

s.a. (s.f.). Biografía de John Ruskin. Septiembre 17, 2015, de Biografías y vidas Sitio web: http://www.biografiasyvidas.com/biografia/r/ruskin.htm

G.Landow. (diciembre 9, 2006). La vida de Ruskin. Septiembre 18,2015, de Victorian Web Book Sitio web: http://www.victorianweb.org/espanol/autores/ruskin/pm/prologue.html