ENFERMEDAD DE ALZHEIMER (DEMENCIA DE TIPO ALZHEIMER)

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DIAGNÓSTICO DE LA ENFERMEDAD DE ALZHEIMER

El diagnóstico de la enfermedad de Alzheimer basado en los criterios NINCDS/ADRDA comprenden evaluaciones neuropsicológicas y médicas completas. Sin embargo, aun con estas pautas el diagnóstico que arrojan es a lo sumo el de una "probable" enfermedad de Alzheimer, lo que refleja el hecho de que el único diagnóstico seguro sólo puede obtenerse por medio de la autopsia. El instrumento clínico más usado para diagnosticar la enfermedad de Alzheimer es una forma especializada de evaluación de la condición mental conocido como Miniexamen del Estado Mental. Las personas con enfermedad de Alzheimer responden en formas particulares a varios de los reactivos en este instrumento; suelen ser circunstanciales, repetirse y carecer de riqueza en detalle al describen objetos, personas y sucesos

TEORÍAS Y TRATAMIENTO DE LA ENFERMEDAD DE ALZHEIMER.

Todas las teorías sobre la causa de la enfermedad de Alzheimer se concentran en anormalidades biológicas relacionadas con el sistema nervioso.

Perspectiva biológica: Dos tipos principales de cambios ocurren en los cerebros de las personas con enfermedad de Alzheimer. El primero es la formación de nudos neurofibrilares, en los cuales algunas microfibras densamente apiñadas y trenzadas, o diminutos filamentos, de proteína reemplazan al material celular que hay dentro de los cuerpos celulares de las neuronas. El segundo cambio es el desarrollo de placas amiloides, que son grupos de neuronas muertas o moribundas mezcladas con fragmentos de moléculas de proteína. Una teoría relativamente nueva, llamada teoría de la caspasa de la enfermedad de Alzheimer, propone que el beta-amiloide estimula sustancias llamadas caspasas, que se convierten en enzimas que destruyen a las neuronas.

Perspectiva ambiental: se considera cada vez más que los comportamientos relacionados con la salud moderan en forma importante el riesgo genético. Los factores de riesgo conductuales como el tabaquismo, la obesidad y el estilo de vida sedentario pueden aumentar el riesgo de que el individuo desarrolle la enfermedad de Alzheimer.

TRATAMIENTOS MÉDICOS DE LA ENFERMEDAD DE ALZHEIMER

Conforme avanza la búsqueda de la causa de la enfermedad, los investigadores intentan encontrar medicamentos que alivien los síntomas. Hay dos medicamentos han sido aprobados por la Dirección general de alimentos y fármacos de Estados Unidos (U.S. Food and Drug Administration) para su uso en el tratamiento de los síntomas de la enfermedad de Alzheimer. Estos medicamentos, cuyo blanco es el neurotransmisor acetilcolina, son el THA o tetrahidroaminoacridina (también llamada tacrina y que tiene el nombre comercial de Cognex) y el donepezil hidroclorida (Aricept). Ambos medicamentos tienen efectos colaterales el primero en el hígado y el segundo gastrointestinales. Sin embargo, la dosis requerida es más baja y no interfiere en el funcionamiento del hígado. Ambos medicamentos tienen la ventaja de dar al paciente un periodo de alivio de los síntomas cognitivos perturbadores que ocurren en las primeras etapas de la enfermedad. Una segunda categoría de medicamentos se concentraen los llamados radicales libres, los cuales son moléculas formadas cuando el beta-amiloide se divide en fragmentos; se piensa que los radicales libres dañan a las neuronas en el tejido cerebral circundante. Hay varios métodos terapéuticos que se están probando ahora que se concentran en la formación de placas de beta-amiloides.

Manejo conductual de los síntomas: Los psicólogos conductuales están desarrollando estrategias para maximizar el funcionamiento cotidiano de quienes padecen la enfermedad de Alzheimer, orientadas a aliviar la carga de los cuidadores.