ENFOQUE DE SISTEMAS.

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A su vez no hay que perder de vista que los objetivos de los sistemas que se encuentran en la “cima”, pueden llegar a ser vagos o difíciles de definir, por lo que se recomiendan ser omitidos, hasta que se tengan claros los objetivos del sistema en cuestión y después analizar de forma global.

Los objetivos principales, sistemas en la “cima”, pueden ser diseñados para que sean capaces de ser adaptados y cambiados solos. Mientras que los que dependen de estos, mejoran principalmente el desempaño del personal involucrado.

Una responsabilidad adicional importante que tiene el ingeniero en sistemas, es crear los criterios para la selección de los objetivos correctos, comunicarlos a los demás y que en un futuro cooperen confiadamente en su juicio.

Una vez que se ha seleccionado la mejor propuesta se diseña un modelo con las expectativas que pudieran resultar de esta. Que puede ser un modelo que muestre un pronóstico a corto, mediano o largo plazo.

Los modelos pueden ser descriptivos, a través de mecanismos, estacionarios y locales.

Estos modelos deben ser capaces de convertir la información que un dispositivo produce a uno que pueda ser usado para simular el comportamiento del sistema, a través de entradas reales y alteraciones reales.

Una vez obtenido el modelo más apegado a la realidad, se busca optimizarlo, desarrollando técnicas matemáticas, aunque la optimización también requiere en mayor importancia, la sensibilidad en el criterio económico para cambiar los parámetros de “óptimo”, criterio de diferentes suposiciones hechos en el diseño, la incertidumbre de los pronósticos en el ambiente a operar y otras variables que a consideración pudieran tener relevancia.

Una vez que el sistema ha sido optimizado hay que mantenerse enfocado en los objetivos y mantenerse sobre la línea para alcanzarlos, esto es llamado control.

Para la implementación se debe tener todo el proceso bien documentado para ser autorizado. Si es requerido un software y/o hardware, este debe estar integrado de acuerdo a los requerimientos de la solución, e instalarse de acuerdo a lo planeado en tiempo y forma en la ruta crítica.

En la fase de operación ya se pueden obtener los primeros resultados de la solución en el sistema. Si la implementación fue realizada con éxito, se puede evaluar si el desempeño es el pronosticado, y si no lo es, por qué no se están obteniendo y revisar si se documentó correctamente. De ser necesario realizar un análisis para mejorar la operación, ya sea reoptimizando, reentrenando o rediseñando. Y por último, analizar si los resultados mejorados en la operación son los más adecuados.