ESCUELA SUPERIOR DE INGENIERÍA Y ARQUITECTURA.

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El Protocolo de Kioto también nos menciona otros tipos de medidas o acuerdos como, por ejemplo, “promoción de prácticas sostenibles de gestión forestal, la forestación y la reforestación; promoción de modalidades agrícolas sostenibles investigación, promoción, desarrollo y aumento del uso de formas nuevas y renovables de energía, de tecnologías de secuestro del dióxido de carbono y de tecnologías avanzadas y novedosas que sean ecológicamente racionales”.[3] Esto quiere decir que no basta con reducir los Gases de Efecto Invernadero, sino también de ayudar al planeta a regenerarse por sí mismo, con acciones como las arribas mencionadas, hay que tener en cuenta que como “sociedad” seguimos creciendo en número, lo que se traduce en cada vez más espacio necesario para desarrollar actividades básicas, esto es aprovechado por las grandes constructoras, inmobiliarias, corporativos, etc. que con el visto bueno de los gobiernos construyen cada vez más, gracias a esto, se pierden bosques, selvas, ecosistemas enteros que destruimos a nuestro paso, sabemos que esto es y será necesario por la manera tan descontrolada en que vivimos como sociedad, sin embargo tenemos que empezar a cambiar todo esto para que a largo plazo pueda quedar en el olvido. Debemos de dejar atrás este tipo de prácticas y cambiarlas por otras que nos beneficien más y mejor, pero no sólo a unos cuantos, sino a todos.

Otra de las acciones mencionadas en el protocolo de Kioto nos habla del transporte y los desechos, de cómo reducirlos y de ser posible aprovecharlos nuevamente como energía renovable o incluso reciclada; “limitación y/o reducción de las emisiones de metano mediante su recuperación y utilización en la gestión de los desechos así como en la producción, el transporte y la distribución de energía;[4], este tipo de acciones vendrían muy bien a las llamadas “ metrópolis” ya que es aquí donde vemos la mayor concentración de automóviles por habitante o metro cuadrado, esto es debido a que son centros urbanos muy importantes, pero por esto es más importante crear medidas para la amable convivencia dentro de ellas. En la ciudad de México tenemos un ejemplo palpable, de este problema, ya que gran parte del día la ciudad es un caos vial provocado por el excesivo número de autos que transitan día con día, vivimos en una ciudad en la que el 70% de la población ocupa el 30% del espacio en las calles y sólo el 30% de la población ocupa el restante 70%, y la solución que han dado muchos de nuestros gobiernos ha sido el tratar de hacer más “eficiente” el tránsito, sin embargo han fallado en sus intentos, porque con el aumento de la población, lo único que parece es que el problema se hace cada vez más grande, si el gobierno pusiera en marcha más y mejor, transporte público, al grado de que la persona que tiene un automóvil, sabe que al utilizar el transporte público, va a llegar más rápido, más seguro y en un ambiente amable a su destino, decida utilizarlo, decida dejar el coche en casa, de esta manera quitamos automóviles de las calles y hacemos una ciudad más funcional.

CONCLUSIÓN:

Es imprescindible realizar cambios drásticos de manera inmediata en qué y cómo hacemos las cosas, desde lo que hacemos diariamente como individuos, al cambiar malos hábitos, como utilizar el automóvil cuando podemos caminar, al apagar aparatos que no utilizamos, ahorrar agua, etc., esto está completamente en nuestras manos y somos capaces de realizarlas, pero sabemos bien que hay muchas cosas que están fuera de nuestro alcance, como la emisión masiva de GEI, o la sobreexplotación de los recursos naturales; sin embargo y propuestas como el Protocolo de Kioto o las acciones que realizan Asociaciones como GREENPEACE, son de gran importancia para defender nuestro medio ambiente, flora y fauna, lo cual se traduciría en defendernos a nosotros mismos, por lo cual es muy importante volvernos parte de todo esto, de hacernos partícipes, de alzar la voz en nombre del planeta.

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