GEOLOGIA AMBIENTAL Y ORDENAMIENTO TERRITORIAL

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La minería abandonada tiene un amplio rango de impactos ambientales y socioeconómicos. De esta manera podríamos decir que los impactos ambientales más frecuentes de las minas abandonadas están los de paisajes alterados, subsidencia, contaminación del agua, pérdida de vegetación, además de innumerables fuentes de contaminación para el agua superficial y suelo, produciendo de esta manera impactaos socioeconómicos que ocurren porque se altera un bien necesario para la supervivencia humana. Worral et al. (2009).

Para contextualizar en el tema de los PAM y entender su problemática se debe conocer que no todos los impactos ambientales no gestionados son un pasivo ambiental minero; solo lo son aquellos que representan un riesgo, la definición más general de PAM es dada por la CEPAL (2008) que dice que la denominación “pasivo ambiental” hace referencia a los impactos ambientales generados por las operaciones mineras abandonadas con o sin dueño u operados identificables y en donde no se hayan realizado un cierre de minas reglamentado y certificado por la autoridad correspondiente.

También es importante traer a colación la definición de Oblasser y Chaparro (2008) que es una definición adoptada que dice es un área donde existe la necesidad de restauración, mitigación o compensación por un daño ambiental o impacto no gestionado, producido por actividades mineras inactivas o abandonadas que pone en riesgo la salud, calidad de vida o bienes públicos o privados.

En base a estad dos definiciones podríamos decir que se habla de PAM cuando hay una pérdida o un riesgo de pérdida o disminución del patrimonio físico, humano y ambiental.

Por otro lado la remediación y la compensación que se generan cuando hay un pasivo, significan la estimación y valoración del daño ambiental. Entonces, para valorar un PAM se necesita primero identificar el daño y segundo estimar el riesgo que este daño representa. El método que se implemente para valorar los pasivos ambientales mineros depende tanto de la definición adoptada como el marco legal que se defina para gestionarlos. Identificar, valorar y gestionar los PAM es un proceso complejo y requiere grandes cantidades de información. Oblasser y Chaparro (2008).

Los sitios contaminados corresponden a sitios o áreas, de tamaños variables en los cuales por causa antrópica, conocida o no, se han vertido desechos sin adecuado resguardo, estos sitios revisten riesgos potenciales o actuales para la salud humana o para los componentes ambientales que eventualmente entren en contacto con ellos.

Finalmente el tratamiento que se les da a los pasivos ambientales mineros varía de acuerdo con el país, que variara de acuerdo a la legislación usada en cada país, sin embargo están parten del principio de “Environmental liability” o “responsabilidad ambiental”. Este término denota el proceso mediante el cual se transfiere la responsabilidad por el costo de dañar el medio ambiente de vuelta a los que causan el daño y se conoce también como “el que contamina paga”. Arango, Olaya (2012).

De igual manera una de las problemáticas con la idea de PAM es que no hay una definición única, teniendo variaciones de un país a otro.

CONCLUSIONES

PAM es un concepto legal que causa obligaciones de compensar o remediar. Aún sin una definición declarada, la existencia del riesgo de algunos impactos ambientales mineros no gestionados es suficiente como para remediar los daños y mitigar el riesgo de afectar la salud, el ambiente o el patrimonio. En cualquier caso, se necesita información (inventario) y dinero para remediar, mitigar o compensar.

Muchos de los daños ambientales no son reversibles, como por ejemplo los daños a la salud, la pérdida de biodiversidad, la destrucción de un sitio geográfico. Sin embargo, reclamar los pasivos ambientales puede ser útil por dos razones: en primer lugar, debido a que cumpliéndose con los pasivos ambientales logran incentivos y precauciones para que se adopten innovaciones tecnológicas para reducir el impacto ambiental. En segundo lugar, la compensación del daño en forma monetaria puede ser la única manera para que por lo menos quienes se han visto afectados reciban algo, sobre todo en los casos de compensación retroactiva. La compensación monetaria sirve como forma de redistribución de las ganancias producidas por la actividad contaminante. Esta compensación tiene un valor simbólico muy fuerte. Se trata de una reafirmación del derecho de las poblaciones locales sobre su territorio.

REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS:

RUSSI, DANIELA; MARTINEZ ALIER, JOAN; (2002). Los pasivos ambientales. Iconos. Revista de Ciencias Sociales, diciembre, 123-131. Recuperado de http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=50901513

ARANGO ARAMBURO, M; OLAYA, Y; (2012). Problemática de los pasivos ambientales mineros en Colombia. Gestión y Ambiente, 15() 125-133. Recuperado de http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=169424893009

PALMA, C. E. (2003). Evaluación ambiental territorial de los pasivos ambientales mineros de la región metropolitana. Trabajo de grado. Universidad de Santiago de Chile, Facultad de Ingeniería, Departamento de Ingeniería Geográfica.

ZERRAGA D. y FRÍAS O. (2003). Toxicología Ambiental en Minería: Herramientas Para la Evaluación de Impacto. ESAN- Cuadernos de Difusión (8): 15. Lima, Perú. WORRALL A, NEIL, D., BRERETON D. & MULLIGAN, D., (2009). Towards a sustainability criteria and indicators framework for legacy mine. Journal of Cleaner Production 17, 1426–1434.