Guión de Otelo escena I y III ¿No dijiste acaso que en odio lo tenías?
Enviado por Jerry • 23 de Noviembre de 2018 • 969 Palabras (4 Páginas) • 253 Visitas
...
BRABANCIO:
Humildes gracias doy a vuestra alteza… este es el hombre (señalando a Otelo)
DUX:
¿Otelo? Que contestáis en desagravio propio?
OTELO:
(Otelo se acerca a hablar) Ilustre senado, poderoso y reverendo. Que me he llevado a la hija de este anciano, ES CIERTO. Y también me case con ella. De ahí no pasa la suma y extensión de mi delito. Soy rudo de lenguaje y mal dotado de blandas frases que la paz enseña. Desde que tuvieron estos brazos apenas de siete años brío, hasta hace nueve lunas no cumplidas gastaron en la lid y el campamento su esfuerzo todo y poco sé del mundo, si no es de achaques de marcial contienda. Sin embargo si me otorgáis permiso os daré cuenta breve y en términos sencillos del logro de mi amor al ganarme el cariño de su hija.
BRABANCIO:[pic 2]
Una niña tan tímida de alma tan cándida y modesta que de todo se ruborizaba aun a despecho, ¡de prendarse de un monstruo que espanto le causaba!
OTELO:
Mandad por la doncella!, Que hable de mi delante de su padre.. y si me halláis culpable a juicio suyo, no solo despojadme del mando que me habéis confiado sino a condenarme a dura muerte. (Rodrigo y Yago se miran)
DUX:
Que vayan por Desdémona.
OTELO:
Su padre me quería (mirando a Brabancio).. y a menudo me invitaba y cuenta del curso de mi vida me pedía, año por año… de las aventuras, batallas y sitios que corrido había. De cómo me salve de un punto de cierta muerte de mi prisión de esclavo me vendió. Escucho siempre atenta Desdémona el relato y con ansioso oído devoraba mi discurso, notando yo esto aproveche una hora favorable y halle medio conque me pidiera que siguiera dando mi relato. Concluido el cuento me premio con un mundo de suspiros. Juro que a fe, era extraño, más que extraño era sensible. Me amo ella por los peligros que corrido había. La ame yo por condolerse a ellos. Esta es la magia que use tan solo.
(Entra Desdémona)
BRABANCIO:
Ven acá, doncella, ¿A quién entre esta noble compañía debes más obediencia?
DESDEMONA:
Noble padre, a vos educación y vida debo, ambos me enseñaron a respetaros. El deber de hija manda que como a dueño os obedezca. Pero aquí está mi esposo (señalando a Otelo) y cuanto acatamiento a vos mi madre con preferencia de su padre hizo tanto también es justo que yo muestre al moro mi señor.
BRABANCIO:
(Suspirando) ¡Que Dios te valga! No tengo nada que decir. Cuanto mas vale adoptar a un hijo extraño que tenerlos propios (molesto). Moro escucha: De todo corazón te doy aquello que, si ya no fuera tuyo con el alma toda te negaría (Acercando a Desdémona y a Otelo)
Luego todos se retiran excepto Otelo y Brabancio
BRABANCIO:
Ey moro! Ni un minuto dejes la guardia… Burlo a su padre y bien podría engañarte
OTELO:
Respondo de su fe con alma y vida
(Todos se retiran.)
...