HACIA UNA FILOSOFIA Y CULTURA DE UN TALLER DE LOS MATERIALES Y SU CONFORMACION.doc
Enviado por Albert • 4 de Enero de 2019 • 1.529 Palabras (7 Páginas) • 396 Visitas
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Si tomamos como ejemplo la Avenida Perú de la Ciudad de Viña del Mar a propósito de las marejadas que la están afectando, escuchamos las distintas opiniones sobre su eficiencia en el emplazamiento de las rocas que intentan protegerla, del amueblamiento urbano de bancas en hormigón armado empotradas firmes en el suelo, de las luminarias, terrazas de locales comerciales, incluso de edificios en altura que se ven afectados en sus primeros pisos.
Bien, estamos hablando de “Materiales y Conformación” que no responden a las condiciones, que como consecuencia estos se ven afectados. No podremos escapar a la idea que nuestros conocimientos técnicos son demasiado limitados para hablar con plena autoridad acerca de la correcta y mejor forma de estas obras que se encuentran expuestas a la energía de la naturaleza.
Para lo anterior es fundamental el registro gráfico, fotográfico a través de una “Bitácora de Observaciones” que permita internalizar y cultivar nuestra experiencia en el “Saber Ser, Conocer y Hacer” frente al mundo de los materiales en permanente evolución, comenzando por observar primero el contexto donde estos materiales tomarán un orden predeterminado expresado finalmente en una obra o producto “Con Formado”.
Lo anterior es el secreto, el motor que permitirá mover todo lo que se hará durante el desarrollo del Taller.
¿Cuál es la clave de la palabra Taller? En la vida cotidiana podemos tener un taller de carpintería donde se construyen muebles. Casi todas las acepciones de la palabra “Taller” están cargadas de la dimensión experimental, práctica, aplicada, real, no solo teoría.
Tomo un taller porque voy a aprender a hacer algo.
El “Taller” es con las manos en la masa, involucra y le da contenido a la vida, va más allá de una experiencia académica-teórica.
En el aspecto académico además de la dimensión teórica, se trata de incorporar una dimensión práctica, experiencial en su verdadera dimensión, donde la visión de cada uno de los que componen el taller, constituye un punto de vista complementario en la definición de un objetivo o campo de estudios.
Un Taller no es un taller si todos los que están no aportan algo.
Normalmente en un taller no hay profesor delante de los estudiantes dictándoles una cantidad de materia que ellos tienen que aprenderse de memoria. La gracia de un Taller, es que permite enriquecer la definición y percepción de los aspectos de estudio que nos propongamos hacer, siempre y cuando logremos romper la ley del hielo, que normalmente impera en las aulas donde cada uno esta centrado en su propia individualidad.
El Taller trata de sacarles el piso para que puedan abrir los ojos, ante la cotidianidad que cada día les impide ver, lo que tenemos enfrente.
Es uno de los objetivos de “Dar Cuenta, del Darse Cuenta” de la inmensidad del mundo de los materiales, y como ellos se han ido conformando a lo largo de la historia, “Dejar de Pensar, para dar lugar al Presente”, lo que se tiene por delante, y a “Sentir” las experiencias, sensaciones y emociones, considerando desde ya una visión plástica, artística en la selección, manejo y aplicación de los materiales desde la perspectiva del Propósito Formal, en “Común Unión” con la tecnología y las ciencias.
Un Taller como este no se preocupa esencialmente de las materias, aunque las contiene, sino, que se orienta a tomar diversos aspectos y relacionarlos en torno a un objetivo o proyecto que las integra dentro de la “Cultura de los Materiales”.
Existe un malentendido en llevar a cabo la experiencia educativa que consiste fundamentalmente en “Transmisión de Conocimiento”, la didáctica del Taller va por otro camino, casi opuesto, y es la de “Generar Conocimiento” a través de la experiencia, sin negar lo conocido. A lo anterior, se debe tener cuidado al pretender “Tallerizar” cualquier acción enseñanza / aprendizaje.
Se debe incorporar la experiencia de todos los días, de las vacaciones, de los viajes y llevarlos al Taller, descubrir las analogías que existen del punto de vista de la conformación de los materiales, tecnología y procesos que intervienen, entre un edificio que se está Construyendo en “Dubai”, y el queque que está produciendo la abuelita para el cumpleaños de su nieto, ambos para nuestros objetivos conceptualmente cumplen el mismo fin.
Normalmente vivimos con las dimensiones separadas, trabajo, estudio, vacaciones, etc.
Debemos lograr juntarlas y llevarlas a lo que estamos estudiando para potenciarlas y fortificar nuestros oficios, hacer de la Escuela de Diseño, un gran “Taller Pionero” con un espíritu de desarrollo académico, particularmente en los que nos compromete respecto a la conformación de los materiales, consecuente al “Propósito Formal” de nuevos proyectos.
Juan Ciorba Vinz
Materiales y Conformación
Escuela de Diseño
Universidad
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