IMPACTO DE LAS OPERACIONES UNIFICADAS TERRESTRES (OTU) EN EL POSTCONFLITO

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En síntesis, esta nueva organización potencia un Ejército experto en planeación y desarrollo de políticas públicas, cimentado en procesos de alto nivel de gestión en todos sus ámbitos, y lo fundamental, que pondera sobre todo la dimensión humana y hará respetar la convivencia pacífica de los colombianos.

Hoy otro hecho especialmente relevante, marco el comienzo de lo que será a partir de ahora; y mientras las circunstancias así lo ameriten, el derrotero de formación para los nuevos soldados de la patria, basados en los principios fundamentales contenidos en la Doctrina Damasco, para la conducción de las Operaciones Terrestres Unificadas, en donde el Ejército Nacional, Tendrá como roles los Prevenir, Configurar y Vencer, ante los nuevos retos y amenazas.

Hoy los retos para nuestro Ejército son más relevantes, dados los retos que aplica garantizar que las zonas de conflictos no sean ocupadas por otros grupos al margen de la Ley. Es necesario que se haga una efectiva y constante presencia del Estado para garantizar la seguridad de las nuevas inversiones que llegaran gracias al restablecimiento del orden público, además de seguir combatiendo otras formas de amenaza que van a quedar más visibles, e invisibles.

PERSPECTIVAS:

Dentro del contexto de la Naturaleza de la Guerra, está la transformación y evolución, es indiscutible que tiene que ver la decisión política, sin perder el concepto estratégico de las aéreas misiones como son: Defensa Nacional, Seguridad pública, Seguridad y convivencia ciudadana, Gestión del riesgo y atención de desastres, contribución al desarrollo del país, cooperación internacional protección del medio ambiente y recursos naturales.

El posconflicto para las Fuerzas Militares, marcara unos hombres altamente comprometidos con los principios y fundamentos éticos y profesionales de la institución, con una verdadera vocación de servicio y entrega, que deseen proyectarse profesionalmente a lo largo de su vida laboral, en los diferentes escenarios y misiones, que requiera el Ejército Nacional, haciendo de su vida militar un verdadero apostolado de dedicación y sacrificio, en pro de los más altos valores nacionales. El Militar de este nuevo ejército debe ser ante todo, un ser humano integral, un defensor de la vida, un garante de la democracia y guerrero de la paz.

El segundo aspecto, además del obvio entrenamiento físico y mental debe ser el reforzamiento de los valores, la moral y la integridad, que le den Militar Colombiano, la capacidad de discernimiento para que tenga un adecuado uso de sus facultades y nunca las use indebidamente, la sensibilidad y el criterio para identificar las necesidades de las comunidades, y la honradez y entereza para no torcer su deber y ser como hasta ahora, un Héroe de la Patria, digno de la admiración y cariño de un pueblo que ve en su tropa a su amigo; esa imagen corporativa, será la que habrá de destacarse y resaltarse en todo momento, pues nada vale una persona con mucho conocimiento y destreza, sino hace nada bueno con ellas.

Ya en la parte táctica, se reforzaran las tácticas, técnicas y procedimientos operacionales (TTPs), fruto de las experiencias de más de 50 años de ardura combativa, actualizándolas a los nuevos desarrollos tecnológicos, y especialmente a las nuevas formas delictivas que puedan poner en peligro a las comunidades, las condiciones básicas de desarrollo, la seguridad nacional y los recursos naturales, tales como los grupos disidentes que pueden quedar de las FARC, la guerrilla del ELN, la delincuencia organizada con el Clan del Golfo, el narcotráfico, la minería ilegal y las organizaciones dedicadas a la tala ilegal y el saqueo de nuestros recursos naturales. Además de estos objetivos militares, el soldado es ante todo un defensor de la vida, actuando con respuestas eficientes y oportunas ante desastres naturales y accidentes, apoyando las labores humanitarias que le sean encomendadas, para colocar al Ejército al servicio de la comunidad.

Bajo esta nuevo esquema de formación integral del soldado, que en nada se opone o desdibuja su capacidad de combate, sino que por lo contrario la refuerza y legitima, se hará especial énfasis en mejorar las capacidades y efectividad de las operaciones terrestres unificadas, que van a garantizar el control total territorio, la consolidación de la paz, la autoridad del estado y la versión social, que permitan el desarrollo de las comunidades, no solo las que se vieron afectadas por el conflicto, sino de todo el país que podrá continuar con el desarrollo en infraestructura, que permita la explotación de los recursos minero energéticos y agropecuarios.

Para cumplir con este objetivo, la instrucción no solo abarcara las tácticas tradicionales del combate urbano y rural que se han venido aplicado, sino las nuevas tácticas, nuevas maniobras de movilidad, uso moderno de las comunicaciones y del armamento, que le permitan mayor despliegue, con capacidades para realizar operaciones Defensivas, Ofensivas, de Estabilidad y de Apoyo de la Defensa a la Autoridad Civil, hombres altamente eficientes en cuanto al uso de los recursos del Estado, el menor riesgo a los intervinientes y el mínimo o ningún daño colateral, donde las operaciones ya no se medirán por efecto inmediato, sino por la efectividad de la misión en el corto y mediano plazo, y la coordinada interacción con los demás organismos del Estado.

CONCLUSION

En palabras castizas ya no es simplemente saber disparar y maniobrar. El Ejercito del futuro estará listo a cumplir con la Constitución y las leyes, convirtiéndose en una fuerza Multimisión, en un Ejército más profesional, que está a la altura de doblegar y neutralizar los nuevos retos y nuevas amenazas, se requiere de un alto compromiso profesional, disciplina a prueba de todo, entrega y dedicación laboral, y sobre todo rectitud y honorabilidad, que aseguren el mejor uso de los recursos humanos, administrativos y físicos, garantizando así la presencia del Ejército en cada rincón del territorio nacional, con una efectiva y oportuna reacción ante cualquier amenaza o condición de riesgo

En este nuevo y victorioso Ejercito, consiente que las especialidades de combate van a reforzarse, para que cada Unidad Táctica, cuente con los recursos y medios suficientes para que cumpla a cabalidad su misión operacional, cada arma de combate afinara su sol estratégico, y se dedicara a las tareas y responsabilidades que le corresponden, en armoniosa coordinación no solo con las demás armas, sino con los organismos de seguridad, dejado atrás los celos profesionales que en otra era aprovechados por los delincuentes para